14 comentarios en “Los jesuitas de Valencia muy pro LGTBI”
TIRAR LA PIEDRA Y ESCONDER LA MANO:
«Lo sucedido el pasado viernes en la frontera de Melilla es consecuencia de una política migratoria deshumanizadora»
«Entreculturas, Alboan y el SJM demandan una revisión de las políticas europeas en materia exterior. El desvío de fondos de cooperación para control migratorio debe acabar de manera inmediata»
La vida es un don de Dios: Dios nos la da, y solo Él la puede quitar. De modo que cualquier muerte violenta es reprobable. Las de la banda asesina ETA también, por mucho que los arrupìtas pretendan equiparar a las víctimas con sus verdugos, instando a los damnificados casi a pedir perdón.
Y en el caso que nos ocupa, los arrupitas están siempre de parte del que infringe la ley. Describen a los grupos organizados que tratan de entran en España ilegalmente vía uso de una violencia cada vez más extrema como víctimas inocentes. Y ni una palabra de consuelo ni de aliento para los policías y guardia civiles que son brutalmente atacados por una turba de salvajes.
Para más inri, los arrupitas se quitan de en medio: que entren todos, pero que ninguno vaya a cualesquiera de sus casaas cada vez más vacías porque el arrupismo es una manada zombi, en estado terminal. Y también, que les mantengamos los que trabajamos, mientras ellos viven sin dar un palo al agua a cuerpo de rey.
Ya no se acuerdan de las palabras huecas que pronunció en septiembre de 2013 Francisco I el destructor, en el sentido de que los conventos vacíos no eran para venderlos y convertirlos en hoteles de lujo, sino en morada de estos infelices refugiados. En Bilbao tenemos el ejemplo: la céntrica residencia arrupita, cerrada por falta de moradores, fue vendida por 4,5 millones de euros y convertida en un horel de lujo. Mientras, los más desfavorecidos siguen pidiendo limosna a la puerta de la iglesia del Sagrado Corazón, que linda con el referido hotel de lujo ante la pasividad de los arrupitas que lo regentan, auténticos paladines de la caridad cristiana según las enseñanzas de Jesucristo…
Quien no ama al prójimo no ama a Dios. ¡Cuánto odio leo en los comentarios! Un bautizado hijo de Dios no trataría así a un hermano. Convertíos y creed en el Evangelio
El que envenena la doctrina para perder a las almas no ama a su prójimo, sino que busca fríamente su destrucción. Yo no cambio mi destino eterno por el de nadie así te pongas tú cómo te pongas; y en lo que pueda contrarrestar el funesto mal que esparcen, pues ya ves.
Pero vamos a ver, ¿a estas alturas nos asombramos de semejante cosa? ¿Acaso no estamos acostumbrados a la ‘creatividad de los arrupitas?
Es que eso no es ni siquiera noticia.
TIRAR LA PIEDRA Y ESCONDER LA MANO:
«Lo sucedido el pasado viernes en la frontera de Melilla es consecuencia de una política migratoria deshumanizadora»
«Entreculturas, Alboan y el SJM demandan una revisión de las políticas europeas en materia exterior. El desvío de fondos de cooperación para control migratorio debe acabar de manera inmediata»
https://infosj.es/noticias/19088-lo-sucedido-el-pasado-viernes-en-la-frontera-de-melilla-es-consecuencia-de-una-politica-migratoria-deshumanizadora
—o0o—
La vida es un don de Dios: Dios nos la da, y solo Él la puede quitar. De modo que cualquier muerte violenta es reprobable. Las de la banda asesina ETA también, por mucho que los arrupìtas pretendan equiparar a las víctimas con sus verdugos, instando a los damnificados casi a pedir perdón.
Y en el caso que nos ocupa, los arrupitas están siempre de parte del que infringe la ley. Describen a los grupos organizados que tratan de entran en España ilegalmente vía uso de una violencia cada vez más extrema como víctimas inocentes. Y ni una palabra de consuelo ni de aliento para los policías y guardia civiles que son brutalmente atacados por una turba de salvajes.
Para más inri, los arrupitas se quitan de en medio: que entren todos, pero que ninguno vaya a cualesquiera de sus casaas cada vez más vacías porque el arrupismo es una manada zombi, en estado terminal. Y también, que les mantengamos los que trabajamos, mientras ellos viven sin dar un palo al agua a cuerpo de rey.
Ya no se acuerdan de las palabras huecas que pronunció en septiembre de 2013 Francisco I el destructor, en el sentido de que los conventos vacíos no eran para venderlos y convertirlos en hoteles de lujo, sino en morada de estos infelices refugiados. En Bilbao tenemos el ejemplo: la céntrica residencia arrupita, cerrada por falta de moradores, fue vendida por 4,5 millones de euros y convertida en un horel de lujo. Mientras, los más desfavorecidos siguen pidiendo limosna a la puerta de la iglesia del Sagrado Corazón, que linda con el referido hotel de lujo ante la pasividad de los arrupitas que lo regentan, auténticos paladines de la caridad cristiana según las enseñanzas de Jesucristo…
Una prueba irrefutable de que los jesuitas están en trance de desaparición. Para hacer su función ya tenemos a Podemos.
los pérfidos jesuitas, como lacayos de satanás, demostrando su satánica perfidia una vez mas.
¿Sólo los jesuitas de Valencia?
Quien no ama al prójimo no ama a Dios. ¡Cuánto odio leo en los comentarios! Un bautizado hijo de Dios no trataría así a un hermano. Convertíos y creed en el Evangelio
El que envenena la doctrina para perder a las almas no ama a su prójimo, sino que busca fríamente su destrucción. Yo no cambio mi destino eterno por el de nadie así te pongas tú cómo te pongas; y en lo que pueda contrarrestar el funesto mal que esparcen, pues ya ves.
ningún odio, el amor al prójimo implica obligatoriamente denunciar el pecado que puede condenar al prójimo mismo.
Martín, no hay contradicción entre Verdad y Amor al prójimo. Sí la hay entre la Mentira y el Amor al prójimo.
Anunciar lo que la Iglesia enseña sobre la homosexualidad es amor verdadero
Ocultarlo, o manipularlo, es falta de caridad elemental hacia el prójimo.
Oponer Caridad a Verdad es marca característica del demonio.
Pero vamos a ver, ¿a estas alturas nos asombramos de semejante cosa? ¿Acaso no estamos acostumbrados a la ‘creatividad de los arrupitas?
Es que eso no es ni siquiera noticia.
Ellos, su compañero de orden James J. Martin, y yo, no estamos en la misma iglesia.
Lo que seguramente son.
Ley de Moisés: El que lo parece lo es.
Ley de Mahoma: el que da como el que toma.
Repulsivo, repugnante y repelente. Cuanto antes se extinga la Simpañía del Diablo, tanto mejor para la Iglesia.