| 27 mayo, 2023
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https://www.infocatolica.com/blog/cura.php/2305271231-permitame-que-discrepe-senor#more43960
Y como no soy cura, y más deslenguado, añado: No diga usted chorradas. señor Conesa.
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Y como no soy cura, y más deslenguado, añado: No diga usted chorradas. señor Conesa.
Cuando era niño estudiábamos en el catecismo que Dios es infinitamente bueno, sabio, justo… Y nos hemos quedado con bueno. Es infinitamente bueno, pero eso es compatible con ser infinitamente justo, que es de lo que nos hemos olvidado.
Sin embargo eso no implica que sea severísimo, con que sea justo ya vamos bien. Y terminaba la frase del catecismo: …que premia a los buenos y castiga a los malos.
Y no digo que tengamos que obsesionarnos con el castigo, porque además es infinitamente misericordioso, pero hay que pedir la misericordia y Dios nos salva.
Rex tremendæ maiestatis, qui salvandos salvas gratis, salva me, fons pietatis. (Rey de tremenda majestad tú que salvas solo por tu gracia, sálvame, fuente de piedad.)
Porque tenemos esperanza, que es compatible con la justicia de Dios. Y al final recordemos las palabras del Evangelio: sólo Dios puede salvarnos.
En efecto, si monseñor Conesa ha leído la Biblia (espero que sí) se habrá dado cuenta de que Dios es un juez severísimo, mucho más de lo que lo ha sido la Iglesia durante siglos. «Quantus tremor est futurus, quando Iudex est venturus, cuncta stricte discussurus». Letra del oficio de réquiem y el «stricte» no lo puse yo; está ahí por algo.
Qué tío de cura es don Jorge!: y si los seis candidatos del arzobispo de Oviedo, que mañana serán sacerdotes, salen a Vd. ¡Vaya bendición para el Princioado…. Avemaría, salve y mucho más. Juanestella