Poco que decir. Concelebrada por el cardenal arzobispo de Madrid, el obispo de Plasencia y el rector de la ermita. Muy dignamente. Como es habitual en Don Carlos Osoro. Aunque a algunos les moleste. Celebra muy bien la misa.
He de reconocer por evidente que el cardenal arzobispo suscita en unos cuantos reacciones poco favorables. Puedo entender algunas, otras me parecen exageradas. Pero allá cada cual con la suya.
La homilía de hoy, como en general todas las suyas, muy aceptable. La leyó.
La ermita, que no conocía, me pareció muy hermosa. De escasa cabida había numerosos fieles en el exterior que supongo seguirían la misa en pantalla televisiva.
El coro, masculino, excelente. La comunión muy breve tal vez por no ser numeroso el público. ¿Unos trescientos fieles? Supongo que repartida por los tres celebrantes y el diácono. Al final Osoro invitó al placentino, que tiene a la Virgen del Puerto por patrona no recuerdo si de la diócesis o de la ciudad, a impartir con él la bendición final.
Me alegró mucho ver al obispo de Plasencia que parecía muy recuperado de su enfermedad. Que creo que le producía una visión doble que gracias a Dios le debe haber desaparecido pues leyó su parte del Canon si ninguna dificultad aparente. Igual algún lector de aquella diócesis nos confirma la recuperación del obispo.
A Don Carlos me pareció encontrarle algo más delgado aunque nada llamativo. No así la delgadez de Blázquez en la bendición de los locales nuevos de 13TV. Se iba por el cuello de la camisa. Verdaderamente decrepitado.
Me pareció entender que a esa Virgen la llaman La Melonera por una tradición, que hoy se repitió, de bendecir unos melones concluida la misa.
Lo mismo ocurre con arzobispo cuando hay mención expresa del nombre propio:
Don Carlos es el arzobispo de Madrid.
El arzobispo de Madrid es don Carlos Osoro.
El arzobispo D. Carlos leyó la homilía.
La ermita fue levantada para que las lavanderas pudieran rezar cerca de su trabajo por el marqués de Vadillo, cuyos restos allí mismo descansan. El rector tiene un perro educadísimo.
El trato don se escribe con minúscula, solamente en mayúscula cuando empieza una frase, a no ser que se ponga de modo abreviado (D.).
Don Carlos es el Arzobispo de Madrid.
El Arzobispo de Madrid es don Carlos Osoro.
El Arzobispo D. Carlos leyó la homilía.