El poder está en Cabrejos, Barreto y Matasoglio y se han cargado al obispo de El Callao, el madrileño José Luis del Palacio y Pérez Medel (Madrid, 18.3.1950, obispo de Benedicto XVI, 2011), del Camino Neocatecumenal y del que os dejo esta semblanza:
«Mons. José Luis del Palacio Pérez-Medel
Obispo del Callao
Nació en Madrid, España, el 18 de marzo de 1950, desde muy joven se interesó por las ciencias humanas, estudiando mucho antes de ser sacerdote diplomado en sociología y psicología. Fue ordenado presbítero en Lima, por el hoy Santo Papa Juan Pablo II, el 3 de febrero de 1985. Completó sus estudios con la licenciatura en Teología y Filosofía, además es Doctor en Teología, Derecho Canónico (Universidad Pontificia de Comillas) y Antropología (Universidad Católica de Murcia – UCAM).
Su vida ha trascurrido con acontecimientos que lo han ido preparando para la misión que hoy realiza. Durante más de treinta años ha sido miembro del equipo itinerante del Camino Neocatecumenal, desarrollando su labor pastoral en diversas ciudades de España como Toledo, Cuenca, Murcia, Alicante, Sevilla, Huelva y Cádiz hasta que en el año 1975 fue nombrado responsable del Camino Neocatecumenal en el Perú, donde llegó en 1976, es decir, lleva en ese país hermano como misionero más de 44 años.
En esa trayectoria que abarca su vida de laico hasta sacerdote ha estado marcada por su cercanía con los hombres y mujeres alejados de la Iglesia, anunciando el Kerigma a miles de personas de diferentes culturas e idiosincrasia, siempre en fidelidad a la Iglesia y al Magisterio.
En el Perú ha recorrido casi todas las regiones de la costa, sierra y selva conviviendo con los más pobres y marginados de la sociedad. Justamente, su experiencia pastoral y el ser responsable del Camino Neocatecumenal en el Perú, le ha ayudado para promover grandes proyectos de carácter social-pastoral en 20 diócesis. Estas obras son la construcción de casas de convivencia para jóvenes y centros de formación técnicos productivos, talleres de capacitación para pobladores de zonas marginales, entre otros. Gracias a esas obras miles de familias hoy viven con una visión de vida diferente donde se les ha devuelvo la dignidad de personas con oportunidades de desarrollo.
En Lima, durante la dura coyuntura política y social abatida por la crisis económica y el terrorismo de los años 80 y 90, el Padre José Luis del Palacio promovió junto con un grupo de sacerdotes misioneros la creación de grandes comedores populares, paralelamente fue predicando el amor de Dios a los beneficiarios y realizando diversos talleres, logrando formar íntegros dirigentes comunales que han llevado la transformación y el autosostenimiento de sus pueblos. Esa obra se fue extendiendo por toda la nación.
En su preocupación por la falta de centros de acogida para la formación de miles de familias fundó la Asociación “Casa de Convivencias Juan Pablo II”, cuya finalidad es la formación integral, familiar y comunitaria de la persona. Esta asociación cuenta con 3 centros en Lima, 2 en Arequipa, 2 en Cuzco, 2 en Piura, 1 en Yurimaguas, y 1 en Iquitos. Asimismo, ha creado Centros para la “Promoción de la Mujer”.
Paralelamente, en medio de muchas limitaciones económicas y logísticas pudo ser testigo de la generosidad de Dios, tomándolo a él como instrumento para llevar adelante nuevos proyectos, como la creación del Seminario Misionero “Redemptoris Mater y Juan Pablo II”, la primera Facultad de Teología (con cientos de alumnos, incluyendo a laicos) y la fundación del Monasterio de las Hermanas ede Claraval, ubicado en la zona más deprimida de la Provincia Constitucional del Callao..
Una nueva misión
El 7 de diciembre del 2011, Su Santidad el Papa Benedicto XVI lo nombra como Miembro Consultor del Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización. Días después, Dios le encomendó una misión nombrándolo Obispo del Callao, el 12 de diciembre de 2011. Fue consagrado Obispo por el Cardenal Rouco Varela en Madrid, el 7 de enero de 2012.
Es así que bajo su lema episcopal “Ama y haz lo que quieras” (S. Agustín), Monseñor José Luis del Palacio comienza su tarea evangelizadora en el Callao. Siendo su primer deseo expresado en su homilía de toma de posesión; “Seguir las huellas de Pedro” y ayudar a los más pobres.
Su gobierno pastoral desde que asumió esta misión se ha basado en tres puntos: Las vocaciones, la educación y cáritas.
Es importante destacar que Monseñor José Luis viene creando y promoviendo espacios donde los laicos puedan formarse para así estar preparados a enfrentar los retos que exige la Nueva Evangelización.
