| 30 agosto, 2023
Muy cercano a Francisco:
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“No hay nada oculto que no se descubra algún día, ni nada secreto que no deba ser conocido y divulgado.” (Lucas 8, 17)
“No hay nada oculto que no se descubra algún día, ni nada secreto que no deba ser conocido y divulgado.” (Lucas 8, 17)
Muy cercano a Francisco:
¡Jesús, que compañía!
¿Pero cuantos hijos de S. Ignacio quedan? ¿Bastará con una mano?
Esto degenera de día en día. Si en la Iglesia hubiera un mínimo de autoridad, este señor sería inmediatamente silenciado y retirado a un convento a reflexionar, a ver si así se curaba de su verborrea (…).
Nota de F. e la C.: El calificativo de la verborrea se pasa muchos pueblos
Que decepción el artículo de Spadaro. Ninguna palabra sobre el empoderamiento de la cananea y ninguna mención al demonio malo de una niña que no podía ser otro que la toma de conciencia de la opresión del patriarcado. Es un progre del chichinabo y no comme il faut.
Bruno Moreno Ramos ha puesto en su sitio a Spadaro:
https://www.infocatolica.com/blog/espadadedoblefilo.php/2308230345-el-p-spadaro-sj-y-el-nuevo-ar
Lo importante de este evangelio el mensaje final. Lo que Jesús le dice a la mujer al final del relato.
La mujer no es hija de Israel y, por tanto, no tiene derecho a pedir lo que pide y a decir lo que dice.
La lección es para sus discípulos y para nosotros: esta mujer se comporta mejor que los judíos, es capaz de llegar al corazón de Dios con tal de de liberar a su hija del demonio. Jesús «ha sido enviado para salvar a todos» («no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores»). A raíz de esto queda en evidencia toda la fría y mecánica «oficialidad» teológica y religiosa del judaísmo de su tiempo. Pero Jesús, FLEXIBILIZA LA NORMA, DA MUCHA IMPORTANCIA A LA FE DE LA MUJER . Jesús muestra lo qué ha venido a hacer al mundo: llamar a todos, salvar a todos, liberarlos de los demonios. Sacarlos de la miseria de no conocerlo a Él. Ayudar a todos.