| 05 febrero, 2018
Oriolt la retrata:
http://germinansgerminabit.blogspot.com.es/2018/02/plegarias-excluyentes-en-montserrat.html
No tengo nada que añadir. Simplemente suscribirlo.
O si se quiere, añadiendo algo. El deseo del pronto cierre de ese cenobio.
Y están pagando justos por pecadores. Ahora la han tomado contra el Padre Santiago Cantera, el Prior del Valle, Monje y Sacerdote muy docto, piadoso, humilde, amante de la vida religiosa y de la Tradición Católica. Los Socialistas lo ponen a caer de un burro en los medios y la prensa progre. Lo han citado a declarar al Senado por haber recurrido un auto en el que se manda desenterrar a dos muertos. Teme que se dañe la Basílica. Preparación le sobra al Padre Prior, pero a esos sociatas lo que me nos les interesa es la documentación y la verdad. Y eso pasa con un presunto gobierno de derechas. Qué sería si mandase Sánchez. Encomendemos el tema del Valle y la virtuosa y benemérita comunidad benedictina que allí hizo su voto de estabilidad y allí se entrega al más importante negocio: La alabanza y la petición.
El Papa lo sabe todo sobre España…pero le gusta al parecer.
Juan de Cordoba:
Monjes en Montserrat 1996=136 / Monjes en Montserrat 2017 = 44, en 21 años se han dejado 92 monjes por el camino. De los que quedan, dos tercios con más de 65 años. ¿Que dices que es lo que fastidia y a quien?
Las dos familias de Santo Domingo
Fray Joseph Graziano OP
Contemplata
Nuestra Constitución Fundamental, resumen básico de la vida dominicana, dice: «La Familia dominicana está compuesta por los Frailes Clérigos, las Monjas y los Hermanos Cooperadores, los miembros de Institutos seculares y las Fraternidades dominicanas de Sacerdotes y laicos.»
El término «familia» se puede emplear de muchas maneras diferentes: familia nuclear, familia por extensión, mi familia universitaria, mi familia del trabajo.
Su uso abunda en la Iglesia en particular, tanto en los ritos, (por ejemplo, «Orad, hermanos y hermanas,») como en el lenguaje común (por ejemplo, «Buenos días, Padre Pablo.»)
Toda metáfora y analogía comienza con algún modelo o referente primario. ¿A qué modelo, a qué imagen de familia nos estamos refiriendo? Según San Pablo, el uso de las imágenes familiares tiene sus raíces en el Padre Celestial: «Por esta razón, me arrodillo ante el Padre de Nuestro Señor Jesucristo, de Quien deriva toda paternidad en el cielo y en la tierra.» (Efes. 3, 14-15).
Una Familia propiamente dicha
En el curso del desarrollo de su Teología del cuerpo y en la exhortación apostólica Familiaris Consortio, San Juan Pablo II presenta una bella imagen de la familia como una comunidad de vida y amor. Aunque la base y el arquetipo de toda comunión humana es la Santísima Trinidad, la unión de amor entre el Amante y el Amado, es tan fuerte que el mismo Amor entre ellos es en Sí mismo una Persona: la comunidad específica de la familia «es un signo y el lugar de reunión del pacto amoroso entre Dios y el hombre, entre Jesucristo y su Esposa, la Iglesia.»
En una familia natural, el novio y la novia, el amante y la amada, se unen y manifiestan el fruto de su amor en los hijos. Padre, madre e hijos, unidos caminan juntos para ser colmados de plenitud en el Reino de Dios.
Las familias tienen la tarea fundamental de servir a la vida, «actualizar en la historia la bendición original del Creador -la de transmitir por medio de la procreación la imagen divina de persona a persona.» (Familiaris Consortio, 28).
Las familias florecen y crecen en el amor y la vida hasta que finalmente llegan a su plenitud en la vida infinita y eterna y en el amor del Señor.
El hombre y la mujer dan la bienvenida a la nueva persona humana e introducen a su retoño, mediante la educación y los sacramentos, en la comunidad humana y en la Iglesia. Con esta bella imagen, Juan Pablo II asigna a la familia la misión de «proteger, revelar y comunicar el amor» a través del sacrificio.
Las dos familias Dominicanas
Entonces, ¿cómo se corresponde la analogía dominicana de la familia con la teología de la familia de San Juan Pablo II?
