por La Cigüeña de la Torre | 27 marzo, 2015
Es sin duda una de las grandes figuras emergentes de la Iglesia contraria al lío. Hasta es posible que la más. http://fratresinunum.com/2015/03/24/arcebispo-de-san-francisco-os-dissidentes-do-magisterio-da-igreja-nao-devem-receber-a-comunhao/ El arzobispo de San Francisco responde perfectamente a su apellido: Cordileone. Corazón de León. Claro, valiente, referencia segura en días de confusión y de lío… Ante el inmenso cataclismo de potestas tenebrorum se multiplican, gracias a Dios, los obispos que son lo que tienen que ser. Los guías al cielo del Pueblo de Dios. Para otras cosas, maldita la falta que hace un obispo. No todos son malvados. O necios. Y hasta en la conjunción de necios y malvados que no es rara. Hay Cordileones. Son nombres que debemos recordar. Y seguir. Y rezar por ellos. Todavía tiene 58 años. Dios quiera que esa sea la Iglesia de mañana.
«Todavía tiene 58 años. Dios quiera que esa sea la Iglesia de mañana.»
La mayoría de los enemigos internos en la Iglesia son ya por lo bastate mayores.
Los de miedad por ejemplo (la treintena), han tenido tantísimas tentaciones que nadie contrario a la Iglesia se queda dentro. Y nadie que la odie se mete ya a un seminario.
Creo que lo peor de la marea (en el ámbito interno) está sucediendo ahora. El futuro, con la ayuda del Señor sólo puede ir a mejor para prepararse al que será al gran ataque exterior.
Gracias y un saludo,
Miguel
Lo bueno es que pronto nombrara un Obispo auxiliar y tendra mucha infulencia en nombrar los obispos del norte de California.
Los hay, como este, que parecen buscar la gloria de Dios y la salvación de las almas. Otros en cambio, parece que, y sólo digo que parece o dan la sensación y así lo podemos pensar (si tenemos presente la parte más pecaminosa y miserable de la condición humana y de la misma Iglesia) digo que otros como el cardenal, Dolan de Nueva York parecen abiertos a cualquier brisa y cambio de chaqueta, con tal de alcanzar glorias terrenas y humanas. Cómo, da la sensación de haber dado el pego
Respeto y aprecio la valentía en el actuar y la claridad al hablar del arzobispo de San Francisco. Peero….
…hay un pero. Y es que es muy impopular en su diócesis y tiene pocos apoyos. Tiene sublevadas a no pocas parroquias y a una buena parte de los laicos, y su clero, en el mejor de los casos, no le está apoyando en su batalla por que las escuelas católicas lo sean realmente, y en el peor está apoyando a los revoltosos (Véase, p.e. aquí:http://ncronline.org/news/faith-parish/parents-ask-san-francisco-archdiocese-remove-controversial-parish-priests y aquí: http://ncronline.org/news/faith-parish/san-francisco-priests-council-debates-pr-disaster-parish). Por no tener, tampoco tiene mucho apoyo por parte de la Conferencia Episcopal norteamericana, tan admirable en otras ocasiones. Su situación, por triste que sea eso, no es muy distinta de la de don Marcelo o Ricardo Carles en Barcelona (a los cuales sus hermanos obispos también dejaron a los pies de los caballos).
Pero la van a seguir recibiendo, monseñor Cordileone. Entonces, ¿quiénes son en última instancia los responsables de que los fieles sistemáticamente díscolos al Magisterio reciban la comunión sacramental o eucarística?
En tiempos de rabiosa y pertinaz confusión doctrinal y de galopante crisis de fe y de credibilidad en la Iglesia, posicionamientos como el suyo, monseñor, vienen como agua de mayo, como viento fresco y recio. Vale. Pero luego, de la teoría a la práctica, ¿qué?
Conozco una pareja de gays. Pareja. Sé cuál es una de las iglesias a que acuden regularmente. Y comulgan. Ellos viven como pareja, legalmente establecida. Lo que hacen con su sexualidad lo ignoro, ni me incumbe, pero siendo pareja y compartiendo todo bajo el mismo techo es muy probable que compartan aseo, ducha, la cama…
¿Entonces?