| 25 noviembre, 2021
Mal para el que viene y tal vez para algunos más. Para la Iglesia de Almería y para el que se va tal vez no tanto.
De momento todo parece confuso. Y hoy más que ayer.
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No he jurado odio eterno a Gómez Cantero. Sus antecedentes no me gustan y así lo he dicho. Pero en Almería lo voy a juzgar por Almería. Pues, veremos.
De momento, esto;
Y su presencia en Almería, aunque haya necesitado su aceptación, creo que no la ha movido él.
Srs. Que participáis en este foro. Creo que hemos de leer y ver con mentalidad crítica ese artículo.
Gracias a Dios no tengo nada que ver con Almería. Pero hay algunos comentarios que considero que si detrás hay cristianos, es simplemente vergonzoso.
Por lo que se refiere al artículo, no creo que entre a enfrentar a ambos obispos como buenos o malos. Es más serio y más profundo.
Parte de un análisis con datos oficiales y lo que se intuye es que podrían estar manipulados y engañados ambos obispos y así la opinión pública.
Habiendo procurado, quien haya contribuido a crear esa situación tan patéticamente escandalosa, hacer creer que el Obispo diocesano es el autor de la mala gestión y así haber lanzado contra él al propio obispo coadjutor.
Como veo en los comentarios, nadie tiene pensamiento crítico para ir más allá de ese circo y pensar, si fuera así:¿por qué se han dado datos errados ? ¿Por qué se han incluido todos los gastos y se omiten ingresos? Particularmente creo que son dos obispos inocentes pero ambos engañados. Uno que confío quizás demás y otro que se ha lanzado a la batalla absolutamente prejuiciado y quizás también muy confiado.
Además considero que habrá sacerdotes y laicos en esa plataforma pero sacar la Verdad, porque saldrá, sabiendo como se las gastan los que han procurado esto es motivo más que suficiente como para mantener el anónimato por lo menos en un primer momento. Los empresarios y los que están o estamos en la vida pública sabemos que crean grandes redes o telas de araña para que si descubres las malas artes, no digo De la Iglesia de Almería, sino de cualquier institución tu negocio y tu familia tienen peligro.
Perdonen este largo comentario, pero ante un artículo que considero serio creo que es soez hacer comentarios tan superfluos y chabacanos. Si en algo tienen Fe, que más da el seudónimo del nif, seremos bajos y repulsivos igualmente.
Nuevo vicario general en Bilbao. Elegido según consultas según he leído. Pertenece a la Hoac, con lo que está todo dicho.
https://www.agenciasic.es/2021/11/25/kerman-lopez-nuevo-vicario-general-de-la-diocesis-de-bilbao/
En las parroquias suele haber dos Consejos, uno obligatorio que es el Económico y otro optativo que es el Parroquial. En Almería no existían los Consejos Económicos en las parroquias?.
¿Qué tal si detrás de estos fieles, «almerienses por la verdad», hubiera sacerdotes que estaban muy bien colocados en la época de Don Adolfo y que ahora se han visto limitados en su poder? ¿Se vería igual de inocente el asunto? ¿Y qué hay de la gestión de la homosexualidad en el seminario y clero almeriense durante la etapa de Don Adolfo? Infovaticana: investigad. Encontraréis dragones.
No sé si usted tiene conciencia del daño que produce hacer afirmaciones como esa. ¿Se da cuenta de lo peligroso y al mismo tiempo injusto que resulta decir algo así, sabiendo que cualquiera que lo lea puede meter a todos en el mismo saco? Aun imaginando el caso de que hubiese una mínima verdad en lo que dice, escribiendo cosas como esas afea la fama de todos. Esto es lo que tienen estos blogs, que bajo el anonimato se publican entradas y comentarios que hacen daño, y a veces no se dan ni cuenta, como si internet no fuese parte del mundo real.
