Algo curioso: en el centro, hacia donde todo confluye, ¡un anfiteatro! Es que se trata siempre de proponer como objetivo un sincretismo-espectáculo pagano
Repugnante, repulsivo y asqueroso, como todo lo procedente de Roma desde el infausto, nefasto, funesto, macabro y diabólico día de marzo en que cierto señor fue elevado al mando de la Iglesia.
¿Cuando venga el Hijo del hombre encontrará fe en la tierra?: sólo la del resto fiel, porque el otro resto sólo cree en el hombre dios. Si el papa alaba un espacio donde se pone de manifiesto que todas las religiones son igual de verdaderas, es que en el fondo no cree que ninguna sea verdadera o dicho de otra manera: en el fondo cree que todas son igual de falsas. Y este hecho confirma lo que muchos pensamos: que el papa sólo cree en la capacidad del hombre para dirigir su destino. Y lo peor de todo es que esto se propaga y se copia. Pérdónanos, Señor, porque no sabemos lo que hacemos.
El espíritu de la encíclica «Fratelli Tutti» es que las religiones está al servicio de la fraternidad mundial». Una consecuencia no prevista, o si prevista no deseada es que si todas las religiones (se puede concluir con estos mensajes interreligiosos) son camino de salvación, para que las misiones, repito para que las misiones?, tenían sentido cuando nuestra Iglesia era Una, Santa, Católica, Apostólica y romana.
Hasta cierto punto es lógico… de logia, se entiende.
Algo curioso: en el centro, hacia donde todo confluye, ¡un anfiteatro! Es que se trata siempre de proponer como objetivo un sincretismo-espectáculo pagano
Repugnante, repulsivo y asqueroso, como todo lo procedente de Roma desde el infausto, nefasto, funesto, macabro y diabólico día de marzo en que cierto señor fue elevado al mando de la Iglesia.
No se ve la imagen… quizá las palabras sí eran necesarias…
¿Cuando venga el Hijo del hombre encontrará fe en la tierra?: sólo la del resto fiel, porque el otro resto sólo cree en el hombre dios. Si el papa alaba un espacio donde se pone de manifiesto que todas las religiones son igual de verdaderas, es que en el fondo no cree que ninguna sea verdadera o dicho de otra manera: en el fondo cree que todas son igual de falsas. Y este hecho confirma lo que muchos pensamos: que el papa sólo cree en la capacidad del hombre para dirigir su destino. Y lo peor de todo es que esto se propaga y se copia. Pérdónanos, Señor, porque no sabemos lo que hacemos.
El espíritu de la encíclica «Fratelli Tutti» es que las religiones está al servicio de la fraternidad mundial». Una consecuencia no prevista, o si prevista no deseada es que si todas las religiones (se puede concluir con estos mensajes interreligiosos) son camino de salvación, para que las misiones, repito para que las misiones?, tenían sentido cuando nuestra Iglesia era Una, Santa, Católica, Apostólica y romana.