Muere un obispo chino de 94 años en la cárcel, tras 14 de prisión. http://www.lavanguardia.com/internacional/20150206/54426935627/china-obispo-catolico-carcel-muere-vaticano.html Y todos tan frescos. Están masacrando a nuestros hermanos los musulmanes, los indios, los chinos… Nosotros tan felices. Están asesinando a millones a los niños en los vientres de sus madres, a traición y sobre seguro, es decir, con alevosía, y salvo contadísimas excepciones, verdaderamente heroicas pues nadie les hace el menor caso, y la inmensa mayoría de los católicos como si no ocurriera nada. Y hasta votando a los partidos autores de tan tremenda carnicería. La que han armado los judíos con el holocausto. Y con toda razón. O los musulmanes por caricaturizar a Mahoma. Repruebo, por supuesto los medios utilizados en este último caso pero no la protesta. A nuestra sangre de horchata, en cambio, todo le trae sin cuidado. Con lo que fue en la antigüedad cristiana la veneración a los mártires. Nos han aguado el cristianismo de tal forma que hoy somos unos miserables capados a quienes nos pueden hacer cualquier cosa, las peores, en la seguridad de que no vamos a responder. La Iglesia ha prescindido de la militancia y logró un rebaño de ovejas únicamente preocupadas en tener su hierba. E incapaces de enfrentarse a los muchos lobos que las acechan. La Iglesia capada. En la que todos, desde la princesa altiva a la que pesca en ruin barca, viven felices su condición de castrati. Pues, qué quieren que les diga: yo no me dejo castrar y contemplo con infinito desprecio a los castrados. Que ninguno lo ha sido por el Reino de los Cielos sino por una miserable cobardía que parece hoy la señal distintiva de todos los católicos. Y si alguna excepción hay no está ni en la cúpula ni en las masas borreguiles. Hay frases del Papa que me parecen desafortunadas. Aunque puedan tener una interpretación aceptable. El olor a oveja me parece penoso. En las mismas ovejas y en los pastores. Por lo menos se debe oler a limpio si no se llega a tener alguna parte del buen olor de Cristo. Que sería lo deseable. Pero si es malo oler a oveja peor es ser oveja. Uno de los animales más tontos y cobardes del universo animal. Han conseguido en la Iglesia hacernos a todos, o hacer a muchísimos, tristes, cobardes, sucias y malolientes ovejas. A quienes les trae sin cuidado que un anciano obispo de 94 años muera en la cárcel. Dando su vida por Cristo. Pues malditas ovejas, tristes, cobardes, sucias y malolientes. Si al menos hubiera en ellas un débil balido de protesta por ese obispo mártir de Cristo todavía se podría pensar que existía en el fondo de sus almas ovejunas un algo de fraternidad cristiana. Pero es inútil intentar oír el más tenue y amedrentado balido. Nada. Como nada es su catolicismo. Ese es nuestra tristísima actualidad eclesial. De la que yo me niego a participar. Al obispo chino fallecido en la cárcel, por odio a Cristo y a su Iglesia, mi oración, mi admiración y mi esperanza.
La maldita insensibilidad de los católicos
| 07 febrero, 2015
Me parece un artículo impecable, con un fallo. No somos nosotros los que debemos rezar por él, es él el que debe pedir por nosotros, dada su proximidad al Padre.
Yo humildemente, cuando rezo el rosario en la parroquia, después de rezar por las intenciones del Papa, rezo las mismas oraciones por los hermanos perseguidos.
Algo servirán esas oraciones y a los asistentes se les recuerda que hay hermanos nuestros perseguidos.
Dejo la idea por si alguien quiere tomarla.
Este sí que es un héroe y mártir de la fe y no necesita milagro para demostrarlo. ¡Santo Súbito! ¡Ah, que no es…!
¿Y qué podemos hacer los católicos «de a pie» aparte de rezar?
En el caso de China, son nuestras jerarquías las que deben alzar la voz porque a ellas les corresponde representarnos; sin embargo, vemos al Vaticano casi suplicando un acuerdo diplomático a la tiranía comunista china.
Mortuus es. Ignoscatis me, quaeso, errore meo.
