| 20 septiembre, 2023
«Terminamos con una advocación poco conocida, nuestra imagen de hoy, pero evidentemente muy necesaria en estos tiempos, nos la hace llegar uno de nuestros lectores. Buen momento para rezar a la Santísima Virgen Maria bajo el título de Destructora de todas las herejías, Exterminatrix hereticorum, En España es venerada con el nombre más castizo de Nuestra Señora del Garrote, derivada de la Inmaculada Concepción.
Pues María, Exterminatrix Hereticorum , ¡Ora Pro Nobis!»
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Pues heréticos hay muchos que veneran a la Virgen con un celo idólatra, casi. Busque usted el vídeo que se ha hecho viral de unos fieles sevillanos ante la salida de la imagen de la Divina Pastora. Lamentable.
Es Nuestra Señora del Socorro. En la imagen, que está en la iglesia de San Francisco, en Montefalco, blande un garrote que amenaza no al niño que pide la protección de la Virgen, sino al demonio.
Si Specola quiere promocionar una advocación mariana relativamente nueva, que traduzca bien. Debe ser «Exterminatrix haeresium», no exterminatrix haeroticurum, que significaría exterminadora de los herejes.
La advocación se apoyaría en la encíclica de S. Pío X «Ad diem illum laetissimum», que dice:
«Sic porro rursum conficitur Virgini augustae hoc dari merito ab Ecclesia, cunctas haereses solam interemisse in universo mundo»,
y que viene a ser:
«Y así se logra el que la Iglesia diga merecidamente a la Virgen soberana que ella sola hizo desaparecer todas las herejías del mundo universo.»
Por tanto, la Virgen destruye las herejías, no a los herejes como pretende el latín bárbaro de Specola.
Que la Virgen del Socorro, Exterminatrix haeresium, interceda por nosotros.
Y que extermine las herejías, sí. La aclaración semántica sobra a cualquiera que tenga dos dedos de frente,ya que exterminar al hereje no significa literalmente acabar con él, sino con su herejía;del modo en que exterminar a un enfermo es acabar con su enfermedad,devolviéndole la salud.
¿El garrote ?Pues sin salir del mundo de la medicina,que me toca tan de cerca,bien se puede comparar con un bisturí, o con tantas y tantas técnicas médicas invasivas como hoy se utilizan…¡para curar!.
¿Estamos,señoritos?
Que sois tan fisnos,tan fisnos…,que os la cogéis con papal de fumar.
Personalmente,voy a incluir diariamente en las letanías lauretanas la advocación
de Santa María del contundente Garrote;pues,empezando por mí mismo,anda que no me va a venir de dulce un buen garrotazo «aliquando»…
Señorito Carlos: para fisnos, vuesa merced. Saludos cordiales.
Garrote-pero no vil-,
Da a estos herejes,Señora;
pues nos gobiernan ahora
los nietos de Pollas Gil.
Tú,Madre Buena y Gentil,
Medianera;Intercesora…,
por esta tu Iglesia Ora,
cual siempre en años dos mil.
Mira que la Sacra Barca
-entre tormentas-,zozobra;
y que el infierno se cobra
lo más preciado del Arca;
que la tempestad no es parca;
que la Santidad no sobra;
que el mundo, en su contra, obra;
que la bestia a muchos marca…
Mira,sí, con tu Ternura
a estos hijos desnortados,
que van creciendo en pecados;
que van menguando en donura…
Pues Tú Eres La- Toda- Pura,
Límpianos con tus Cuidados:
No no Dejes desolados…
«Vida…Esperanza…¡Dulzura!».
Yo no pienso invocar jamás a la Virgen con un título tan espantoso como ese, que me parece un insulto y una blasfemia.