Quedan apenas 210. De los que más de la mitad deben ser octogenarios.
http://www.hermanoscapuchinos.org/comunidades/europa
La relación de sus lugares y el número de sus miembros es angustiosa. Ya apenas les queda nada. Es más que evidente que no han sabido atraerse juventud. Sus intentos desde hace cincuenta años han sido baldíos. ¿Alguien piensa que cuatro abueletes fracasados van a conseguir algo ahora con los mismos métodos y muchos más años? Ni al que asó la manteca.
Las órdenes y congregaciones religiosas, masculinas y femeninas, en su inmensa mayoría se han querido suicidar. Y lo han conseguido. Los capuchinos también.
Dice de España, pero es evidente que faltan las comunidades de Cataluña, que debe ser una Provincia distinta. Porque aquí todavía hay unos cuantos, y la mayoría….
primavera bergogliana! estafa total! por cierto, que el último que quede, que apague la luz.
Con el permiso de Don Francisco José, pues este es su blog, y al tratar hoy el tema de los Capuchinos, me ha venido a la memoria el recuerdo de tantos religiosos y sacerdotes de la Orden Franciscana que conocí y traté en el Convento de Medinaceli: El ya lejanisimo P. Villalobos, el P. Laureano, el P. Orencio Llamazares y su hermano el gran devoto de María, el P. Marcial, el P. Buenaventura, el P. Pelayo, el P. Diego, el P. Bernardo, el P. Generoso, el P. Camilo, el P. Marcelino, el P. Segismundo, y otros mas, para mi ya de un segundo orden. Que Dios les haya dado el premio de sus desvelos y trabajos. Personalmente, guardo un gratísimo recuerdo emocionado de todos ellos. El bien inmenso que a mi me hicieron con sus predicaciones, en aquéllas novenas, sólo Dios lo sabe, y en mucha parte, debo mi perseverancia en la fé, a sus indicaciones y consejos. Estos santos y buenos sacerdotes jamás me decepcionaron y marcaron una senda en mi vida, que aún hoy sigo. Sirvan estas lineas como homenaje sentido a sus personas y a su labor sacerdotal, que en mi, ciertamente, no quedó estéril. Ya, por mis años, estoy cada día mas cerca de ese encuentro feliz en la Patria celeste con todos ellos, en que cara a cara y uno por uno, les abrazaré y les diré: GRACIAS. Laus Deo.
He visto la lista de comunidades en la web de los Capuchinos y en cinco de ellas el número de hermanos es cero, hay otra de un único hermano. Para llamar comunidades a eso seguramente han seguido el criterio matemático según el cual existe el conjunto vacío y existen conjuntos unitarios.
Lamento la desaparición de la vida religiosa, es un vacío enorme que queda en el Cuerpo Místico. Me alegra la rápida desaparición de muchas de las órdenes religiosas actuales, son tumores malignos en el Cuerpo Místico.
Los capuchinos de Logroño tienen una buena parroquia: Valvanera, y un colegio : Rey Pastor. En la parroquia populismo, poca doctrina y poca liturgia en condiciones, absoluciones no auriculares y muchos niños de comunión, más de 300 al año y no precisamente de su parroquia, sino de otras en un ejemplo de poca lealtad con las otras.
En Logroño los religiosos tienen las mejores y más ricas parroquias: carmelitas, claretianos, capuchinos, franciscanos y jesuitas.
Otro convento disponible par recoger inmigrantes. Ah se me olvidaba que está en curso una operación de venta. Eso acoger a los inmigrantes en vuestras casas, que nuestro conventos valen demasiado dinero.
Se lo tienen bien merecido, que desaparezcan y cuanto antes, mejor. Pongo un ejemplo para ilustrar lo que digo. Todos ustedes recordarán el dantesco suceso ocurrido en Jesús de Medinaceli hace ya bastantes años con acuchillamiento incluido. Uno de los frailes protagonistas fué el padre Carrión, ya fallecido hace unos años. Cuando llegó a la Basílica, quitó, suprimió, la exposición del Santísimo que había en el templo los viernes y los domingos y durante las Flores del mes de Mayo. Todo su afán fué quitarle culto al Señor. Aquel suceso, motivado porque un fraile queria ver telecinco y el otro antena 3, fué sin lugar a dudas un castigo de Dios y , estoy convencido de ello, marcó el aceleramiento del declive de los capuchinos. Nunca mas volví a dirigirle la palabra al que considerté un indigno religioso cuando me le encontré varias veces en el convento de Usera. Aquéllo me dió que pensar que de Dios nadie se burla y esto que comento, es la prueba de ello. Ya casi no voy por Medinaceli desde la tragedia que contaminó las navidades aquéllas. Diría mas cosas, pero por caridad, debo callarlas. No me agrada ir por allí. Siento como que hubiera algun tipo de presencia maligna, rara, no buena. Por eso, como dice el Evangelio, no se cosechan. uvas de las zarzas. Han echado sus perlas a los puercos y así les va. Cuanto antes desaparezcan, mejor. Laus Deo.
Tiene usted razón en todo lo que ha dicho. Y en lo que calla por caridad, que por desgracia es mucho. En Medinaceli ya hace mucho que no queda nada bueno. La comunidad no existe como tal: son un grupo de señores totalmente mundanizados que viven en los apartamentos de lujo que se hicieron construir en lo que fue el antiguo y sobrio convento capuchino. Y viven muy bien, ya que la Basílica proporciona unos ingresos enormes, por el culto a Jesús de Medinaceli. Entre ellos se llevan muy mal, algunos incluso llevan años sin hablarse. Y de las comunidades de Usera, Cuatro Caminos y sobre todo El Pardo, mejor no hablar. ¿Para qué? Mejor que desaparezcan, sólo es cuestión de tiempo, y muy poco…
Asistía yo al bautizo del hijito de unos buenos amigos míos en la parroquia capuchina del Sagrado Corazón, de Usera. Recuerdo perfectamente que era un sábado, día tradicionalmente dedicado a Nuestra Señora. El oficiante fué el P. Celestino Baños. En toda la ceremonia, no nombró una sola vez a la Virgen Santísima. Al terminar, me atreví a subir al presbiterio e indicarle al Padre Baños que convendría consagrar los nuevos cristianos a la protección y amparo de María, dado que además era sábado. No se cortó un pelo y publicamente me desautorizó delante de la asamblea. Se rezó la Salve, sí, pero lo hizo con tanto desagrado que mis amigos y yo quedamos sumamente decepcionados. A mi me dió ocasión de sufrir aquélla afrenta por Nuestra buena Madre y he palpado que he sido recompensado con creces en mi vida cotidiana. No es extraño que Dios abandone a su suerte a este desdichado clero y como la maldición de Jesus a la higuera del Evangelio, se seque de raíz y nadie vuelva a comer fruto de ella. Todo es consecuencia de falta de fé y amor a Dios y a la Iglesia. Triste y penoso.
Los capuchinos ¿no fueron los de la famosa manifestación barcelonesa durante la dictadura?A lo mejor, de ahí arranca todo.La Iglesia está para evangelizar, no para meterse en política y, en ningún caso, para salir de manifestación.