| 01 diciembre, 2022
A eso lleva perder la simpatía del que manda.
La desgracia de Vives la tiene bien ganada.
A mí, ahí me las den todas:
“No hay nada oculto que no se descubra algún día, ni nada secreto que no deba ser conocido y divulgado.” (Lucas 8, 17)
Veo la cosa muy parada. Desde el nombramiento del auxiliar señor Avendaño, no se ha vuelto a hacer ningún otro. Gerona y Menorca deberían salir este mes o en enero; lo mismo los auxiliares para Oviedo y Barcelona y ya hay que empezar con las ternas para las diócesis menos complicadas (como Sigüenza y Palencia). Cada tres semanas, un nombramiento y Pamplona, Santiago y Santander antes del verano. Si esto no se mueve un poco (no pido acelerones injustificados), el atasco puede llegar a convertirse en colapso.