Se viene desarrollando la Caritas, cuyos frutos se ven hoy en día con la puesta en marcha de las Cáritas Parroquiales (más de 50 actualmente) dando así una respuesta inmediata a las necesidades más urgentes de nuestros hermanos más necesitados. Se ha promovido proyectos sociales que viene beneficiando a niños, madres de familia y ancianos. Se han entregado casas en las zonas más vulnerable y de extrema pobreza del Callao, a través del programa “Un techo un Hogar”, con ayuda a 120 casitas.
Por otra parte, Monseñor José Luis promueve un albergue para niñas «Papa Francisco». Esta casa acoge a niñas y adolescentes en situación delicada, (violencia sexual y malos tratos) donde se le brinda vivienda, educación y todo lo que necesitan para poder desarrollarse. tienen entre 4 y 17 años, y a pesar de su corta edad les ha tocado vivir situaciones muy duras. Son pequeñas de distintas realidades: huérfanas, abandonadas, con familias en extrema pobreza, con desnutrición crónica, anemia, enfermedades a la piel, bronquiales, privadas de la educación durante mucho tiempo.
El Callao es una zona de muchas necesidades, aún estando el Puerto y Aeropuerto aquí, existen alrededor de él miles de familias marginadas. Es en ese entorno que el hacinamiento, la delincuencia, y todos esos males sociales hacen necesario una presencia de la Iglesia que lleve una palabra de esperanza. Es por esa razón que Mons. José Luis, recorre con frecuencia zonas como Pachacutec, promoviendo la creación capillas y centros de formación como el Centro de Desarrollo Comunitario (CEDEC), donde a la fecha, desde hace 15 años, viene beneficiando a miles de jóvenes y madres que hoy en día pueden solventar su propia economía y sobre todo con una visión de cooperación con su comunidad.
Como Obispo del Callao: Promotor del Programa social “Un techo un Hogar” junto al Gobierno Regional del Callao, en ayuda a las familias de los sectores más pobres del Callao (más de 300 viviendas entregadas en asentamientos humanos de Ventanilla – Pachacútec).
Ha impulsado la Pastoral de la Esperanza en el Centro Penitenciario “Sarita Colonia”, que es un penal construido especialmente para 500 internos, pero que en la actualidad alberga más de 1500. La Pastoral de la Esperanza ayuda y vela por la dignidad de los internos.
El Obispo del Callao ha promovido la presencia de Capellanes y de agentes pastorales voluntarios.
Los internos extranjeros sufren por no contar con su familia y sin la ayuda necesaria, sumidos en fuerte depresiones. Frente a eso, el Obispo del Callao les brida ayuda, apoyando a la Pastoral de la Esperanza en la manutención de una Casa de Acogida, donde los internos una vez que cumplen su condenan y salen del penal viven temporalmente en esta casa, donde reciben alimento, ropa y un techo donde dormir. A la fecha por esta casa han pasado 750 personas de diferentes nacionalidades, incluidas familias de los internos extranjeros, quienes cuentan con el servicio de un psicólogo y pueden acceder a un centro laboral.
La misión no termina nunca para el Obispo del Callao, su tarea evangelizadora y su opción por los más pobres lo lleva a una trabajo constante de buscar los recursos para poner en marcha su plan pastoral, que es el mismo que el del Papa Francisco: “salir afuera, salir a la calle, a defendernos de todo lo que es clericalismo, de todo lo que es comodidad, buscar a los alejados…”.
Merece la pena destacar también, dentro de su tarea pastoral, el respeto, consideración y buenas relaciones con las distintas realidades sociales y religiosas existentes en la Diócesis4 En su labor pastoral siempre se ha distinguido por su especial dedicación a los sacerdotes, a su formación y al trato directo con los mismos así como a los dos Seminarios que tiene la Diócesis, ambos con numerosas vocaciones. Por lo demás, desde que fue consagrado obispos en enero de 2012, ha ordenado decenas de nuevos sacerdotes para el Perú y otras diócesis hermanas y creado numerosas nuevas parroquias para atender mejor a los fieles.
Entre otros reconocimientos Mons. José Luis del Palacio, está en posesión de la Encomienda de la Real Orden de Isabel la Católica, concedida por el Rey Felipe VI, en 2016, en reconocimiento por los 40 años de trabajo misionero y humanizador en un entorno de pobreza».
Cae sin expediente canónico, sin defensa, sin audiencia del Papa, solo con las insidias de lo peor de aquella Iglesia. Era evidente que los kikos no están en su mejor momento con este Papa. Yo entre José Luis del Palacio y el Camino y los okupas de la Iglesia del Perú de hoy no lo dudo.
Segun Uds. la Iglesia está en guerra?
