| 03 noviembre, 2022
No hay más que ver la fotografía de su última asamblea:
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Viéndolas se entiende que ni una vocación.
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No hay más que ver la fotografía de su última asamblea:
Viéndolas se entiende que ni una vocación.
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Habla de caminar juntos. ¿Hacia dónde? ¿Hacia el camposanto? Porque lo que se ve en la foto es de película de terror.
En zaragoza el otro día, en el inicio del curso de la pastoral de la salud, estaban dos y el apuntador.
Y en Sevilla también va pasando desapercibido la exhuncación de los restos de Queipo de Llano y otro de la sede de la Cofradía creo que la Esperanza de Triana. Una cosa es que el Gobierno haya promulgado una ley infame, revanchista y ridícula y otra la actitud genuflexa de muchos católicos y no digamos de la jerarquía en España.
Todavía más vergonzoso y ya vemos a que lleva tanta cobardía y bajeza que se ha llevado a cabo de noche, a hurtadillas y presentes las familias que seguro su voluntad fuera exhumar los restos allí inhumados. A la salida una persona desquiciada pero que seguro que vive del erario público a cargo de algún chiringuito se ha puesto a decir un pregón del modo más populista, ofensivo y ridículo con lo que ha dejado a la Cofradía por los suelos, a los rectores de ese templo y seguro que ha puesto en un aprieto a los familiares. ¿Quién ha avisado a esta desquiciada persona? o bien los encargados de velar por el orden público y el cumplimiento de la ley, o la propia cofradía no hay más explicación.
No cabe ser más idiotas y cobardes y mientras hablando la jerarquía de medios ambientes, contaminaciones, el cuidado de la tierra y sacando la cara a la Montero. En una radio que se oye mucho buenos los han puesto, pues la jerarquía de la Iglesia española es de vergüenza su actuación en la exhumación de Franco, en la defensa de un monasterio con monjes cuando se ve que debe sobrar la vida religiosa en España siendo culpable Osoro en su mayor parte. Omella que el gobierno no es lo suyo jugando al despiste y caciqueando haber si nombra tal obispo o tal otro donde tyener el currículo más mediocre se ve que cuenta para que le nombren obispo.
¿Sólo en Sevilla? ¡¡¡En España entera!!!
Tras tanta palabra hueca
-traición o ilusa bobada-,
han arribado a la nada
en tropilla más que enteca …