| 24 junio, 2024
Pues… ¡qué bien!
De lo interno, ni la Iglesia.
Uno y otro tendrán que dar cuenta a Dios si hay algo de lo que dar cuenta.
Nos enteramos que tenía un confesor franciscano y que se confesaba cada quince o veinte días.
Y de que el confesor era algo más joven que el confesado. Aunque haya muerto ya con notables años.
Como es natural no sabemos nada más ya que el secreto de confesión se impone.
Pues constancia queda,