¿Es que ya no va nadie a sus misas?

|

El Papa, en la catacumba de Priscila

Como para entender su permanente cara de cabreo. Ha conseguido echar a todos. Y si descontamos las monjas no había nadie.

Como estoy seguro de que si no dijera nada más, el murga de siempre me echaría los perros con lo de que si odio al Papa, etc., etc., que allí no cabían más y otras tontunadas semejantes, me adelantaré diciendo que creo que no está claro si no había nadie por lo reducido del lugar o si se buscó esa cutrez porque se pensaba que no iba a ir nadie.

No había el menor motivo para celebrar la misa de difuntos en una catacumba. La mejor prueba de ello es que era la primera vez que Francisco entraba en una de ellas. Pues eligió él, o le eligieron, el sitio. dando por seguro que no iba a ir nadie. Como así parece que ocurrió.

Y si no fuera por las pobres monjas habitadas, tan denostadas. allí,  Francisco y un turista japonés que había pagado la entrada.

Algo, evidentemente, está en la ruina.

 

 

 

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *