ingobernable? peor aun, un conclave de 144 seria bastante caótico, bastante divisivo y bastante conflictivo, sin un claro candidato (y ya de por si con los 126 cardenales actuales no se percibe todavía favorito alguno) y podría durar varios días (5 o 10 días máximo).
Tal vez así pierdan la «timoranda»,se desinhiban,y se muelan a garrotazos «invicem»,como pasara en algún memorable y viejo concilio.
«La letra con sangre entra».Y me temo que también, y no pocas veces,así entra la razón.
Los baculos ya los tienen…
Cual del abuelo mejor,
-tierno,justo,dulce,sabio…-,
mana Verdad de tu labio;
de tu corazón, Amor…
Tu aspecto,tan quebradizo,
despierta la confianza;
tu timidez,la esperanza
en El que humilde te hizo.
Tu mirada, penetrante,
lo abisal del Cielo mismo;
tu sonrisa,el optimismo
de que Cristo Está Triunfante…
Vas,Joseph,hacia ese Encuentro,
que tanto se ha demorado;
quedará el mundo asolado
al no tenerte ya dentro…
¿Sobrevivirá el Papado?…
Si ese señor renuncia (espero que no se dé esa circunstancia) intentará que su sucesor sea elegido por él, es decir, dado su carácter, intentará imponer a los purpurados «su» candidato. Eso sería terrible para la Iglesia.
la capacidad de bergoglio de intentar imponer su candidato preferido para sucederle, en caso de renuncia, seria nula en todo caso, esto debido a lo impredecible que puede llegar a ser el conclave mismo.
Vinagre,y no de Jerez,
macerado en pobre lata,
el de la»taza de plata»
se muestra de tal jaez.
Que…,si a Dios Padre,cual dije,
cantaría las cuarenta,
capaz es de hacer afrenta
a cualquiera en que se fije…
Y aunque Gastón no de venia
para expresar lo que veo,
por no callar me haré reo;
y haré-de quien la hace-,leña…
Desde mi admiración a Benedicto XVI, a su magisterio teológico y a su gran categoría personal, coincido enteramente con usted.
Considero imprescindible que los procesos de canonización vuelvan al rigor y que superemos las alegrías de los últimos años.
Don Francisco, le adelanto una primicia, está a punto de salir una página en internet para denunciar a seminaristas españoles, rectores, formadores, profesores y obispos amigos de encubrir, tapar y mentir. Amigos de la mafia lavanda »temblad». Al Cardenal Omella le va salir cara la broma de pedir esta visita canónica, pues lo que los obispos visitadores no quieran ver se lo van a indicar desde fuera. Se avecina un informe bien público de lo que pasa en nuestros seminarios.
Un cónclave de 144 cardenales sería ingobernable.
ingobernable? peor aun, un conclave de 144 seria bastante caótico, bastante divisivo y bastante conflictivo, sin un claro candidato (y ya de por si con los 126 cardenales actuales no se percibe todavía favorito alguno) y podría durar varios días (5 o 10 días máximo).
Tal vez así pierdan la «timoranda»,se desinhiban,y se muelan a garrotazos «invicem»,como pasara en algún memorable y viejo concilio.
«La letra con sangre entra».Y me temo que también, y no pocas veces,así entra la razón.
Los baculos ya los tienen…
Cual del abuelo mejor,
-tierno,justo,dulce,sabio…-,
mana Verdad de tu labio;
de tu corazón, Amor…
Tu aspecto,tan quebradizo,
despierta la confianza;
tu timidez,la esperanza
en El que humilde te hizo.
Tu mirada, penetrante,
lo abisal del Cielo mismo;
tu sonrisa,el optimismo
de que Cristo Está Triunfante…
Vas,Joseph,hacia ese Encuentro,
que tanto se ha demorado;
quedará el mundo asolado
al no tenerte ya dentro…
¿Sobrevivirá el Papado?…
Si ese señor renuncia (espero que no se dé esa circunstancia) intentará que su sucesor sea elegido por él, es decir, dado su carácter, intentará imponer a los purpurados «su» candidato. Eso sería terrible para la Iglesia.
la capacidad de bergoglio de intentar imponer su candidato preferido para sucederle, en caso de renuncia, seria nula en todo caso, esto debido a lo impredecible que puede llegar a ser el conclave mismo.
Otro santo «súbito», no, por favor.
Vinagre,y no de Jerez,
macerado en pobre lata,
el de la»taza de plata»
se muestra de tal jaez.
Que…,si a Dios Padre,cual dije,
cantaría las cuarenta,
capaz es de hacer afrenta
a cualquiera en que se fije…
Y aunque Gastón no de venia
para expresar lo que veo,
por no callar me haré reo;
y haré-de quien la hace-,leña…
Desde mi admiración a Benedicto XVI, a su magisterio teológico y a su gran categoría personal, coincido enteramente con usted.
Considero imprescindible que los procesos de canonización vuelvan al rigor y que superemos las alegrías de los últimos años.
Don Francisco, le adelanto una primicia, está a punto de salir una página en internet para denunciar a seminaristas españoles, rectores, formadores, profesores y obispos amigos de encubrir, tapar y mentir. Amigos de la mafia lavanda »temblad». Al Cardenal Omella le va salir cara la broma de pedir esta visita canónica, pues lo que los obispos visitadores no quieran ver se lo van a indicar desde fuera. Se avecina un informe bien público de lo que pasa en nuestros seminarios.
No saldrá lo de cierto obispo de Valladolid ahora en Roma que fue rector en Valladolid y lo que pasa en León, por ejemplo?