En Religión Digital, cómo no, encuentro a Xavier Pikaza, quien eleva a la monja Lucía Caram a los altares de la defensa más absurda que se puede leer en estas fechas.
Nada más que el título del artículo espanta: A Lucía Caram, en el día de las Candelas
Uno de los párrafos es aborrecible:
«La Virgen de la Luz, popularmente Candelas/Candelaria, es una advocación mariana que ha tenido gran importancia en muchos círculos católicos. A los cuarenta días de haber dado a luz a Jesús ella aparece como fuente y signo de luz para muchísimos cristianos. Por eso quiero vincular a esta Virgen con Lucía, a quien llamaría (¡permíteme!) Lucía de las Candelas.»
Quien desee enfadarse leyendo el resto del artículo está en el siguiente enlace:
Y los obispos y el papa siguen sin adoptar medidas disciplinares. Las herejías, blasfemias y agravios salen gratis en la iglesia de hoy. Los únicos perseguidos, y hasta con saña, somos los católicos. ¿ Quién nos lo iba a decir ?