Calor, cambio climático y la carta papal

|

¿Qué está pasando? Que hace calor; mucho calor, sí. Porque es verano, sí. Pero la anormalidad de esta ola de temperaturas extremas reside en su duración. Los meteorólogos están desconcertados. Están de acuerdo en que es un fenómeno excepcional, pero ninguno se aventura a ponerle una fecha exacta de caducidad. La siguiente crónica está firmada por la corresponsal del diario El Mundo en Roma: «El Vaticano ha decidido aliarse con importantes ecologistas no católicos con el objetivo de unir fuerzas para «salvar el planeta». «Los católicos no podemos conseguirlo solos», explicó este miércoles en el Vaticano Bernd Nilles, secretario general de la CIDSE, una alianza de organizaciones católicas, para justificar que la Santa Sede haya contactado con la conocida investigadora antiglobalización y periodista canadiense Naomi Klein -autora de ‘No Logo’, ‘Vallas y ventanas’ o ‘La doctrina del shock’- para evitar el cambio climático. De hecho, la propia Klein, que ha estado este miércoles en el Vaticano, ha reconocido que no daba crédito cuando recibió la llamada de la Santa Sede, y que también le sorprendió la Encíclica Laudatio Si, del Papa Francisco. «Ya sabía que era un documento radical pero, cuando lo leí, me impresionó su coraje y capacidad para interconectarlo todo», declaró la investigadora. Y añadió: «Incluso la manera poética cómo la encíclica está redactada demuestra que está escrita desde el corazón». También desde el corazón pareció hablar Klein en el Vaticano, donde no utilizó ningún tipo de eufemismo, sino todo lo contrario. Empezó diciendo que ella es «feminista y judía secular», a pesar que en su comparecencia la acompañó el portavoz del Vaticano, monseñor Federico Lombardi, quien estaba sentado a tan sólo dos metros de ella y, sabiendo que era imposible evitar lo inevitable, ya destacó él mismo eso en la presentación de la investigadora: o sea, que es «feminista y judía secular». La autora rebatió las opiniones de aquéllos que consideran que el Papa no debe inmiscuirse en políticas y economías climáticas, y que esos asuntos deben ser tratados por expertos. «Ellos son los que saben sobre el comercio del carbono y la privatización del agua, nos dicen; o cómo los mercados pueden resolver efectivamente un problema», expuso Klein. «¡No estoy de acuerdo!», afirmó la periodista con ímpetu. «Lo cierto es que hemos llegado a esta peligrosa situación en parte porque estos expertos económicos nos han fallado», opinó. «Si no queremos un cambio climático, necesitamos un cambio del sistema», destacó. Es decir, según Klein, lo que deberían hacer todos estos expertos en economía y política es leerse la encíclica del pontífice, en vez de dedicar el tiempo a disertar sobre soluciones que, de momento, sólo han llevado al planeta al abismo. «Pero que no se lean el resumen de la encíclica, que se la lean entera», enfatizó. Las Naciones Unidas celebran una cumbre climática en París entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre. De ahí también que Francisco haya publicado su encíclica justo ahora. Según el Vaticano, dicha cumbre es la oportunidad para que todos, católicos y no católicos, se unan para evitar el cambio climático. Por su parte, los católicos ya han empezado a organizarse: la CIDSE -que agrupa 17 organizaciones católicas de desarrollo de Europa y América del Norte- ha lanzado la campaña ‘Un cambio para el planeta – Preocúpate por la Gente’. La campaña es a largo plazo. Está previsto que dure hasta 2017.»

Comentarios
0 comentarios en “Calor, cambio climático y la carta papal
  1. Tomás,
    difícil que la enciclica sirva para aclarar
    el complicado panorama verde.
    La sensibilidad ambiental ha llegado
    a desarrollarse bastante sin la cara del papa.
    La gran duda ahora es si vale la pena
    tratar de poner en marcha un proyecto
    global impostado sobre la ecología.
    …………..
    La utopía verde funcionará como las cruzadas
    lo hicieron en el siglo xii y xiii.
    …………..
    Tutti insieme, todos juntos….
    con tantos mensajes entrecruzados
    se va a desinflar pronto.
    …………………
    Otros asuntos son más importanes para la Iglesia,
    por ejemplo las Misiones.

  2. Pues a mí más me preocupa la ideología de género, la propaganda que se hace del orgullo gay, mucha gente igual no era ni gay ni lesbiana, pero viendo toda esta propaganda y las fiestas que montan es una incitación gravísima a esos compartamientos, otra preocupación es el aborto, y las porquerías que se enseñan a los niños en el colegio. Que el mundo se acaba, pues Dios lo terminará cuando el lo tenga previsto. ¡cuánta gente se está contaminando el alma de porquerías! y los pastores sin hacer nada.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *