Es una página digna de visitar. Mujeres que habían entregado sus vidas al Esposo y a sus hermanos más necesitados y que a Cristo entregaron su muerte al ser asesinadas. En una muestra de crueldad inaudita. Nunca habían hecho el menor mal a nadie. Sólo el bien.
No debemos perder esa memoria santa. Y además histórica. Esas sí que fueron azucenas de Dios y para Dios.
No sé si están las casi trescientas asesinadas. No las he contado. La página que os enlazo es a la vez piadosa e instructiva. Os recomiendo que entréis en ella. Y quizá alguno pueda comprender que los católicos españoles sólo podían estar con uno de los bandos contendientes. El que no asesinaba obispos, doce, sacerdotes y religiosos, casi siete mil, que ya es holocausto, casi trescientas religiosas, numerosos seminaristas y muchísimos católicos.
http://religiosasmartiresenlaguerra.blogspot.com.es/?m=1
Un servidor tiene otra muy parecida de monjas contemplativas en España candidatas a los altares y ahora comenzamos con mujeres laicas y religiosas de vida activa:
http//:lasdiezvirgenessensatas.blogspot.com.es
Yo conozco carlistas que fueron asesinados por la Fe católica. Es decir, su militancia política no quita nada a su martirio. En el año 2000, hubo una beatificación de multitud de mártires y algunos de ellos eran carlistas, mezclados directamente con la politica.
Por otro lado, uno de los cuentos chinos que han difundido los rojos es que los sacerdotes, religiosos y seglares que mataron, eran malos sacerdotes, malos religiosos y malos seglares. Según ellos, no daban ejemplo, eran hipócritas y colaboradores de una situación de injusticia social, que es cierto que existia en aquella época.
Pero el sofisma es de una estolidez que raya en el rídiculo, porque con arreglo a ese infundio, resulta que los rojos mataban a sacerdotes, etc. precisamente porque lo que buscaban era un clero ejemplar, unos religiosos santos, y unos seglares modélicos. A eso hay que añadir que las principales personas consagradas que buscaban eran precisamente los que se sacrificaban y desvivían cada día para ayudar a los más pobres, para ayudar a los menesterosos, para educar a hijos de obreros y enseñar una profesión, etc. Quiero traer a colación al P. Gafo Muñiz, gloria de la Orden de Predicadores, que llevaba a cabo una encomiable labor con los pobres y los obreros, y que fue asesinado en el Madrid rojo. Y como él, muchos más: salesianos que enseñaban a mozalbetes de familias obreras, hermanos de las escuelas cristianas, etc.
Porque los rojos los veían como intrusos en un campo que consideraban de propiedad exclusiva, y no iban a tolerar esta «competencia» que por su fecundidad, neutralizaba a la propaganda marxista y la acción revolucionaria.
Por cierto queridos comentaristas, el Adoretur que escribió varios comentarios sobre el libro de Lutero que tan amablemente nos recomendó el blogero, no es el auténtico Adoretur (que es tradicional) sino el sempiterno troll rojillo, progre, o como le quieran llamar que usurpó esa identidad.
A este paso, cualquier día veréis a Domini canis elogiando a Francisco el liante, el conciliábulo o soltando un rollo filomasónico.
Me permito añadir que haría falta también una página, blog o web, así como libros, donde se destacaran los santos seglares mártires. Nunca mezclados directamente con la política, ajenos a cualquier facción política, murieron mártires por ser miembros de la Adoración Nocturna, o de la Acción Católica (la de verdad, la de aquellos tiempos), o por ser el sacristán fiel al párroco -¡y al Señor!-, o por ser maestros/as cristianos. Son testimonios elocuentes de seglares en esa etapa que conmueven realmente. Al menos, a mí me conmueven.