4 comentarios en “La salud del Papa en el último Specola”
Los hay que siguen, erre que erre, con lo de la renuncia. Se conoce que aún no se han dado cuenta del inmenso desastre que supuso para la Iglesia la abdicación de Benedicto XVI y quieren repetir la experiencia. Les propongo una cosa: vean qué reyes de España han abdicado y qué ocurrió después de cada abdicación y quizá aprendan algo. Una par de pistas: Fernando VII fue tan miserable que dejó morir a sus padres en el exilio; Alfonso XII hizo lo mismo con su madre. El actual es más que probable que haga otro tanto con el suyo. Conclusión: ni los reyes respetan a sus padres, como manda el mandamiento divino. El pontífice actual tampoco lo hizo: desmontó la labor del anterior delante de sus narices y el anterior, hombre discreto, no dijo ni pío. ¿Qué pretenden los «abdicacionistas»? ¿Que este ñor imponga como papa a su candidato? Porque el argentino no es de los que se retiran en silencio; incluso mudo, seguiría presionando a los purpurados por escrito.
independientemente de la situación actual, ya va siendo hora de establecer la renuncia de los papas como algo normal, ya que es absurdo tener un papa de casi 90 o 100 años física o mentalmente impedido, o ambos en el peor de los casos!, la iglesia de facto estaría acéfala en su jerarquía eclesial con la curia manejando las cosas a su antojo. una anécdota para que se entienda, el esposo de una difunta tia quien falleció hace años, murió a los 99 años, una larga vida sin dudas, pero mentalmente ya estaba muerto, no recordaba casi nada, ni quien era el, ni a sus hijos, ni a sus nietos, ni a sus amigos, por ende carece de sentido afirmar que los papas nunca deberían renunciar, ya que hay situaciones que así lo pueden exigir. en cuanto a imponer un candidato como papa, eso ya no estaría en las manos de bergoglio, en caso de que renunciara, ya que los cardenales son como políticos que a la primera oportunidad cambiaran de bando para estar con el bando que mas les convenga.
Hay un problema grave con la longevidad de los Papas, y es que ya no tengan siquiera los reflejos cognitivos para hacerse un lado. Por eso, por sincero amor a la Iglesia, sugiero que a partir del próximo Cónclave los cardenales hicieran pacto de caballeros (estrictamente se prohibe un compromiso vinculante) de que el elegido abdique al cumplir 85 años. Si son 75 años para un obispo y 80 años para cardenal, 85 años para un Papa es más que suficiente. A tantas edades las cabezas no suelen estar bien para tanto gobernar, y el problema es que no lo reconocen (precisamente porque no están bien).
Los hay que siguen, erre que erre, con lo de la renuncia. Se conoce que aún no se han dado cuenta del inmenso desastre que supuso para la Iglesia la abdicación de Benedicto XVI y quieren repetir la experiencia. Les propongo una cosa: vean qué reyes de España han abdicado y qué ocurrió después de cada abdicación y quizá aprendan algo. Una par de pistas: Fernando VII fue tan miserable que dejó morir a sus padres en el exilio; Alfonso XII hizo lo mismo con su madre. El actual es más que probable que haga otro tanto con el suyo. Conclusión: ni los reyes respetan a sus padres, como manda el mandamiento divino. El pontífice actual tampoco lo hizo: desmontó la labor del anterior delante de sus narices y el anterior, hombre discreto, no dijo ni pío. ¿Qué pretenden los «abdicacionistas»? ¿Que este ñor imponga como papa a su candidato? Porque el argentino no es de los que se retiran en silencio; incluso mudo, seguiría presionando a los purpurados por escrito.
independientemente de la situación actual, ya va siendo hora de establecer la renuncia de los papas como algo normal, ya que es absurdo tener un papa de casi 90 o 100 años física o mentalmente impedido, o ambos en el peor de los casos!, la iglesia de facto estaría acéfala en su jerarquía eclesial con la curia manejando las cosas a su antojo. una anécdota para que se entienda, el esposo de una difunta tia quien falleció hace años, murió a los 99 años, una larga vida sin dudas, pero mentalmente ya estaba muerto, no recordaba casi nada, ni quien era el, ni a sus hijos, ni a sus nietos, ni a sus amigos, por ende carece de sentido afirmar que los papas nunca deberían renunciar, ya que hay situaciones que así lo pueden exigir. en cuanto a imponer un candidato como papa, eso ya no estaría en las manos de bergoglio, en caso de que renunciara, ya que los cardenales son como políticos que a la primera oportunidad cambiaran de bando para estar con el bando que mas les convenga.
Este artículo es mucho más que una información sobre la salud del Papa. Qui potest capere, capiat.
Hay un problema grave con la longevidad de los Papas, y es que ya no tengan siquiera los reflejos cognitivos para hacerse un lado. Por eso, por sincero amor a la Iglesia, sugiero que a partir del próximo Cónclave los cardenales hicieran pacto de caballeros (estrictamente se prohibe un compromiso vinculante) de que el elegido abdique al cumplir 85 años. Si son 75 años para un obispo y 80 años para cardenal, 85 años para un Papa es más que suficiente. A tantas edades las cabezas no suelen estar bien para tanto gobernar, y el problema es que no lo reconocen (precisamente porque no están bien).