La respuesta está en la persona de Santo Domingo. Santo Domingo tuvo una familia natural y amorosa.
Según fuentes del siglo XIII, los padres de Domingo eran «buenos y piadosos.»
Su padre, Félix, era un «hombre admirado por los aldeanos y los ricos.» Y su madre, la Beata Juana de Aza, era una mujer «virtuosa, casta, prudente, llena de compasión hacia los desafortunados y angustiados.
«Su caridad plantó en la juventud de Domingo la semilla del espíritu generoso, que florecería el resto de su vida.
Al educar a sus hijos, Félix y Juana les inculcaron la virtud, y pusieron sus pies en el camino que conduce a Dios.
Nosotros, por otro lado, formamos parte de la familia espiritual de Santo Domingo. Como nos enseñó San Juan Pablo II, la comunión de la familia se basa en la relación entre el padre, la madre y los hijos.
Nuestro Padre en la Orden es Santo Domingo. El Beato Jordán de Sajonia nos cuenta las muchas vigilias nocturnas que Nuestro Santo Padre observaba, primero verificando y asegurándose de que los Frailes estuvieran descansando, y luego permanecía despierto toda la noche intercediendo por ellos.
En sus oraciones, provee, guía, enseña y da ejemplo a sus hijos e hijas en la tierra.
Entre las lecciones que nos enseña, está el amor a Santa María.
Domingo llama constantemente la atención a sus hijos sobre la Madre, Que nos ha dado Cristo en la Cruz, que vela por sus hijos e hijas.
Ella nos enseña a contemplar, siguiendo Su ejemplo, al Verbo de Dios en nuestro corazón, y a darlo a luz con nuestra Predicación.
De una generación a la siguiente
Somos producto no sólo de nuestros padres y de nuestro tiempo, sino de toda la cultura familiar que nos antecede.
CS Lewis en Prince Caspian enfatiza cómo nosotros, como hijos e hijas de Adán y Eva, tenemos «el honor de poder levantar la cabeza del mendigo más pobre, y la vergüenza suficiente para inclinar los hombros del más grande de los emperadores.»
Heredamos mucho más que los genes y el apellido de nuestros antepasados. Incluso si su historia individual se perdiese, sus lecciones perviven en la cultura que heredamos de nuestros mayores.
Estoy orgulloso de mi herencia. Los diversos valores de mi familia, como el espíritu aventurero, la cálida amabilidad hacia todos, poniendo en valor la consideración silenciosa de las maravillas de la naturaleza, conforman la cultura que me formó como hombre.
Lo mismo ocurre con la familia dominicana. Nacemos de la herencia que nos ha dado Nuestro Santo Padre Domingo, a través de hombres y mujeres como Jordán de Sajonia, Martín de Porres, Jerónimo Savonarola, Pier Giorgio Frassati, Charles Louis Richard, Vincent Jandel, Pedro González (San Telmo), Catalina de Siena, Inés de Montepulciano, Rosa de Lima e Imelda Lambertini.
Esta tradición ha crecido a través de ellos y también a través de muchos hermanos y hermanas desconocidos, y hoy nos continúa siendo transmitida.
Un amor sacrificial.
Una familia buena y amorosa constituye una base sólida para un niño, y es natural que el niño, una vez crecido, lleve este amor a una nueva generación de su propia familia.
El amor que el niño muestra a medida que madura se deriva directamente del amor que él mismo ha recibido.
La familia es nuestra primera forma de conocer el amor y llegar a comprender lo que significa estar vivos.
Domingo tenía una familia sana y amorosa. Sin embargo, en lugar de dar todo su amor para engendrar hijos propios en el orden natural, sacrificó este bien natural supremo por el bien del Reino.
El amor que conocíó de su familia biológica se derramó sobre su familia espiritual. Al renunciar al matrimonio por el Reino, él y sus hijos e hijas realzan el significado del matrimonio y su belleza.
Sólo de un gran sacrificio se pueden obtener grandes frutos, y el fruto de este sacrificio fue la vasta familia espiritual de la Orden Dominicana.
Y, sin embargo, incluso en este sacrificio, no perdió a su primera familia. Más bien, los atrajo también a una familia más grande, una familia espiritual.
El ejemplo perfecto de esta elevación de su familia natural en el orden espiritual es su hermano Manes. El Beato Manes probablemente era unos años mayor que Domingo. Me imagino a los dos creciendo juntos: Manes liderando y el pequeño Domingo siguiendo los pasos de su hermano mayor.
