El populismo utiliza subterfugios para sortear la «ley». Lo mismo que el Faltones en España utilizará una «fórmula, marca blanca» para disimular para que no se note mucho el crimen de la amnistía, los populistas eclesiales usarán (y abusarán) de anfibologías para que no se note su desvarío doctrinal. Gracias a don Santiago Martín como siempre. Y a los teólogos zascandiles que los confunda el diablo.
Yo le plantearía otra dubia a Santiago Martín, cuya repuesta puede dejar sin sentido las dudas que él plantea: ¿puede un sacerdote católico permanecer en una Iglesia que da la comunión a los que viven maritalmente sin que medie santo matrimonio, que bendice uniones contra la moral católica y que confiere el sacerdocio a mujeres?
El populismo utiliza subterfugios para sortear la «ley». Lo mismo que el Faltones en España utilizará una «fórmula, marca blanca» para disimular para que no se note mucho el crimen de la amnistía, los populistas eclesiales usarán (y abusarán) de anfibologías para que no se note su desvarío doctrinal. Gracias a don Santiago Martín como siempre. Y a los teólogos zascandiles que los confunda el diablo.
Yo le plantearía otra dubia a Santiago Martín, cuya repuesta puede dejar sin sentido las dudas que él plantea: ¿puede un sacerdote católico permanecer en una Iglesia que da la comunión a los que viven maritalmente sin que medie santo matrimonio, que bendice uniones contra la moral católica y que confiere el sacerdocio a mujeres?