Innovación que atribuyen a Josito.
Si no fuera el discutido vicario el padre de la criatura sin el menor problema recogeríamos su desmentido.
Uno no tiene el menor problema de homofobia y por ello pienso que el homosexual católico no necesita para nada cultos especiales, como tampoco el heterosexual, sino que caben todos en los de la iglesia. Yo en la misa le doy la paz al que está a mi lado sin que me importe lo más mínimo su condición sexual. Y así como me extrañaría que se convocara una vigilia de oración para heterosexuales lo mismo me ocurre para homosexuales. Por mucho que se le haya ocurrido a Josito si es que se le ocurrió a él.
Y así como digo que no tengo nada que oponer a que en la iglesia estén homosexuales y heterosexuales y que unos y otros vayan a comulgar si están en condiciones de hacerlo, también manifiesto que no entraría en una iglesia ni asistiría a una misa o a otro acto litúrgico que se anunciara para heterosexuales. Me parecería una «innovación» absurda.
Otra excentridad en una diócesis adjudicada en olor a oveja, se dice que a un peregrino, por un Papa que se declara enemigo acérrimo de los trepas y oportunistas, y que tuvo toda la apariencia de una contradicción en los propios términos del Papa, dando la impresión que esto también forma parte de la naturaleza que propició ese nombramiento,que estoy seguro escandaliza mucho más que confunde, porque ya nos vamos conociendo, y mientra hay quien calla en vez de denunciar estos lamentables hechos, y la prensa no se les eche encima, que no lo va hacer, seguiremos con este tipo de demoliciones, porque estultos y necios son hasta decir basta. Antes muertos que temerosos de Dios; ¿o será mala conciencia por acción y omisión?. Pues que conste.
Una nueva mancha en el «brillante» currículo (¿o burrículo?) del señor arzobispo de Madrid.
Completamente de acuerdo en que hacer distinciones en la Iglesia por las inclinaciones sexuales, resulta tan estúpido como hacerlo por los gustos culinarios o por las inclinaciones políticas. Pero a fuerza de ser delicados tenemos el peligro de caer en la confusión, pues lo que están tratando de hacer es considerar admisible la homosexualidad activa, lo que explica que encuentren acogida y protección en ciertos sectores de la Iglesia, los terroristas, la eutanasia o el aborto. Las inclinaciones sexuales nunca han sido objeto de rechazo en la Iglesia, a pesar de que hasta 1970, la homosexualidad ha sido considerada unánimemente como una anormalidad o una desviación del comportamiento. Ahora bien, la homosexualidad activa masculina o femenina, así como la zoofilia o bestialismo, ha sido siempre considerada moralmente reprobable tanto por la Iglesia como por el judaísmo o el islam, con condenas tan duras como el judaísmo con la muerte, lo mismo que el adulterio, el asesinato o el robo. En la Iglesia siempre se orado por los pecadores impenitentes, pues pecadores somos todos y así lo reconocemos en el Ave María, pero mientras no se arrepientan no son admitidos, por eso el templo en el que se propone semejante actuación, además de una majadería, es moralmente aberrante, y hay que decirlo claramente.
Pues los más odiados de la sociedad hoy en día son los violadores. Pero para esos no hay perdón ni misericordia, ni vigilias. ¿no tienen derecho arrepentirse?. No, solamente el linchamiento general de la turba. El disgusto que se van a llevar algunos, cuando vean en el cielo violadores arrpentidos, porque la misericordia de Dios que es más infinita que la nuestra, admite al pecador realmente arrepentido, por uy rojos que hayan sido sus pecados los vuelve blancos como la lejía del batanero. ja ja ja ja
El problema no es el tal Josito: es Osoro.