Mientras los dos crecían, al final terminó Manes siguiendo los pasos de su hermano. Fue uno de los primeros miembros de la Orden y, al convertirse deliberadamente en parte de esta familia espiritual, preparó para sí el camino del cielo.
Este mismo vínculo espiritual se extiende a través de la relación natural que Dominigo tuvo con la Beata Juana, con su padre, Félix, y Antonio, otro hermano que se ordenó Sacerdote, a pesar de que nunca decidiese unirse a la Orden.
Pero Juana, Félix y Antonio, estuvieron asociados a esta familia espiritual a través de su hijo y hermano.
Y así como la Santísima Madre es muy bendecida por escuchar la Palabra del Señor y hacerlo con un Corazón amoroso, también lo es la familia carnal de Domingo -y a menudo la familia de cada dominico- santificada en la formación de su hijo o hija.
A lo largo de las generaciones, esta familia de Santo Domingo ha tratado de tener «un solo corazón y una sola alma en la búsqueda de Dios,» como se afirma en los Hechos de los Apóstoles, cap.4 y se repite en la Regla de San Agustín.
Los dominicos buscan vivir en este vínculo mutuo de amor sacrificial, y éste es el fruto del sacrificio de Domingo: una familia de 800 años de edad, compuesta por hombres y mujeres dedicados al amor de Dios y de los hermanos.
Al sacrificar Domingo, la posibilidad de una pequeña familia terrenal ganó para el mundo una gran familia dentro de la Iglesia.
Derramando todo su amor como una libación ante el trono de Dios, Domingo dio a luz por la gracia de Dios, a una familia de Predicadores.
Al igual que el frasco del perfume de la Magdalena debe romperse y derramar su contenido sobre los pies de Cristo para llenar la casa con su fragancia, Domingo, aleccionado por el amor de su familia natural, sacrificó el bien del amor familiar, para fundar una familia cuya fragancia se ha extendido hasta los confines de la tierra.
O Spem miram, quam dedisti
mortis hora te flentibus,
dum post mortem promisisti
te profuturum fratribus:
Imple, Pater, quod dixisti,
nos tuis iuvans precibus!
¡Oh admirable esperanza que diste a la hora de tu muerte a los hermanos que te lloraban, prometiéndoles que después de tu muerte les serías de gran ayuda! ¡Cumple, Padre, lo que dijiste, ayudándonos con tus oraciones!
Juan de Córdoba: No tengo ni idea de lo que dices, pero vaya, sinceramente me da igual que sean muchos o pocos. De lo que no me cabe duda es que no son fieles a Evangelio porque adoran a otros dioses en forma de cuatribarradas y esteladas. No tío, no me vale ni tampoco me fastidia la cuestión numérica, en Alcalá Meco hay muchísima basca y a nadie se le ocurre argumentar que sea la prisión mejor de España. Montserrat es una victoria del catalanismo y una vergüenza para la Iglesia.
Pero es el Monasterio con mas monjes de España. Eso es lo fastidia, verdad?
El cinismo de estos monjes es alucinante, observen la plegaria que aparece en el artículo de Germinans:
– Para que ningún gobierno maltrate la dignidad de las personas y respete siempre sus derechos.Roguemos al Señor: Señor ten piedad, Cristo ten piedad.”
cuando el gobierno catalán lleva desde que se montó, porque aquello fue el montaje de un chiringuito de delincuentes, maltratando a la mitad de los catalanes.
Pero tranquilos, la cuota de castigar a clérigos ya está cubierta de sobra con los franciscanos de la Inmaculada.
Montserrat? os referís al parque temático de los Benedictinos? hace años que no subo por el yuyu que me dan. Esos cantos poniendo morros de uva, esa pretendida pronunciación pulcrísima del catalán, esas soflamas infames, aterciopeladas con manto de religiosidad, esa fábrica de ganar pasta traicionando al Evangelio y cobrada a políticos y entidades afines. Por Dios, que lo cierren ya. Si el catalanismo es comparable a una metástasis, el núcleo original se llama Montserrat.
Un Monasterio Benedictino comme il faut: Priorato de Sainte-Marie de la Garde, fundación filial de Le Barroux:
https://www.youtube.com/watch?v=0O8y-qNiQSI
Aquí el Cardenal Peluca y Pepe no tienen nada que rascar, pues depende con Le Barroux de la Comisión Ecclesia Dei.
