De nuevo González Guadalix pone el dedo en la llaga pustulenta

Si todos los factores se mantienen estables —o sea, si Francisco no se arrepiente y los cardenales no se amedrentan— lo que ocurrirá, lo que tiene que ocurrir, es lo siguiente:

—Bergoglio continuará sin responder permitiendo que sus agentes hablen por él cómo hasta hoy. Continuará llamando «enemigos» y «detractores» a todo aquel que intente obligarlo a cumplir con su obligación.

—Los cardenales, tras una pausa, durante la que quizá podrían emitir una nueva advertencia, se verán obligados a cumplir con su deber y denunciar su herejía por el bien de la Iglesia y la salvación de las almas. Esto debe ocurrir aunque la única razón sea que los fieles están siendo conducidos por este Papa al precipicio del pecado mortal.

—Después de la denuncia formal, por lo tanto, el episcopado, el clero y el laicado quedarán divididos en dos grupos. La parte católica será muy pequeña y, a los ojos del mundo, débil, impotente e insensata. La verdad de la fe será su única arma y escudo.

— El bando opuesto contará con todas las instituciones materiales de la Iglesia, todos sus recursos monetarios, los beneficios psicológicos del patrimonio material de sus templos, escuelas, universidades, hospitales, etc., además del poder político resultante del reconocimiento y el apoyo del mundo secular y de todos aquellos que continúan haciéndose llamar, católicos.

— Bergoglio demandará la aquiescencia de todos los católicos por medio de sus amenazas e insultos habituales. Otorgará poderes a sus allegados a nivel nacional para castigar a sacerdotes, seminaristas, maestros, profesores universitarios, et alii, si no se suman al Nuevo Paradigma.

— Este alejamiento posiblemente sólo podrá ser sanado a través de lo que los canonistas llaman una «sentencia declarativa» estipulando que Bergoglio es un hereje formal obstinado o pertinaz y que es a causa de sus propios actos por lo que pierde el oficio del papado.

— El deber de los cardenales quedará claro: la Iglesia católica no puede funcionar sin un Papa y se verán obligados a convocar un cóncla

ECHENIQUE
Esa solución que tu planteas nunca se va a dar, porque los protestantes de dentro de la Iglesia no son honrados. Ellos pretenden echarnos a nosotros y cambiar la Doctrina siguiendo el esquema marxista que tan bien describiera Orwell, la verdad mentira y la mentira verdad. ¿Por qué al diablo se le llama el príncipe de la mentira?.

D. Francisco.
Que conste que siento un profundo respeto por D. Jorge Gonzalez Guadix, pero creo que hay que ir a la raíz del problema. Y la raíz del problema es un señor argentino.
Ahora mismo ya pasa demasiado tiempo sin que una pléyade de Obispos estén sin preguntar nuevos dubia al trilero de la Pampa. El mas urgente es que su Tanguidad aclare como es posible que en la misma Iglesia católica los obispos atlánticos de Canada declaren que se puede dar la extrema unción y penitencia a un individuo para perdonarle un pecado QUE VA A COMETER EN EL FUTURO INMEDIATO, y como los del Pacífico y Alberta no lo permiten.
!Ay! el principio de no contradicción de Aristóteles, Santo Tomas y Burke, cuanto le duele al gaucho de la trola y sus poliedros. ¿Qué hacen tantos obispos que no le preguntan al Trilero porteño para que se retrate y haga un poquito su trabajo?
Si esta claro que no es que este montando un cisma, sino que quiere proclamar cismáticos a los fieles, ¿a que esperan? nunca lo va a decir abiertamente.
Los católicos tenemos la obligación de desenmascarar a este lobo del cono sur, y obligarle a que se retrate, y o rectifica o que se vaya cuanto antes a evangelizar al glaciar perito moreno.
Ya esta bien de hablar de generalidades, cuando hay un responsable claro de este desgobierno y de esta corrupción, pues no es mas que eso corrupción desde dentro.
No me quiero imaginar si Cristo viniese un poco a la tierra y se pasease un poco por San Pedro con un zurriago, la que iba a liar. Si a los mercaderes por vender les trató así ¿que no hará con sus falsos apóstoles?
O bien los obispos atlánticos son anatemas o lo son los otros. Y es urgente aclararlo. Cuanto mas tiempo pasa mas se pudre la situación y mas favorece a la banda del Tango, Bergoglio, Kasper, Spadaro, Marx, el austríaco, el carrete filipino, etc etc.

Creo que a la Iglesia real, es decir a la de los obispos y sacerdotes fieles, les esta pasando con la herejía Kasperiana impulsada por el Papa, en el Sinodo y en la AL y en sus gestos y palabras como la aprobación de la interpretación de los obispos argentinos de la AL, lo que le ha ocurrido a la Iglesia en general durante decenios con la pederastia. Que se negaba porque no podía ser, y cuando ya no se podía negar porque era, entonces se tapaba y no se veía algo tan desagradable, y mucho menos se tomaban medidas. Y ha tenido que ser la presión del mundo, la que haga que ante los escándalos la Iglesia con Ratzinger haya tomado la decisión de no tapar nada y de hacer pagar a los pederastras sus delitos con la justicia civil.
Al final tarde mal y nunca en un tema gravísimo que ha hecho un daño y un dolor terrible a muchos fieles, quien sabe si apartando de la fe a muchos de ellos.
Pues ahora es parecido, que si la jerarquía, que si la autoridad, que si el que diran, que si no puede ser, que si quien soy yo para juzgar, toda escusa es buena para no enfrentarse al problema de que tenemos a un Papa que pretende cambiar la Doctrina por la vía de hecho aunque sin reconocerlo abierta y honradamente.
Y mientras ellos no hacen nada el Papa y sus secuaces avanzan paso a paso, poco a poco, pero lo suficiente como para que en este mismo momento en Canada según cruces una línea el mismo hecho sea pecado o no. O en Europa si cruzas entre Alemania y Polonia.
La Iglesia ha dejado de ser católica. Lo que no consiguió Azaña ni el comunismo internacional en España lo ha hecho un charlatan porteño. Católica significa Universal y ya no lo es, y tampoco es coherente. Antes podía haber algún obispo hereje que los había, pero era contra el Papa y la Tradición. Ahora no es que el Papa se haya hecho hereje, sino que los linces del conclave han elegido un hereje como Papa. Es que es ver a Bergoglio y mi fe en el Espíritu Santo se tambalea.
El Papa esta haciendo lo contrario de su obligación, en vez de dar luz y claridad esta sembrando de dudas y oscuridad la Doctrina y la moral.
Y no es un error, o un fallo, es un acierto en su herejía. Ni siquiera cuando ya cuatro cardenales les han dicho que se retrate lo hace. Estoy seguro de que su falta de respuesta ante lo que ha acontecido es un delito grave en el derecho canónico por incumplimiento consciente de sus funciones. Y si no debería serlo. No se puede tolerar que un cura o el mismo Papa hagan lo que les de la gana, para eso que se metan a políticos.