No he hablado por hablar. No hablo de oídas. Lo que he escrito lo he escrito porque tengo conocimiento de lo que está pasando en Almería. No estoy ni en un bando ni en otro (ni con don Adolfo ni con Don Antonio). Y si, hablo de bandos porque es lo que está ocurriendo. Y por el bien de la Iglesia de Almería, de sus sacerdotes y de la salvación de las almas esta historia debería cesar cuanto antes. Pero ni unos ni otros están colaborando. Los dos se han metido en una pelea que sólo trae dolor. He dicho afirmaciones muy graves porque son ciertas. Así de claro. Pero no se preocupe: no hablaré más por aquí. Tiene razón: no es el lugar ni el sitio. Le pido disculpas a usted y a quien ha leído mi comentario y le haya hecho daño. De hecho pido al moderador de este blog que por favor elimine mis comentarios dentro de un día. Tiene razón y me ha hecho reflexionar: no es la manera ni es del todo caritativo. Y he metido a muchos en el mismo saco. Lo siento. Ahora que también le digo que los datos ciertos y seguros han sido trasladados a quienes tienen que conocerlos. Punto. Estoy un poco cansado de que en muchos sitios de información religiosa se den informaciones del caso de Almería muy sesgadas, filtradas sólo por una de las partes y que también afean y difaman, por ejemplo, a Don Antonio, que sin ser santo de mi devoción (no me gustan muchas cosas suyas, como el cartel de la vigila de la Inmaculada que ha hecho) no es justo que le hayan puesto tantas etiquetas y tantas trabas que ya muchos sacerdotes y fieles lo miran con desconfianza. ¿Eso también es caritativo? Por eso hay momentos en que la verdad debe de salir. Yo soy el primero que estaría con «almerienses por la verdad» si esa verdad fuera toda (que salga todo: todo lo que ha ocurrido estos años) y no sólo una parte. ¿Echarle la culpa a las parroquias es la solución? Por supuesto que desgraciadamente ha habido parroquias caraduras… ahora bien: ¿no era misión de Obispo vigilar eso? Y no quiero decir que Don Adolfo haya sido un desastre. Pero no es tampoco lo que quieren pintar algunos: un pobre Obispo que ha sido difamado por luchas de poder que lo han querido echar. Hay que oír a todas las partes. Como dije antes ni los malos son tan malos ni los buenos son tan buenos.
Si lo que dice el informe acerca de lo omision u ocultación de ciertos ingresos es verdad, la cosa es bastante grave.
De todos modos me ha llamado la atención el hecho de que, exigiendo transparencia esa plataforma, sus miembros prefieran permanecer en el anonimato. Si son laicos no tienen nada que temer. Si fuesen sacerdotes entendería perfectamente la necesidad del anonimato para evitar caer en las iras del obispo, que ya sabemos cómo se las gastan algunos cuando un cura les enfrenta con sus -vamos a llamarlas así- «equivocaciones».
Cosa extraña: un grupo de fieles quieren saber lo que ha ocurrido («almerienses por la verdad» se autoproclaman) pero permanecen en el anonimato. Incoherente: si quieren saber lo que ha ocurrido, toda la verdad, que comiencen ellos mismos diciendo quiénes son. ¿O es que hay algún motivo por el que no puede saberse quiénes son? Os digo que conozco bastante de lo que ha pasado en Almería por personas que desde dentro saben de primera mano lo que hay y ha habido. Hay que tener cuidado con señalar a Don Antonio como el malo y a Don Adolfo como el bueno al que se ha calumniado. Ni los malos son tan malos, ni los buenos son tan buenos. Estoy seguro que hay cosas que nunca saldrán al gran público. Si salieran, muchos entenderían por que Roma tomó la delicada e inusitada decisión de hacer lo que ha hecho en Almería.
Mi contacto no me ha vuelto a decir nada nuevo, pero lo que me dijo, más o menos coincide con lo que dice el comentario. Y no perdamos de vista que ni los buenos (sean quienes sean) son tan buenos ni los malos son tan malos.