| 06 septiembre, 2017
Porque haciendo tonterías no es respetuosa con todas las creencias sino que falta al respeto a una. E igual algunos de sus clientes se enfadan.
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=30354
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Pues a ver dónde compramos entonces. Todas las cadenas son inclusivo diverso respetuoso orgánico también… y demás zarandajas progres.
Es una consigna global: atacar al cristianismo, especialmente el catolicismo. Este año en una cadena echaron ‘La vida de Brian’ en la Pascua de Resurrección ¿casualidad? Ni por asomo, programación.
En Canarias, una obra blasfema e irreverente o mejor dicho, otra obra blasfema e irreverente, la enésima… (contra las creencias cristianas, faltaría más) fue trasladada de localidad porque hubo quejas.
El grupo de ‘actores’ Abubukaka, como su propio nombre indica, hicieron las declaraciones tópicas y típicas de siempre con los clichazos progres: que si la libertad de expresión, que si el IBI de la iglesias, que si historias.
Mentiras en la faz del Señor: todo responde a la consigna de habituar al público a la blasfemia e irreverencia donde subyace un adoctrinamiento satanista que se infiltra en lo opinión pública de forma gradual para que se acostumbre a que eso es lo ‘normal’.
En un vídeo de Muy Interesante https://www.youtube.com/watch?v=7UdhnyTP8Fo
a los 25 segundos esta ‘conclusión’ sobre la infancia de Luis XIV: ‘Debido a una niñez solitaria basada en una religión formal e intransigente, Luis XIV se consideraba el ejecutor de Dios en la Tierra’ y ponen un fundido del Logos… es que no pierden ripio.
El protocolo de siempre, ni un céntimo a estos gaznápiros, que los mantega su Baphomet a cornadas.
S2
Yo ahí no vuelvo a comprar.
Lidl by by. Los que van de inclusivos suelen ser los más excluyentes. Ya lo estamos padeciendo con la nueva iglesia de la misericorditis.
Es verdad, lo he visto esta mañana….
En cuanto he leído la noticia, he dejado, ipso facto, de ser cliente de Lidl.
Respetamos la diversidad, y por eso queremos que no hayan símbolos de esta. Vaya racionamiento de Nobel.
Me voy a plantear seriamente dejar de comprarles. Es un insulto a la fe y al sentido común.