5 comentarios en “No todas las congregaciones religiosas agonizan”
Aunque, en realidad, lo que importa y en lo que se fundamenta la vida cristiana, en cualquier vocación, es haber tenido en algún momento de nuestra vida una experiencia fuerte de Jesucristo. Si no es así, todo lo demás deja de tener sentido y se cae.
Puntualización a José Martínez: en la vida religiosa, como tal, que se basa en el Bautismo, no hay ordenación, sino profesión de votos, ya sean temporales o perpetuos, en los Institutos de Vida Consagrada, diocesanos o pontificios, o, bien, formulación de promesas, en el caso de las Sociedades de Vida Apostólica. La ordenación es cosa de los clérigos, sean religiosos o seculares. En el caso de los Institutos Seculares suele haber votos secretos. Los Heraldos del Evangelio, en concreto, no sé lo que serán.
Cuidado, como se entera Bergoglio, Braz (Cardenal brasileño, jefe de la Vida Consagrada) Carbello (número dos, español que quebró la Orden de los Frailes Menores y como premio de Bergoglio fue nombrado a tal posición y elevado a Arzobispo). Los tres han eliminado no pocas congregaciones religiosas con abundantes vocaciones. Han comisariado a los Heraldos del Evangelio que tienen centenares de jóvenes esperando la ordenación. Ellos no quisieron incluir en su revista un artículo en nombre de Bergoglio y por eso los tienen misericordiados. Bergoglio y sus compinches han de pensar que sobran vocaciones sacerdotales. Claro, si fueran a enseñar herejías, seguramente los habrían ordenado.
Aunque, en realidad, lo que importa y en lo que se fundamenta la vida cristiana, en cualquier vocación, es haber tenido en algún momento de nuestra vida una experiencia fuerte de Jesucristo. Si no es así, todo lo demás deja de tener sentido y se cae.
Puntualización a José Martínez: en la vida religiosa, como tal, que se basa en el Bautismo, no hay ordenación, sino profesión de votos, ya sean temporales o perpetuos, en los Institutos de Vida Consagrada, diocesanos o pontificios, o, bien, formulación de promesas, en el caso de las Sociedades de Vida Apostólica. La ordenación es cosa de los clérigos, sean religiosos o seculares. En el caso de los Institutos Seculares suele haber votos secretos. Los Heraldos del Evangelio, en concreto, no sé lo que serán.
Un comisario por acá.
Normal, se busca lo auténtico, no los remedos.
Cuidado, como se entera Bergoglio, Braz (Cardenal brasileño, jefe de la Vida Consagrada) Carbello (número dos, español que quebró la Orden de los Frailes Menores y como premio de Bergoglio fue nombrado a tal posición y elevado a Arzobispo). Los tres han eliminado no pocas congregaciones religiosas con abundantes vocaciones. Han comisariado a los Heraldos del Evangelio que tienen centenares de jóvenes esperando la ordenación. Ellos no quisieron incluir en su revista un artículo en nombre de Bergoglio y por eso los tienen misericordiados. Bergoglio y sus compinches han de pensar que sobran vocaciones sacerdotales. Claro, si fueran a enseñar herejías, seguramente los habrían ordenado.