| 29 abril, 2024
Porque la odian.
Cargándose todos esos hipócritas principios liberales que dicen profesar.
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Con los tradicionales al exterminio.
Aquí caben todos, todos, todos. Menos los tradicionalistas. A los que hay que exterminar.
Yo tengo claro con quién estoy y quienes me caen bien. Y así me manifiesto.
¿Otros?
Parece que más bien no.
Pese a mentirosas declaraciones.
Pondré la imagen de quién me parece un un inmenso cretino. No digo que lo sea. Solo que a mí me lo parece.
El odio a la liturgia tradicional se explica porque su celebración resalta el fracaso de la reforma litúrgica postconciliar, que no ha cumplido ni mucho menos los objetivos pastorales previstos ni resiste la comparación con la liturgia antigua.
La Sagrada Tradición es un patrón moral y estético insoportable para los aventureros del modernismo. Como en política, el progresismo no soporta los límites de la tradición, de lo aprendido por las generaciones anteriores ya que impide ríos revueltos. Y no nos podemos equivocar, claro que hay ganancia de pescadores y estos son realmente pescadores de hombres, pero su jefe no es el Buen Pastor y su reino no es el de los Cielos.
con los maravillosos ritos que tenemos para la celebracion liturgica en todo el mundo, llenos de belleza y musicalidad, debemos tragar la «uniformidad» en las celebraciones. La verdad es que, salvo alguna excepcion en la homilia, pocas veces del cura que celebra la Eucaristia, poico mas tienen de atractibo. Ayer asiste a la confirmacion de una veintena de jovenes. No hubiera sido precioso que aclamara al Espiritu Santo, nuestro abogado, nuestro santificador, nuestro consuelo. Pues no, con un micro en la mano y sin que nadie le oyera (para que el micho) estuvo hablando largo y tendido, de las cosas de cada dia. Estoy seguro que ninguno de los jovenes llego a saber (salvo que se lo hayan imbuido los catequistas, que el Espiritu estaba bajando a cada uno, para que en su vida tuviera su ayuda, para ser mejor, cristiano y pèrsona.
Pregunta: ¿A lo tradicional, o a las actitudes de los tradicionalistas?
El «novus ordo «es la expresión de una «nueva fe» ecuménica y sobre todo antropocéntrica que efectivamente no tiene más remedio que detestar la expresión integra y completa del llamado rito tradicional porque acentúa de forma inequívoca multitud de aspectos de la teología y de la ascética católica que el modernismo pretende poner en sordina. de ahí que la bienintencionada pretensión de Benedicto xvi de una pretendida armonía y enriquecimiento mutuo sea de ambos ritos haya resultado en la práctica una síntesis hegeliana de imposible cumplimiento.De ahí el fracaso de su pontificado.
Ya lo dijo el cardenal Piruleta: «Acabaremos para siempre con la misa de siempre».