| 22 octubre, 2023
Que vuelve a repetirse. Una vez más.
Pues yo con mis hermanos armenios.
¡Ah, que no son hermanos al 100%? Pues me basta y me sobra el 98%.
Con los otros no debo llegar ni al 1%.
“No hay nada oculto que no se descubra algún día, ni nada secreto que no deba ser conocido y divulgado.” (Lucas 8, 17)
Ser cristiano en estos tiempos es un oficio de riesgo. Según se mire, porque también se llega antes, de modo que nunca se sabe.
Los armenios tienen un gran desgracia como pueblo y cada vez que sale el tema me indigno porque están solos. En fin Dios proveerá y los ayudará de la forma que sea, pero les ayudará.
Vergüenza me da pertenecer a este Occidente hedonista y ateo, en manos de una cuadrilla de canallas que sólo quieren aumentar su poder, porque dinero ya lo tienen, aunque dicen que nunca hay suficiente.
No sé quién ganará lo de Gaza, si es que gana alguien. Pero tengo claro quienes van a perder. Hay un párroco católico allí, va a ser el último párroco, no porque muera, que seguramente, sino porque no vana quedar católicos allí.
Y en todas las persecuciones que hay, por ejemplo en Nigeria, se echa de menos que el Vaticano declare mártires a las víctimas.