Don Paco Pepe, a Oriolt le vence la prudencia, la palabra mesurada, como a usted. La verdad aquí en Cataluña es mucho más ruda, mucho más basta. Montserrat ha sido la excusa para que, en la santa Misa, se pronuncien auténticos disparates por los obispos, empezando por el presidente de la Tarraconense, Pujol, cuyas palabras mendaces eran tóxicas e inflamadoras. La verdad es que Montserrat marca la pauta. Ahí tiene usted acudiendo al obispo de sant Feliu y sus seminaristas a recibir las prédicas secesionistas de este o aquel monje. Ahí tiene usted a Omella orgulloso (cofoi dicen aquí) de sentarse a la mesa con Soler. (Ay Omella, Omella, cuánta menesterosidad mostrada en tan poco tiempo…) Oriolt ha señalado un dato, pero el rosario de desvergüenzas supera los veinte misterios. No es la sodomía lo que a uno le llama la atención de los montserratinos, el famoso lobby gay, nunca desmentido y a veces nominatim designado. Son las treinta monedas que religiosamente recibe por distintos cauces de la Generalidad por su simonía de la misa, el rezo coral, las banderas y las proclamas. Esas monedas serán su tumba.
USQUE AD MORTEM
Fray Luke VanBerkum OP
06 de Febrero de 2018
Te daré gloria, oh Dios Mío, Mi Rey, / bendeciré Tu Nombre por siempre jamás. / Te bendeciré día tras día / y alabaré Tu Nombre por siempre. (Salmo 145).
El Sábado, 10 de febrero, Fiesta de Santa Escolástica, trece Frailes Dominicos de Convento de la Inmaculada de Washington, prometerán obediencia a Dios, a la Santísima Virgen María, al Bienaventurado Domingo y a sus Superiores por el resto de su vida: Usque ad mortem -Hasta la muerte- ¡Señor, Dios de los Ejércitos: Dichoso el hombre que confía en Tí! (Sal. 84)
Prometerán vivir sus días como religiosos consagrados según el estilo de vida de la Orden de los Frailes Predicadores.
La Orden Dominicana es su camino a la salvación. La vida en esta Orden es el medio por el cual Dios desea transformar su vida a través de Jesucristo, en el Espíritu Santo.
Estoy obligado por los votos que Te hice. / Oh Dios, te ofreceré alabanza / porque has rescatado mi alma de la muerte, / has impedido que mis pies se tambaleen / Que pueda caminar en la presencia de Dios / y disfrutar de la luz de los vivientes. (Salmo 56).
Los votos en sí son imperfectos: Son una comprensión de la constante necesidad de la misericordia de Dios.
Como parte del rito de la profesión, se les pregunta a los Frailes: «¿Qué buscáis?» Y responden: «La misericordia de Dios y la vuestra.»
La misericordia de Dios y la de los hermanos son la mano que sostiene a los que tropiezan mientras se esfuerzan en el camino de la santidad en la vida consagrada.
El gesto de la profesión: poner las manos en las del superior, significa obediencia al superior, pero también la gran misericordia a la que se abrazan los profesos.
Así que siempre alabaré tu Nombre / y cumpliré mis votos día tras día (Sal 61).
El deber principal de todos los religiosos es la contemplación de las cosas divinas y la unión con Dios en la oración.
Alabar a Dios en nombre del mundo entero es responsabilidad de los religiosos: Mis labios se llenan de Tu alabanza, / de Tu gloria todo el día.(Sal 71).
En el Oficio Divino, los religiosos a lo largo de la jornada alaban a Dios y le dan gracias con palabras inspiradas en la Sagrada Escritura, las mismas que utilizó el Señor Jesús: Se trata de los Salmos.
Los Salmos nos hablan de cada experiencia humana, desde alegría y la alabanza hasta el sufrimiento y la traición.
En la vida dominicana, los salmos son las primeras palabras en los labios por la mañana, y cuando muere un hermano, los frailes rodean su cuerpo y cantan los salmos, recordando su fidelidad a la oración y pidiendo a Dios Su misericordia.
Te daré gracias, Señor, en medio de los pueblos, / entre las naciones te alabaré / porque Tu amor llega hasta los cielos / y Tu verdad hasta las nubes. (Sal 57).
Esta vida común de oración prepara a los hermanos para predicar la verdad del Evangelio a todos los pueblos.