Paco Pepe, de matrícula de honor. Sancte Cosmas, ora pro nobis, nam, quamquam coram Sanctus nominatus sis, Christi Martyr mortuus est.
Estoy de acuerdo en el sentido general del artículo, pero no con respecto al sentido sarcástico y malintencionado que le da a la frase de S.S. Francisco. Me parece malintencionada en una católica que sabe además perfectamente el origen evangélico de la metáfora «olor a oveja». Un poquito de sentido de unidad, de » catolicismo» y menos cuestionar al Papa.
Además, en castellano el que asume sin cuestionar no es oveja, sino borrego.
¿el Coro de Montserrat se va a China de jira? Es muy probable que les acompañe la cuña interreligiosa profana, al modo cómo en tiempos de Fraga vino a España aquél ejemplar masonista de Viva la Gente y con idéntico sentido socializador de credos tomando como pretexto cazaincautos la no discriminación por razas, colores y religiones aunque se mantenga la discriminación de ser o no ciudadanos británicos, useños y demás ciudadanías que se dan a respetar y no la comparten con otros. Sería muy significativo conocer los acompañantes, pues alguno habrá inscrito en la Escuela de Bolonia, rupturista con la Iglesia que dicen del pasado, Concilio mediante. O algún afín del egidio Riccardi pacifista aprovechado de las periferias. No dan puntada sin hilo y aquí se trata de amigarse con el Gobierno de China donde hay mucho que mercadear.
Por lo demás nada extraño que los CATÓLICOS estemos como ovejas sin pastor, ya que «heriré al pastor y se descarriarán las ovejas». A nuestros obispos les han impuesto una serie de trabas y les han cercado con la empalizada de las Conferencias Episcopales y Consejos varios para que ninguno tenga tono de voz propia. El caso de mons Reig es excepcional sin temor a verse defenestrado como sin duda lo será con la invención previa del odiumn plebis en su contra manejado a distancia por Roma. Es intolerable un obispo solo católico a estas alturas. Quedaron heridos en el Conciiarismo y así primero ellos y después los fieles que somos de base inevitablemente a entrar en perplejidad, seguida de la furia desatada contra el que llamaron triunfalismo de Cristo y la Virgen que necesariamente se debía enfriar a toda costa para que los triunfalismos legitimados fueran los grandes fastos multitudinarios en la persona de los Papas..
En síntesis, que nuestro clero en Doctrina de Fe y Mora Católica ha dejado de ser fiable cuando anteriomente eran referencias seguras. A nadie debe extrañar por eso que nos hallemos en postración con tanta gente deprimida y huyendo de los templos regidos por gente desacralizada interconfesional, desconfesionalizada de católica.
Es la deriva postconciliar para la que se han tomado como cartas de navegación y pauta la confesión anglicana con sus autonomías autocéfalas y sinodalismo de circunscripción diocesana. Que es la reforma en curso aplicable a la reestructuración de la iglesia de iglesias que se promueve. Y en esta deriva los fieles a la Iglesia UNA y ünica de Iesucristo estorban aunque sean mártires como este santo obispo CATÓLICO chino , uno de los tantos mártires LITURGOS del Señor, obispos, presbíteros y fieles que han dado sus vidas de privaciones y calamidades materiales por mantenerse en fidelidad a Jesucristo.
Son los que interfieren y ponen en evidencia los planes del sinodalismo que viene de las «iglesias» patróticas como la anglicana o la galicana , que sin pretenderlo destapó el aciago Bertone secretario de Estado en la carta que escribió a los fieles CATÓLICOS para que se avinieran con la iglesia patriótica china que parece ser ha dejado de ser herética y cismática y solo quedan los lefebvrianos.
Es una hoja de ruta de nuestros mandantes líderes religiosos que deberían prescindir del título de obispos CATÓLICOS para no confundir con sus astucias o silencios a los fieles del Señor.
Es lo que se cuece. El cardenal arzobispo de Hongkon lleva décadas clamando pero es como si ladrara a la luna en la que reside el Vaticano. No llegan ni los ecos.
Tengamos una oración por el obispo que prefirió la fidelidad a su fe antes que la libertad.
