La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha presentado una queja ante la Oficina del Defensor del Pueblo por algunas de las afirmaciones realizadas por el Rey en su mensaje de Navidad, al entender que «podrían atacar a los derechos de las familias de los 114.226 desaparecidos de la dictadura franquista».
La frase que pronunció el Rey y que ha soliviantado a los guardianes de la memoria histórica fue cuando dijo que vivimos «tiempos para profundizar en una España de brazos abiertos y manos tendidas, donde nadie agite viejos rencores o abra heridas cerradas», frase que para ARMH es una «declaración política contraria a los derechos de las víctimas del franquismo y de un carácter político que no le corresponde un jefe del Estado no electo y que tiene el deber de representar a toda la sociedad.»
El resto de la crónica está aquí:
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El año que vivimos entre paréntesis
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Se han sentido aludidos por lo de reabrir heridas y agitar rencores? Qué graciosos son.
Actúan por amor al odio. Igual que Hebe de Bonafini y sus secuaces en Argentina.
La patulea en su salsa: si no aprovechan cualquier circusntancia para hacer publicidad no existen. Ellos están en el odio, el revanchismo, lo que se ha dado en llamar guerracivilismo. Gentuza de mal vivir y peor trasegar.