La buena voluntad de muchos españoles católicos contra el independentismo no tiene por qué ir ligada a ansias de revancha o sangre. Uno de los reenviables de whatssapp que me ha llegado esta semana, y que invito a compartir, propone soluciones pacíficas, a fuerza de exprimir las entendederas, en las que ni ceden a esto del estado plurinacional ni a bayonetas en ristre.
Mis felicitaciones por proponer fórmulas incruentas, medalla para los santos patriotas, y mi invitación a reenviar el mensaje:
SOLUCIÓN SIMPLE E INCRUENTA AL INDEPENDENTISMO:
1) Los diputados autonómicos han de jurar cumplir y hacer cumplir la constitución para tomar posesión de su cargo, leyendo el juramento literalmente. Si hacen un acto independentista que vulnera la Constitución, perjuran y podrían ser suspendidos en sus funciones administrativamente hasta que un juez lo confirmara. Se quedan sin voto. Parecido a EEUU.
2) Las comunidades autónomas podrían tener dos cámaras. A la cámara de diputados autonómica se le añade una segunda con la misma representación del senado español, y con funciones específicas. Para cambios en los Estatutos de Autonomía, además, que se requieran 2/3 o 3/4 (como con la Constitución)
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