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El Papa compara a Trump con Hitler

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Extracto de la entrevista del diario El País a Su Santidad, a la misma hora a la que Donald Trump juraba su cargo en Washington, acto presentado entre otros por el Cardenal de NY, Timothy Doland, con invocaciones a Dios por parte del arzobispo y del presidente.

Si alguien no encuentra la comparación indirecta pero eficaz de Trump con Hitler, felicidades.

ENTREVISTADOR: Tanto en Europa como en América, las consecuencias de una crisis […] están dando paso a formaciones políticas que están recogiendo el malestar de los ciudadanos. Algunas de ellas [… ]aprovechan[… ] para construir un mensaje de xenofobia, de odio hacia el extranjero. El caso de Trump es el más llamativo, pero ahí están también los casos de Austria e incluso Suiza. ¿Está preocupado por este fenómeno?

PAPA FRANCISCO: Es lo que llaman los populismos. Que es una palabra equívoca porque en América Latina el populismo tiene otro significado. Allí […] es otra cosa. [… ]Para mí el ejemplo más típico de los populismos en el sentido europeo de la palabra es el 33 alemán. Después de [Paul von] Hindenburg, la crisis del 30, Alemania destrozada, busca levantarse, busca su identidad, busca un líder, alguien que le devuelva la identidad y hay un muchachito que se llama Adolf Hitler y dice “yo puedo, yo puedo”. Y toda Alemania vota a Hitler. Hitler no robó el poder, fue votado por su pueblo, y después destruyó a su pueblo. Ese es el peligro. En momentos de crisis, no funciona el discernimiento y para mí es una referencia continua. Busquemos un salvador que nos devuelva la identidad y defendámonos con muros, con alambres, con lo que sea, de los otros pueblos que nos puedan quitar la identidad. Y eso es muy grave. Por eso siempre procuro decir: dialoguen entre ustedes, dialoguen entre ustedes. […] ¿Las fronteras pueden ser controladas? Sí, cada país tiene derecho a controlar sus fronteras, quién entra y quién sale, y los países que están en peligro –de terrorismo o cosas por el estilo– tienen más derecho a controlarlas más, pero ningún país tiene derecho a privar a sus ciudadanos del diálogo con sus vecinos.

Al poco tiempo, Donald Trump retiró la sección de LGTB de la página de la Casa Blanca, y a las horas empezaron manifestaciones continuadas de colectivos abortistas, gays, lesbianas, islamistas y femenistas. Artistas como Scarlett Johansson criticaron a Donald Trump ante el temor de que pudiese perjudicar a la multinacional abortista Parenthood. 

¿Es normal que el Papa o una parte conservadora del pueblo siempre se rasgue las vestiduras ante líderes imperfectos, pero que quieren contrarrestar el poder de la dictadura izquierdista abortista y homosexualista? ¿Es normal que al mismo tiempo se entusiasmen con abortistas y homosexualistas como Obama?

El Papa Francisco se ha mostrado encantador con dictadores y asesinos como Raúl Castro. Cualquier podría decir: claro, es normal que quiera establecer buenas relaciones con distintos países y sus presidentes, y de ahí podrá obtener beneficios. Y estaría bien si es así con todos, como de hecho el Vaticano ha venido haciendo históricamente. Pero cuando se establecen diferencias, cuando a dictadores de verdad se los abraza y sonríe, se supone por diplomacia, pero a la figura más poderosa del mundo se la compara con Hitler (diplomacia fina), pues entonces es fácil ver que hay algo que no encaja.

Así es normal que estemos perdidos. No es que los buenos callen. Es que los nuestros apoyan entusiasmados a nuestros enemigos y machacan a cualquiera que pueda tocarles. Luego nos preguntamos por qué no surgen líderes con valores. Pues porque saben que los suyos propios les apedrearían, que el Síndrome de Estocolmo es muy efectivo, y que el quedar bien ante los MEDIA ultraizquierdistas da buena reputación.

Si quieres saber a quién sirve una persona en este mundo, pregúntate a quién no le está permitido atacar.

¿Una de las consecuencias más serias de este tipo de actos y declaraciones? Se diluye la referencia del Papa como líder de los católicos. Y lo digo con tristeza. Los cristianos ya no entienden que las opiniones del Papa deban ser guías morales de valor. Para bien o para mal, entienden que todo son opiniones personales. Incluso los católicos más entusiastas de este pontificado  disculpan estas posiciones entendiendo que independientemente de nuestra Fe, el Papa cojea del pié que cojea. Antes, las palabras de cualquier Papa hubieran podido concienciar mínimamente a su pueblo. Ya no. En EEUU los católicos votaron mayoritariamente por Trump, y en Colombia ganó el NO al pacto con las FARC.

Comentarios
15 comentarios en “El Papa compara a Trump con Hitler
  1. Y los asesinos Castro de Cuba a quién se parecen Su Santidad? A usted le encanta visitar la isla- prisión, no?
    Renuncie. No destruya más la Iglesia del Señor. Y no olvide darle la comunión a todos los que viven en adulterio ( Amoris Letitia).
    Cómo extrañamos a Benedicto XVI.