Cada Orden religiosa tiene un carisma particular: un regalo de Dios para el bien de toda la Iglesia.
Los votos en la vida dominicana confían, a quienes la profesan, el carisma de la predicación para la salvación de las almas, y los Frailes recurren a este carisma cuando ejercen su sagrado ministerio como Predicadores de la Gracia.
Me obligo a hacer tu voluntad, / Señor, no me decepciones. / Correré por el camino de Tus mandamientos / y dilatarás mi corazón. (Sal 119)
En una aparente paradoja, el voto de obediencia libera a los religiosos. La obediencia no implica un estado de sujeción. Más bien, la obediencia a la voluntad de Dios es la verdadera libertad. Para los religiosos, la muerte a sí mismos, para ser instrumentos de Dios en el mundo, es la voluntad de Dios en ellos.
Cumpliré al Señor mis votos / ante todo Su pueblo. / Es preciosa a los ojos del Señor / la muerte de Sus Santos. (Ps 116).
De hecho, la muerte es el comienzo de la vida, porque Jesucristo mismo, Que se hizo obediente hasta la muerte, y una la muerte de cruz (Filipenses 2: 8), lo hizo posible.
En Tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu (Sal 31).
Es un antro infecto. Indignos de ser llamados monjes. Son un atajo de degenerados. Un lugar sin moral, sin religion, donde (…) la sodomia y dirigida por un inmoral sin escrupulos. ¿Alguien le extraña lo que hicieron en Valvanera?
La Diócesis de Nantes en Francia, ha prestado a la Fraternidad San Pío X la Capilla de la Inmaculada, a 300 metros de la Catedral, para tener los cultos habituales, mientras se construye la nueva Iglesia de la Fraternidad en esta Ciudad.
Los Domingos la Misa rezada es a las 08:30 am y la Misa cantada a las 10 am.
[Le Salon Beige] Le diocèse de Nantes prête une chapelle à la FSSPX
SOURCE – Le Salon Beige – 4 février 2018
En attendant les travaux d’une nouvelle église, depuis dimanche 04 février, le diocèse de Nantes a permis à la FSSPX de célébrer la messe traditionnelle dans l’une des chapelles du centre ville, la chapelle de l’Immaculée.
Désormais, tous les dimanches et à 300 mètres de la cathédrale, les fidèles qui le désirent pourront participer à la messe à 8h30 (messe basse) et 10h00 (messe chantée).
Toutes les informations du prieuré Saint Louis sont accessibles sur un nouveau site.
Montserrat siempre a sido el centro independentista catalán, ya e tiempo no admitían monjes castellanos, tenian que ser catalanes, mallorquines, valencianos o portugueses.
Y han tergiversado siempre la historia como porque abandono el Santuario el Abad Escarre.
En ese Pontificado se ha hecho casi desaparecer la Congregación de los Franciscanos de la Inmaculada y a día de hoy tras cuatro años -que parecen cuarenta- no se ha dicho lo que había -si lo había- o lo que dejase de haber. Lo mismo con la Diócesis de Ciudad del Este y Monseñor Livieres, cuyo objetivo era cerrar el Seminario e inculcar el modernismo y el liberacionismo en los seminaristas que quedasen. Otrosí el cese del Obispo de Albenga Imperia: lo que había en el trasfondo al margen de dos o tres clérigos despistados, es que el usus antiquior estaba haciendo furor en aquella Diócesis.
Pues con esos prolegómenos y esta parresía correctiva, se puede cerrar el cenobio de Montserrar, infectado por la política y del que no se sabe si ha desaparecido el llamado lobby rosa, que hizo furor en tiempos de Casiano Just y del cesado Bardolet -las derivas intelectuales suelen ser manifestación y patencia de otros desajustes internos, y eso que en la etapa «formativa» presumen de pasar por cuatro «psicólogos.»
Montserrat es un tétrico monasterio consagrado al odio ideológico. Leer lo que supuran monjes espectrales como el Bausset ese o Hilari Raguer contra la unidad entre los españoles, o la tergiversación bestial que hacen de la historia y la vida de España, hiela la sangre al más flemático.
Cierran Mariawald llena de jóvenes vocaciones y misa tradicional mientras permiten antros como este infumable de gentuza de Montserrat
Por favor, que alguien transmita al Papa la degeneración de Montserrat y la indignacion que nos provoca a los católicos españoles.