Corría el año 1808 cuando en la cuidad de Madrid, aquel dos de mayo, tras la entrada de los franceses camino a Portugal rompiendo estos el Tratado de Fontainebleau, cargaran los Mamelucos contra el pueblo de Madrid; momento en que se daría el pistoletazo de salida para que se comenzase a fraguar la que hoy conocemos como La Guerra de la Independencia.
El pueblo de Madrid les plantó cara a los franceses sin grandes armas, simplemente con objetos como piedras, agujas de coser de esas que se usaban para de lana y hasta macetas arrojadas desde balcones como este; pero la resistencia popular fue cayendo a pesar de que se les unieron militares como Daoiz, Velarde y Ruiz-Mendoza que junto con muchos madrileños darían su vida en combate.
La represión por parte de Murat fue brutal creyendo haber metido en el alma de los españoles el más atroz de los miedos. Pero el efecto fue el contrario, suscitó en el resto de España el deseo de echar de nuestro territorio a las tropas invasoras hasta conseguirlo por medio de las grandes batallas de la que hoy conocemos cómo Guerra de la Independencia.
No olvidemos, y la historia nos lo recuerda, que detrás de todos estos generales invasores estaba el acomplejado Napoleón Bonaparte. Que considerándose bajito, 168,5 cm, tenía las medidas de los hombres de la época.
Nuestro querido Arzobispo de Madrid también tiene las medidas de su época y menuda época estamos atravesando, nos referimos no solo a las medidas físicas sino, y sobretodo a las medidas intelectuales. Muchos no entendemos por qué ha gobernado acomplejado todos estos años el que ni en el mejor de sus sueños se imaginó que terminaría su carrera eclesiástica en Madrid y mucho menos siendo Cardenal de la Iglesia Católica.
¡Todo le vino grande!….. tenía la altura física porque esa te la dan, sólo hay que estar el día adecuado en el lugar adecuado y a la hora adecuada o sencillamente tener un buen padrino para que te bauticen, pero lo sentimos, para estar en Madrid, a usted le falta talla humana e intelectual.
Se ha pasado sus hasta ahora 7 años de pontificado llorando por los rincones como un parbulario de lo malo que ha sido Rouco con usted, y todavía pensará que su próxima jubilación será por culpa de éste …… no olviden que han pasado 4 días desde que hicimos público nuestro deseo de que pronto suenen las campanas de nuestra catedral para dar la bienvenida al nuevo Arzobispo.
¿Qué hizo mal Rouco cuando nombran, muy sinodalmente, a Osoro Arzobispo de Madrid?
Seamos claros y reconozcamos las cosas. Sí, el Cardenal Rouco debía haberse ido del Palacio Arzobispal para dejar dicho edificio íntegro a Osoro, no tomar esa decisión a su tiempo fue un error.
Efectivamente Osoro el 25 de octubre de 2014, tras su toma de posesión, debería haber podido disfrutar de los 3000 m2 del edificio en el que vive; vamos cómo 20 veces más que donde vive Rouco en la actualidad, aunque de eso hablaremos.
Ahora bien, que Osoro justifique su nefasto pontificado a partir de este hecho, y que siga traumatizado porque vivió no sé cuantos meses en unas monjas a cuerpo de rey ….. nada, absolutamente nada de esto justifica que haya empobrecido económica, intelectual y moralmente una de las mejores diócesis de Europa y que ahora seamos el hazme reír de muchos. Vivir del Complejo Napoleónico es no reconocer su incapacidad de gobierno comenzando por no haber sabido decir a la cara y con claridad a Rouco que debía salir del Palacio Arzobispal y terminando por la situación irrisoria en que está usted dejando a la diócesis de Madrid; estos extremos y los vacíos pastorales, intelectuales y económicos que hay entre ellos le desautorizan moralmente ante sacerdotes, religiosos/as y laicos/as sea por falta de autoridad, sea por falta de valentía.
Nuestro actual Arzobispo no es más que un aprendiz de herrero que no le llega ni a la altura de los zapatos a su predecesor, su maestro herrero al que ha rendido pleitesía durante más de 25 años besando por donde esté pisaba y si no era así, sino que fingía, más rastrero me lo ponen.
¿Cómo se puede haber rebajado a la Archidiócesis de Madrid, joyita de España a niveles tan insultantes en lo pastoral, intelectual y económico, cuando usted la recibió, por más mentiras que nos quiera contar, en niveles más que aceptables? ¿Cómo puede haber maltratado a su antecesor con el peor maltrato que se puede dar entre personas, la ignorancia y el desprecio?
El aprendiz de herrero, tiene muy mala follá.