  2. «Es que los nuestros apoyan entusiasmados a nuestros enemigos y machacan a cualquiera que pueda tocarles.» Esta frase resume el artículo y recuerde el articulista lo de «la paja en el ojo ajeno» Este ¿es un artículo escrito por un católico o por un protestante? Los enemigos de la Iglesia de Roma siempre han intentado socavar la autoridad del Papa. ¿Pío XII apoyó al nacismo? ¿Juan XXIIi y Pablo VI eran liberales? ¿Juan Pablo I fue asesinado porque era un reformador? ¿Juan Pablo II era un histrión que sobreactuaba? ¿Benedicto XVI un integrista? Y ahora ¿Francisco congenia con dictadores y asesinos y diluye su referente moral ante los católicos? Efectivamente: «Los nuestros apoyan entusiasmados a nuestros enemigos» Y para muestra este artículo que parece firmado por un Pastor Evangélico en vez de por un fiel de la Iglesia de Roma.

  3. Natanael, yo me he limitado a leer la entrevista en El País, e incluso la puse en mi Muro de Facebook y tenerla a mano para echarle un vistazo de vez en cuando, porque es un pelín larga. Por eso mismo pienso que haya podido ser elaborada de mutuo acuerdo, e incluso que el Papa haya podido conocer previamente el cuestionario de preguntas.
    Insisto que la lectura directa no se puede deducir el título de la noticia, aunque el periódico haya tenido la intención o tentación que así fuera.
    Mientras este Papa sea el Papa de la Iglesia, yo desde luego que me callaré ante de echar más leña al fuego, y me guardaré lo que me malicie para mi.

  4. Toda autoridad, llámese civil o eclesiástica, si no cumple con su deber y atenta contra sus propios deberes, bien sea por traición, por desinformación, por cobardía o por diplomacia, pierde la jurisdicción moral y, por consiguiente, no se puede obedecer lo mal mandado. Ningún Papa puede ir en contra de lo ya definido—.Santo Tomás de Aquino.

  5. «Los cristianos ya no entienden que las opiniones del Papa deban ser guías morales de valor» dice usted. Y usted ¿quién es para arrogarse lo que pensamos los cristianos?.

  6. No es «que las opiniones del Papa deban ser guias morales», es más, es que algunas de esas opiniones, algunas de calado documental, no pueden seguirse por inmorales.
    «asturiano», no hay que retorcer para hacer el titular, hay que tener suficiente formación y capacidad para darse cuenta de que es así, tal vez en el momento de tu comentario no estabas suficientemente lúcido. Acertadísimo artículo que refleja la realidad que muchos creyentes, si quieren estar informados y pueden, viven casi de continuo. Vale todo lo que se hace fuera del ámbito de la Iglesia contra ella y contra la moral pero no vale que alguien piense y obre de otra manera, siendo en muchas ocasiones mas sensata y mas honesta.
    Y el racismo (ya se ha creado una palabra talismán contra Trump), no es tal, es la protección de valores, de fronteras frente a invasiones discriminadas y, finalmente, el tema moral (que apuntó acertadamente, pero sin ser oído, Benedicto XVI) de los deberes hacia los propios y la ayuda a los demás. Habría que hablar hoy de inteligencia social y de INTELIGENCIA MORAL, ésta ultima que busca el verdadero bien de los pueblos y no meros populismos izquierdistas.

  7. Hay que leer la entrevista en el País, y no hacer mucho caso de interpretaciones y selecciones interesadas.
    Desde mi punto de vista hay que retorcer bastante lo dicho por el Papa para sacar este titular.
    Rigor y verdad son imprescindibles para hablar de lo que dice el Papa, que ya él con su palabrería de cura callejero, así se autodefine él, (sol madrugador y cura callejero son señal de mal agüero, dice el refrán) se encarga meter la pata sin que haya que ayudarle.
    Desde luego que el País es le menos fiable para publicar fielmente lo que haya dicho el Papa, pero si él lo ha escogido, allá él, y estoy seguro que el periódico habrá elaborado sutilmente para dejar en el peor lugar posible a la Iglesia e incluso al mimísimo Papa.

  8. Es una cosa que nunca he entendido, que el Papa, sacerdotes y gente muy católica, siempre prefieran a esos personajes abortistas, homosexualistas, que prefieren que nos muramos todos, pero que una hormiga se multiplique. Y en el caso americano no está probado, pero parece ser que han sido ellos los causantes del desastre mundial de los refugiados por originar semejantes guerras. Yo no quiero santificar a Trump porque como mortal tendrá lo que tendrá y las intenciones de poder, pero también digo que el Papa y el resto de los católicos debieran de estar felices de que aunque los lobbys son muy poderosos se pueda frenar a esa agenda maldita de género-abortista-ecologista.

  9. Para dictador y demagogo el que tenemos actualmente en el vaticano. Quizás lo ha aprendido de Hitler y por eso lo cita. Las destituciones inmotivadas en el vaticano están a la orden del día. Por cierto, Obama también controlaba fronteras y retiró el estatuto de refugiados a los cubanos. De esto Bergoglio no dirá nada.

  10. Lamentablemente tenemos que reconocer el ala progresista (izquierdista) del Papa Francisco.
    Y no hay vuelta que darle. Es un peligro para la fe.

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