Justo en estos momentos dramáticos no sabemos perdonar! Vamos, acusamos, calumniamos, difamamos y dejamos a nuestro obispo en la calle. Justo cuando Dios nos llama a acoger, orar, amar, estar seguros en nuestras casas. Que pena! Pero Dios que todo ve, estará viendo a su hijo caminando por las calles , otra vez abandonando y condenado sin darle ni siquiera oportunidad de defenderse
Lo único que puedo decir, es que ya cumplió su misión. Lo demás son solo palabras que se lleva el viento. El mismo pidió que no se hiciera comentarios sobre lo ocurrido. Oremos por que al nuevo Obispo: Administrador pastoral , el Señor lo asista con su Espíritu y lo acompañe en su función pastoral.
El pecado de este señor Obispo es de identificarse mucho con el camino Catecumenal que ha hecho obra, ha hecho demasiado obras que no conozco algún obispo que lo pueda igualar, lo han sacado sin derecho a defenderse como un verdadero cristiano. Dios lo proteja lo cuide y que no deje de evangelizar.
En tiempos de crisis siempre aflora la miseria humana. De lo único que conozco a este obispo es de un reportaje en TV y me pareció que estaba haciendo una gran labor en El Callao. Pero lo más me invita a creer que lo estaba haciendo bien es comprobar cómo celebran su marcha en el blog de cruxsancta (dos palabras, dos mentiras), quienes lo llaman directamente «porquería». Ellos siempre tan educados y cristianos. Si estos sujetos lo celebran, es que será malo para la Iglesia que se vaya, porque ellos cuanto peor, mejor.
Creo que fue justamente misericordiado. Y lo digo aun perteneciendo yo al Camino Neocatecumenal.
Su labor episcopal fue bastante dudosa en materia de eclesialidad, en materia de administración económica, en la relación con los fieles…
Conocido es el caso de un sacerdote del Callao amenazado de muerte, supuestamente, por conspirar contra el obispo. Al hablar con el obispo, en un encuentro del clero, Del Palacio le dijo: “pues que te maten, serás mártir de la fe”…
No lo conozco personalmente, pero conozco gente que ha tenido trato con él. Quizás ha cometido errores, y no haya sido prudente, o empático, pero para nada merecía este ‘despido’ ni ha hecho nada con gravedad como tantos otros para ser ‘removido’ que queréis que os diga. Para mi ha sido, como dice algún otro colaborador, una caza de brujas en toda regla, y la Santa Sede se ha plegado a las presiones.
Esto no tiene que ver con la labor de D. Jose Luis del Palacio en el Callao ni con lo que usted plantea (debe conocer muy poco lo que él ha hecho allí y a él mismo si se cree que apoyara o alentara una amenaza de muerte, eso son una de las mentiras que han utilizado para denigrarlo).
Esto tiene que ver con el peso que la teología de la liberación tiene en la Conferencia episcopal peruana, y con eliminar las realidades no afines a ella. Fueron a por el Opus y se cargaron a Monseñor Cipriani en Lima, y ahora van a por el Camino y se han cargado a D. Jose Luis Del Palacio en el Callao, y el siguiente a por el que irán será D. Javier del Rio (Arzobispo de Arequipa) porque El Callao y Arequipa son los dos territorios donde el Camino tiene presencia real.
Los 40 años de misión de D. José Luis del Palacio dando la vida en Perú no merecen terminar así pero seguimos a Cristo que fue injustamente tratado y ya dice la escritura que el discípulo no puede ser más que su maestro. Dios le dará el 100 x 1.
Manuel tú no eres del camino y dudo que seas católico y cristiano pues tu lenguaje no te pinta como tal yo creo que tú eres de aquellos que han hecho la difamación a este obispo que hemos visto que hecho tanto trabajo por los más necesitados en el Callao. Dicho sea de paso, Todo verdadero cristiano estaría consciente y galardonado con el martirio y si alguien se lo recuerda se lo agradecería.
Por eso creo q tú no eres catolico y tienes la cobardia de decir q eres del camino para nuevamente difamar.
¡Cómo se ve que el bloguer no conoce a este monseñor! Tendría que venirse al Callao y descubrir al verdadero personaje.
Soy Emilio Izquierdo Jimenez, DNI 70633629-P, español y vivo en Madrid. He tenido una gran relación con Monseñor José Luis Del Palacio por ser humilde colaborador de la fundación Pachacútec, un proyecto loable que nació con el piloto español D. Santos Toledano y el obispo Monseñor Del Rio y que con gran acierto, entrega y generosidad ha potenciado Monseñor José Luis. No tengo hacia él mas que admiración de verle siempre preocupado por los mas pobres y hacer su labor episcopal como lo hubiese hecho Jesucristo. Monseñor José Luis tenga usted todo mi apoyo y consideración y rezo por usted como le pido que siga orando por mi familia como lo viene haciendo. !!!El Cielo le va a ayudar siempre!!!. Reciba un fuerte abrazo de toda mi familia
En el episcopado peruano hace tiempo que los Obispos afines a la teología de la liberación han ganado peso y han ido laminando todo lo que no sea afin a ella. En Lima ya fueron a por el Opus y se cargaron a Cipriani , y ahora a por el Camino Neocatecumenal. En Perú el camino está fundamentalmente en El Callao y en Arequipa. A José Luis del Palacio ya se lo han cargado (con artes como las que han salido: injurias, mentiras, etc.) y el que llega laminará a los «kikos» de El Callao. El próximo a por el que irán será Javier del Rio (Arzobispo de Arequipa), si no al tiempo… Muy triste.
