| 04 diciembre, 2019
Porque el caso del cardenal Aguiar, Carlos, no es exclusivo. Se da también en otros lugares.
Parece suicida. Y terminan recibiéndolas de todos lados. Incluso haciendo extraños compañeros de viaje. Como yo con Gazanini. Aunque sea meramente puntual. Lo tenían grave cuando sólo estaban con ellos los terminales. Pero los hay quienes ya aspiran a que no les quiera nadie.