por La Cigüeña de la Torre | 12 mayo, 2015
En varias ocasiones me he referido a la muy buena relación de Una Voce Sevilla con su arzobispo. Relación que me constaba de primera mano. No faltaban nunca, cada vez que hacía mención de ello, comentaristas que me desmentían asegurando que no había nada de eso, que el arzobispo les perseguía, les maltrataba y ponía toda clase de obstáculos a la misa tradicional. Me consta también el disgusto de mis amigos sevillanos ante esas fantasías que podían fastidiar una acogida por Don Juan José de la que estaban sumamente agradecidos. Pues ese arzobispo tan malo, tan perseguidor, tan impresentable, el próximo domingo va a asistir en coro a la misa solemne con la que Una Voce Sevilla quiere celebrar su décimo aniversario y además pronunciará la homilía de la misa. Con lo que una vez más se muestran felices con su arzobispo en el que verdaderamente tienen un padre que les acoge y acompaña. http://www.adelantelafe.com/domingo-17-mayo-arzobispo-de-sevilla-presidira-misa-tradicional-cantada/ Felicito a Don Juan José Asenjo por ese detalle, importante, con unos hijos suyos que le quieren y están felices con un pastor que también les demuestra su afecto. Ello me hace pensar en un pobre hombre, incapaz de hacerse con su diócesis, ejemplo acabado del error que fue ordenarle obispo y que el único arranque que mostró en su lamentable episcopado fue el de manifestarse absolutamente contrario a la misa tradicional que le desquiciaba. Aunque a su nadedad le desquiciaba todo. Hasta el ser obispo aunque no lo pareciera. No deja de ser curioso que reconociendo su insuficiencia mitral haya solicitado acogida como auxiliar de un arzobispo que no tiene el menor problema con la misa tradicional que se celebra todos los domingos en su diócesis. Así que quien no la quería de ningún modo en Palencia se la va a encontrar en Valencia. Esperemos que eso no le desquicie más de lo que ya lo está no vaya a ser que tras el traslado, que más bien es un descenso a segunda división, venga la renuncia siendo su incapacidad tanta. Pues, muy bien, Don Juan José y no insistamos sobre el pobre hombre que se creía un valiente aborreciendo la misa tradicional. Aunque fuera el único acto de valentía que se le ha conocido en su ya larga vida episcopal.
Don Juan José no es perfecto, nadie lo es salvo Dios Nuestro Señor. Sobre Don Santiago González he escrito mucho y nadie podrá decir que contra él. Todo lo contrario. ¿Creo que es un acierto la decisión tomada sobre él? No. Me parece una equivocación. Pero, ¿qué obispo no se equivoca alguna vez? Eso, los buenos. Los malos, a todas horas.
Lo del capelo es una tontería. Con este Papa pienso que Toledo y Sevilla lo han perdido. Con el siguiente, Dios dirá. Y tanto Don Braulio y Don Juan José lo saben. Por lo que no precisan hacer méritos inútiles. Y también, ¡Vaya mérito el ser acogedor de unos fieles afectos al vetus ordo o prohibir la publicación a un sacerdote que el Papa ni sabe que existe!
Yo confío en que Don Juan José, antes o después, levantará esa prohibición que sólo le perjudica a él pero que sería absurdo considerarla como la medida áurea de su pontificado en Sevilla. Eso es sólo un episodio y de escasísima entidad para valorar un pontificado. Ojalá a todos nuestros obispos lo que les pudiéramos reprochar fuera sólo algo así. Aunque ciertamente desluce el de Don Juan José.
Los de Sigüenza tal vez sean lentos pero suelen responder noblemente. Sobre Una Voce Sevilla no queda ya la menor duda. Los equivocados y los metemal eran otros. Esperemos que lo de Don Santiago González se resuelva igual de bien. Yo sigo apostando por que Don Juan José lo hará.
Parece que muchos no han entendido que las críticas de don Francisco José no van para Asenjo sino para el recién nombrado obispo auxiliar de Valencia y ex-obispo de Palencia.
Blogger dilecto
Tienes fijación con este Arzobispo.
Y la verdad es que,a estas alturas de la película,yo todavía no sé cómo caza la perrina.
Quiera Dios que tú estés en lo cierto,y que sus dos grandes Mentores-D.Laureano y D.Marcelo-,tan santos y tan sabios,hagan del mozalbete un digno Pastor de mi amada Sevilla.
Pero hasta ahora-como el valor en el Ejército-,su valía sólo se le supone…
¡¡¡Libertad para D.Santiago,YAAAAAA !!!
Juan Manuel, creo que se pasa usted, a mi como sacerdote valenciano me ofenden sus palabras. Me parece un juicio demasiado grande. Saludos.
El sacrificio al santo sacerdote Santiago González, Dios lo remunera con el fulgurante ascenso de la web que fundó, Adelante la Fe: AMDG y AM acongoje de Asenjo. Acongoje que le lleva a intentar hacer méritos como este, pero que no le librarán de dar severa cuenta a Dios por haberme privado de los ortodoxos sermones de este santo sacerdote.
Será que Dios le responde a través de Adelante la Fe? Será que la demagogia lampedusa, Dios la responde endilgándole a Bergoglio un cuadro del sátrapa Raul Castro, sobre el naufragio de emigrantes en el Mediterraneo, esperpento de un sátrapa que tiene a sus espaldas cientos de miles de emigrantes cubanos devorados por los tiburones? Responde con la enfermedad en el caso de los FFII? Yo me andaría con mucho cuidado.
No se caliente Vd. Sr. de la Cigoña. Más temple.
Nuestro arzobispo está ausente en Sevilla, y silencioso.
Se ve que está mirando a Roma.
Lo de don Santiago González, ¿ para cuándo?
Supongo que pedir además al Sr. Arzobispo que le levante el castigo tan injustamente impuesto al P. Santiango González es mucho pedir.
Paco Pepe: supongo que habrá oído Vd. hablar del síndrome de Estocolmo…
En fin, espero que ahora que Una Voce Sevilla demuestra tener tan buena sintonía con su amado Arzobispo, consiga de éste que les ceda un templo mucho más conocido y accesible, así como que les designe un capellán que pueda celebrarles la Santa Misa a una hora más propia de los horarios españoles.
No se caliente tanto Cigüeña.
Don Juan José no es malo, yo también lo creo, pero en Sevilla lo sentimos ausente.
No aparece por la Catedral, ni es un hombre al que se le note eucarístico.
Sus misas lo demuestran.
Dios quiera que sólo esté simplemente superado por lo que pasa en la curia de Francisco..
Pero, insisto, en Sevilla los laicos no lo notamos.
Desconocía el detalle que don Francisco José narra sobre el hasta hace días obispo de Palencia, pero confieso que no me sorprendió, tal vez porque casi todos los prelados valencianos causan vergüenza ajena y no deberían haber llegado ni a simples curas, tal es la inutilidad de semejantes acémilas.