El sacerdote Santiago Martín hizo unas declaraciones que causaron escándalo a la extrema izquierda. No las hizo en la homilía sino en los avisos parroquiales, y en referencia a la misa de la Sagrada Familia y a la de la catedral de Madrid.
¿Qué dijo tan grave que a tantos hirió? Que los feligreses se tienen que organizar para exigir la puesta de medidas de seguridad; que aunque los terroristas sean los responsables criminales de los ataques, si los alcaldes se niegan a poner medidas también tendrán su particular responsabilidad (el gobierno italiano ya se ha quejado de la seguridad de las Ramblas); que la negación es colaborar con el crimen; y que Ada Colau dijo que poner bolardos significaría que los terroristas hayan conseguido sus propósitos y «Barcelona quiere ser una ciudad en libertad» (lo dijo públicamente el 19 de Agosto, aunque ahora la alcaldesa eluda sus declaraciones).
Ante esto, el arzobispado emitió un comunicado diciendo que los únicos responsables son los terroristas. No recuerdo por parte de ésta u otras diócesis tan rápida exculpación política en el caso del Madrid Arena, del descarrilamiento del tren de Santiago, del Prestige, del Yak-42, etc.
Santiago Martín no insultó a nadie. No llamó miserable ni nada parecido a la alcaldesa. Las acusaciones que hizo fueron argumentadas y evitando los epítetos personales, salvo reconocer que son comunistas o de extrema izquierda, cosa que aunque les duela no es ningún secreto ni ningún insulto, sino la pura realidad.
Lo que ha ocurrido a continuación es gravísimo. La alcaldesa de una de las ciudades más importantes de España ha llamado públicamente a un sacerdote miserable y ha dicho que no tiene vergüenza. Eso es inadmisible y lo lógico es un comunicado urgente del arzobispado expresando una queja formal por el insulto a uno de sus sacerdotes.
¿Es normal que por una opinión, por dura que sea, los poderes públicos insulten gravemente a los ciudadanos? ¿Es normal que los obispos no protejan a sus hijos? ¿Es normal que el arzobispado sí proteja de responsabilidades a los políticos, emitiendo comunicados urgentes?
No estamos hablando del acierto o no de Santiago Martín. Estamos hablando de que se ha insultado públicamente a un sacerdote, y de que el arzobispado no hace nada. Si fuese al revés, imaginen.
La censura de lo políticamente correcto funciona cada vez con más fuerza. El cinismo de la izquierda no tiene límites. En época de Franco, la eliminación de la censura fue uno de sus caballos de batalla. Ahora la están imponiendo ellos mucho más estricta, incomparablemente. Lo del arzobispo, es para m…r y no echar gota. Este hombre es un héroe. Se parte el pecho por…su carrera. Y también, por caerle bien a los enemigos de la Iglesia. Dureza con los católicos. Aco….miento con la izquierda, los gays, la presidenta traidora, la alcaldesa malvada, la asaltacapillas, etc. A los católicos de siempre, parece que nos mirado un tuerto. Llevamos medio siglo recibiendo bofetadas de todas partes. Pero nunca llovió que no parase.
De todos modos no sé porqué la Colau insulta a Santiago Martín si al final ha decidido colocar bolardos. Los insultos de la Colau se vuelven contra ella y la desprotección del Osoro también se vuelve contra él. Han quedado con el culo al aire y le han dado la razón al padre Santiago, que ha vuelto a ganar puntos, muchos puntos, sobre todo para el cielo, que s lo que interesa. http://diario16.com/barcelona-instalara-al-fin-bolardos/
Todo lo contrario que san Juan Crisóstomo, que en su homilía en defensa del caído Eutropio dijo: Nos, que te criticamos cuando navegabas con viento favorable, somos lo que te acogemos ahora cuando lo haces a merced de las olas. Justo lo contrario de los partidarios de lo políticamente correcto.
Tiene usted toda la razón, ¿pero de verdad le extraña viendo la trayectoria del Oso licencioso? como se decía antes cuando las ranas crien pelo. Otro caso sería si alguien insulta al Abuelete Angel. Ahí saldría el Koala soltando abrazos a diestro y siniestro.
Igual le parece que soy un poco duro con el licenciado fantasma, pero es sencillamente no esta a la altura de su cargo. Claro, que cabría preguntase que obispo de España lo esta verdaderamente. Yo creo que en la situación actual de la Iglesia con un Papa al que San Pablo llama anatema, que ha poblado la curia de corruptos, ni uno solo de los obispos españoles se salva. Y si no, dígame ¿Qué han hecho para defender el depósito de la Fe que han jurado defender? y eso sin contar las chorradas que sueltan habitualmente, las últimas las de Omella en su homilía y las de Osoro. Es que antes se pensaba que un sacerdote era alguien «estudiao» pero ahora los psicólogos en los colegios, cuando pasan los test en primaria y algún chaval sale un poco lerdo, ya no le dicen a los padres que lo pongan a trabajar, sino que no se preocupen que va camino de obispo.
Las grandes verdades y el sentido común, juzgando los hechos, no son el fuerte de Ossoro. Usa parcialmente su poder para lo que le agrada. Colau y la cortiizquierda que gobierna por la fuerza y engaño en muchos sitios de España, porque no fueron votados mayoritariamente, sino en minoría, no admite verdades. Se dedican al adoctrinamiento y a extender el cortimarxismo, por eso no quieren que nadie les diga nada. Si alguien se atreve a hablar no le quieren escuchar porque les escuece su inteligencia, su falta de sentido común y su conciencia.
El padre Martín dijo verdades como puños, por eso está escocida la Colau. Y su reacción ha sido de acorde con su personalidad: una zafia okupa. Anda, que ya tiene delito quien la puso de alcaldesa.
Santiago Martín lo está haciendo demasiado bien para estos tiempos tan falsos y mentirosos. Por eso mismo lo ataca la Colau y por eso mismo no lo defiende quien debiera hacerlo, su propio obispo. Si lo hiciera, conociendo al Osoro, es que don Santiago no lo estaría haciendo tan bien. Le ha tocado ser mártir en vida y lo está llevando con mucha dignidad, a diferencia de Osoro, que se pone de rodillas servilmente ante los poderosos, como la nueva iglesia de la misericorditis, más falsa que Judas.
Aguante padre Martín. Es Por Cristo. En todo caso a como siga asi rapidito se encuentra con P.Ballester.
Desde Chile un abrazo
«Normal»… la libertad de expresión solo tiene efecto para la izquierda.