Palabras del Papa a la Compañía de Jesús en su Congregación General

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Me parecen excelentes. Y él sabe de lo que habla por ser jesuita. Y con reiteraciones a la obediencia, tan ignaciana.

http://press.vatican.va/content/salastampa/it/bollettino/pubblico/2016/10/24/0759/01702.html

Voy a dejar sin ilustración gráfica, de momento, esta entrada. Hay una hermosa fotografía del P. Arrupe, con sotana jesuítica, nada más ser nombrado prepósito general, de rodillas ante el Papa que creo que era Pablo VI. Y no me apetece el ponerme a concordar fechas. Si hubiera sido Juan XXIII pues San Juan XXIII.

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De Kolvenbach no tengo memoria de la fotografía. Si de la de Nicolás. De pie y de clergyman. Como si de coleguillas se tratara.

Desconozco la del P. Sosa. Si algún lector me la enviara esa pasaría a ser la ilustración de la entrada. De momento la dejo libre.

Pero leed las palabras del Papa. Merecen la pena. Y uno no es entusiasta de todas sus palabras.

 

 

 

Comentarios
5 comentarios en “Palabras del Papa a la Compañía de Jesús en su Congregación General
  1. La clave de todo está en esta frase:»Ignacio invitaba en su tiempo a “hacer contra” al espíritu antieclesial, inclinándose total y decididamente del lado de nuestra Madre, la Iglesia, no para justificar una posición discutible sino para abrir lugar a que el Espíritu actuara a su tiempo».
    La frase precisa de San Ignacio: «Vera esposa de Cristo nuestro Señor, que es la NUESTRA Iglesia Hierárquica; por el mismo Espíritu y Señor nuestro que dio los DIEZ Mandamientos es regida y gobernada NUESTRA Santa Madre Iglesia».
    Una primera consecuencia: Si esto es así no se entiende cómo se puede afirmar que la Iglesia de Cristo no es autorreferencial y cómo se justifica la aseveración de que «todas las religiones son igualmente dignas»(cardenal Tauran) y que no es necesaria la conversión a Jesucristo en la identidad de su divina Persona que fue configurada en su Iglesia por los Apóstoles del Señor.
    Iglesia Jerárquica es decir Iglesia fundada y constituida en ORDEN SAGRADO con los Sacramentos de la Gracia para ir adquiriendo la santidad que Jesucristo nos pidió: «sed santos cual vuestro Padre celestial es santo». Una GRACIA santificante que no se adquiere con suspiros y jaculatorias sino con una vida diaria que sea santificable convertible en Gracia de Dios por el Espíritu Santo, Dios santificador Paráclito actuante en los Sacramentos , señor y dador de vida por quien es regida y gobernada la Iglesia a parte el escalafonado estructural humano.

    «El aprovechamiento no es elitista. En la Fórmula Ignacio procede describiendo medios para aprovechar más universalmente, que son propiamente sacerdotales. Pero notemos que las obras de misericordia se dan por descontadas, ¡la Fórmula dice: «sin que eso sea óbice» para la misericordia! Las obras de misericordia -el cuidado de los enfermos en las hospederías, la limosna mendigada y repartida, la enseñanza a los pequeños, el sufrir con paciencia las molestias…- eran el medio vital en el que Ignacio y los primeros compañeros se movían y existían, su pan cotidiano: ¡cuidaban que todo lo demás no fuera óbice!»
    ¡Los medios sacerdotales! Precisamente una Compañía de Jesús que San Ignacio junto a sus compañeros fundaron como ORDEN SACERDOTAL y tanto cuanto, aunque en estos tiempos se niegue hasta que Jesucristo fuera y sea el Sumo Pontífice, Liturgo de los santos y del Tabernáculo verdadero que Dios fundó y no hombre. Orden Sacerdotal por lo tanto para atraer a los Sacramentos de santificación y actuar en ellos como liturgos de jesucristo con los poderes transferidos en el Sacramento del Orden Sagrado. Y todas las demás dedicaciones a esta finalidad habrán de tender.
    El Pontificado de Francisco ha venido en este sentido a hacer de revulsivo poniendo en primera página que la Salvación ofrecida por Dios por su propia iniciativa sin previo merecimiento nuestro, no se lucra con suspiros o jaculatorias, sino que hemos de vivir la FE cada día. No es un quietismo y tampoco es omisión de deberes, transgresión de Mandamientos, injusticia, inequidad, egoísmo y demás negativismos.
    Lo que quisiereis que hicieran con vosotros…cuando con uno de estos y lo que con uno de estos hicisteis conmigo lo hicisteis…
    No es hacer pobres, es enriquecer a los pobres porque pobres somos. Y no es que primero comer y después filosofar. Es predicar para enterarse, es actuar personalmente en conformidad con la FE, es vivir adecuadamente para adquirir Gracia santificante para seguir viviendo cabe Dios eternamente. para eso hemos venido al mundo. Es lo uno y lo otro. No es lo uno sin lo otro.

  2. Aún no han escuchado la exhortación de Benedicto XVI, ni esta hermosa de Francisco, que escribe con la Mano y borra con el codo desde el avión, con sus innovaciones «magisteriales» y con la gente que elige para ascender, como aquella que rechaza y castiga.

    El Señor suscitará la Gracia suficiente, para que la Iglesia siga adelante.

  3. Benedicto XVI, cuando se dirigió a los participantes de la C.G. XXXV de la Compañía de Jesús, tras la elección de Adolfo Nicolás como prepósito, les recordaba que «la Compañía de Jesús está constituida ante todo para la defensa y la propagación de la fe», a la vez que les solicitaba «vuestro compromiso renovado de promover y defender la doctrina católica en particular sobre puntos neurálgicos hoy fuertemente atacados por la cultura secular».

    «Deseo vivamente que toda la Compañía de Jesús, gracias a los logros de vuestra Congregación, viva con impulso y fervor renovados la misión para la que el Espíritu la suscitó en la Iglesia y la ha conservado durante más de cuatro siglos y medio con extraordinaria fecundidad de frutos apostólicos. Hoy deseo animaros a vosotros y a vuestros hermanos a proseguir por el camino de esa misión, con plena fidelidad a vuestro carisma originario, en el contexto eclesial y social característico de este inicio de milenio», les decía en otro párrafo de su elocución.

    Antes de finalizar Benedicto XVI aludía a la evangelización de los refugiados: «vuestra Compañía sigue trabajando meritoriamente al servicio de los refugiados, que a menudo son los más pobres de los pobres y que no sólo necesitan ayuda material, sino también la cercanía espiritual, humana y psicológica más profunda, que es más propia de vuestro servicio».

    Han transcurrido casi nueve años desde que anterior pontífice les dedicara estas maravillosas palabras a los jesuitas, en las que les manifestaba abierta y claramente lo que la Iglesia demandaba de ellos.

    Los jesuitas han cumplido al pie de la letra lo que les demandaba por aquel entonces el Santo Padre: haciéndole caso omiso.

    (Johnny-Gin)

  4. Siento decir que, en los últimos días, han muerto un marista vallisoletano de 93 años, un jesuita barcelonés de 87 y un lasaliano, también barcelonés, de 94.El reemplazo no está ni se le espera, como dijo aquel célebre don Sabino.Las desórdenes educativas se extinguen.

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