Pero alegrémonos, porque los pobres pueden afeitarse la barba en las columnas de San Pedro. Posturitas Francisco me tiene hasta allí,
Me hace gracia que siempre echemos la culpa a la jerarquía de la Iglesia y no nos miremos nosotros en el espejo.
Las ratas de las ideologías del mundo nos han ido carcomiendo las raíces de nuestra vida cristiana y nosotros, todos nosotros, lo hemos aceptado como algo inevitable. Hemos cedido tiempo dedicado a la oración a estar en presencia de Dios para estar al día con las nuevas tecnologías y con ello, la necesidad de la dependencia de Dios se ha ido aflojando, hasta el punto que Dios se ha convertido en una actividad de fin de semana. Vivimos como el resto del mundo, es le Nuevo Orden Mundial. Nada nos distingue. Votamos abortistas como mal menor, pensando que podemos jugar con el Dios de la Vida.
En definitiva, hemos dejado de querer ser santos para ser buenas personas. Ante esa mediocridad y tibieza ¿qué guerra espiritual podemos plantear? Ese buen Obispo mártir nos da un tortazo cinco minutos…. y después vuelta a la mediocridad.
¡Santidad o muerte!
Me sorprende que este post, que denuncia un problema tan grave del catolicismo actual, tenga tan pocos comentarios, mientras que se forman enormes trifulcas por temas mucho más irrelevantes.
Gracias, de todos modos, al Blogger por poner el espejo frente al catolicismo pusilánime de nuestros días.
Un cristianismo ajeno a la cruz de Cristo es un desastre sin paliativos.
Duele de verdad todo lo dicho porque es cierto, aunque no es toda la realidad. La actual generación ha perdido el sentido de la gravedad y vive una existencia pendiente de lo efímero y material acomodándose al mundo. No tiene futuro.
Y ahora viene la Inés dándonos clase de inglés….
Señor de la Cigoña, simplemente no somos insensibles. Somos cristianos católicos, apostólicos, romanos y marranos.
Entiendo por marrano aquel que practica un cristianismo fingido. Además, vivimos en un mundo acristiano, por mucho que nos empeñemos somos solamente eso: Católicos, Apostólicos, Romanos y Marranos.
Dice el Señor:
«I accept the sacrifice the Orient is giving Me for they are honouring Me with great zeal and generosity; like a silver string your trail will be left behind, as a pattern, to enable the rest of the world to follow it; thus as Aaron’s blessing affected My people, so will the Orient affect the rest of the world to acknowledge Me as their everlasting God;
in My Church nothing has been lost, rather the people lost the presence of My Church in their hearts; the world today in its extreme debauchery is filled not only with error but conspicuously provokes My Deity and My Law; how can I recognize My Church in them?» TLIG 20/8/2004
El Coro de Montserrat se va de gira por China, según publica hoy a bombo y platillo «Religión» Digital, que no se hace noticia de la muerte del obispo católico chino.
¡Bravo por la Escolanía de Montserrat!
Precisamente ayer se celebro la fiesta de San Pablo Martir y sus 16 compañeros, entre ellos 4 niños crucificados en Japón 1597. Junto a estos 17 mártires fueron crucificados también, 4 misionesros franciscanos (S. Francisco Blanco, de Orense, S. Francisco de San Miguel de Valladolid, S. Pedro Bautista de Ávila y S. Martín de la Ascensión de Guipúzcoa), 1 mexicano, S. Felipe de Jesús, 1 indio, S. Gonzalo García, y 3 jesuitas japoneses.
En aquella fecha los mártires recibieron la veneración de los cristianos de Japón encabezados pos sus sacerdotes y obispos a pesar del riego de recibir el mismo trato, e incluso el apoyo de las autoridades españolas en manila para rescatar sus cuerpos.
La insensibilidad a la que nos han acostumbrado nuestros hipócritas pastores que nos han enseñado a callar y obedecer porque si, a transigir con todo y a pensar que la Iglesia es solo de ellos y que tienen la verdad por usar mitra. Así nos va. El clericalismo es uno de los grandes males de la Iglesia especializada y coto cerrado de una «casta» ordenada que se cree en posesión de la verdad mundana y ha renegado de la Verdad divina.
Nos dan a elegir entre la lucha y el deshonor. Elegimos el deshonor y ahora tendremos el deshonor y la persecucion.