| 07 octubre, 2022
Así que después de ello, enterarme de sus males: suspenso en la Universidad, vacío en una conferencia que dio en Chile y los que puedan acontecerle creo que los tiene muy merecidos.
Me ha extrañado que salvo el director de ABC nadie haya protestado de de las palabras de ese blasfemo.
Y espero que al arzobispo de Valladolid no se le ocurra salir en su defensa. Que igual nos dice que eso no es blasfemar, que él lo dice muchas veces y que todo es cosa de los periodistas.
Si es que tal como están las cosas en Podemos un obispo no se puede mi acercar. Por propio decoro. Si lo tiene.
Es verdad que , por desgracia, en España (no sé en otros países) se oyen muchas blasfemias pero eso no quita la importancia que tiene, pues es un signo del salvajismo inherente en muchas personas, que en circunstancias propicias y fomentadas por criminales lleguen a cometer atrocidades a los que aman y respetan el nombre de Dios, la Virgen, etc. Ya se vio en el 1936…
Las masas borregas y taradas morales son capaces de todo…
Y no olvidemos a los que, con las monstruosas leyes que el actual gobierno excreta, siguen y seguirán votando a este gobierno central y algunos regionales…
Definitivamente , hay que reconocer la corrupción moral de gran parte de la Humanidad…
Más que blasfemo, que lo es, es ateo y anticlerical…
¡Y ya sabemos que hicieron el siglo pasado los anticlericales en España!
Espero que pase pronto a la insignificancia, politica y social, él que es la nada en persona.
A ver, ya se nos está yendo la pinza. Que el odio al personaje no nos ciegue…
Que tire la primera piedra quien no haya dicho alguna vez un me “cag… en Dios” en un arrebato de coraje. O escuchar a un Vasco decir “me cag… en la Host…” a cualquier comentario jocoso. Lo habitual que es en nuestra cultura popular ciscarse en el Papa de Roma y en todo lo divino… incorrecto e inmoral. Sí. Pero siempre ha sido parte de nuestro ADN, curiosamente a pesar de nuestro gran respeto y acervo religioso como nación.
Aquí se está alabando la naturalidad de este político. Su forma natural de expresarse. No se alaba que cometa blasfemias.
“Juzgad con justicia”, dice el Señor. No seamos borregos. Al enemigo no hay que exterminarlo con todo lo que se nos ocurra, sino acorralarlo con la Verdad.