Pues es de lo mejor de aquel episcopado. Lo conozco hace mucho tiempo La última vez coincidimos en Jerusalén hace dos años y andaba ya preocupado por la deriva de la Iglesia peruana. Tiene pros y contras. Quizás su carácter no le ha hecho muy popular entre los hermanos del episcopado, pues como castellano es de los del pan pan y del vino vino. Y esto choca con el carácter merengado sudamericano donde un sí puede ser no, o quizás, o puede no ser o todo lo contrario. Tampoco le ha ayudado mucho su significación neocatecumenal, porque siempre hay un cierto sentido nacionalista en esos países a los que les incomoda lo que viene de fuera. En fin pues me parece una mala noticia, en especial para los de El Callao, que creo que le quieren francamente. Y para el resto de la Iglesia que pierde otro obispo de recta doctrina
Conozco su trabajo para él, el propósito de todo su trabajo pastoral era simplemente anunciar a Cristo. Es un verdadero cristocéntrico. Nda de Abu-dabhi, fraternidad sin Cristo en primer lugar.
Atónito: Cuando dí la noticia todavía no se había publicado pero ya ve que era ciertísima.
Los que Usted Sr Cigona dice que son buenos (es su opinión) no tiene ningun problema en decir que son de Benedito XVI, pero los buenos (que tambien los hay) nombrados por Francisco Usted los ignora. Perdon por corregirle, pero los Obispos no son de Francisco, ni de Juan Pablo ni de Benedito, son de la IGLESIA, buenos y malos, santos y pecadores… Esto no es un club de futblol (imagen que a usted tanto le gusta), es la Iglesia de Jesus Cristo onde entra usted y yo…. no hay el club de este papa o aquel, ni de este Obispo ni del otro. Somos todos de la Iglesia, somos todos de Jesu Cristo.
Yo no lo conozco personalmente, pero sí ha gente que lo conoce y todos me han hablado auténticas maravillas de él. Y sobretodo sacerdotes que no son kilos y que están allí en el Callao, donde gracias a este obispo han abierto un colegio católico de verdad, no como en España que son buebistas, católico de verdad, al que va muchos jóvenes de Valencia de misión a ayudarles, y fíjese que no son kilos.
Lo de las amenazas ya me lo contaron, en fin, calumnia que algo queda, como muestra el cardenal Pell.
Pero, ¿nos puede decir en dónde ha sido publicado su cese?, yo por más que busco no encuentro dónde.
Ha salido hoy. Han nombrado un administrador apostólico en su lugar, el agustino norteamericano Robert Prévost, obispo de Chiclayo. Sería interesante saber qué ha ocurrido exactamente.
Yo no lo conozco personalmente, sí tengo la referencia directa de un excelente obispo peruano, sobre la situación penosa de gobierno «kiko» en esta diócesis que, penoso, no le ha permitido ampliar el horizonte como Pastor de todos. O promueves el Camino o te vas de la diócesis, así ha tratado su clero, alguno hasta amenazado de muerte por miembros radicales del Camino… Eso entre otras cosas le ha valido la mitra…..
Yo no lo conozco personalmente, pero sí ha gente que lo conoce y todos me han hablado auténticas maravillas de él. Y sobretodo sacerdotes que no son kilos y que están allí en el Callao, donde gracias a este obispo han abierto un colegio católico de verdad, no como en España que son buebistas, católico de verdad, al que va muchos jóvenes de Valencia de misión a ayudarles, y fíjese que no son kilos.
Lo de las amenazas ya me lo contaron, en fin, calumnia que algo queda, como muestra el cardenal Pell
Es muy cierto lo que dices, Al Capone. Su favoritismo con el Camino, más que con la Iglesia diocesana, era bien notorio.
Cuando hay un nublado, lo mejor es ponerse a cubierto y esperar que escampe. Las instituciones religiosas del tipo que sean han de realizar su función con este o con cualquier pontífice, así que, como los cartujos, a lo suyo sin hacer alharacas de este u otro pontífice. Esto también lo digo por los del Opus, que asquean con su babeo y eso que éste, como buen jesuíta, no los puede ni ver.