Elogios a Esteban Escudero que son más bien una coz en el traspuntín de Carlos Osoro

No conozco al autor del velado ataque que se llama Daniel Ponce. Se firma como teólogo y antropólogo. Supongo que lo será. Lo que no sé es si es también sacerdote. Ha firmado dos artículos en el digital Ya que parecen ser una crítica abierta al anterior arzobispo de Valencia Don Carlos Osoro a quien viene a acusar del descrédito actual de la Universidad Católica de aquella diócesis. Maravillosa cuando Esteban Escudero la pilotaba y hoy un desastre. Según él. Es evidente una clara animadversión. Ya que tenga fundamento en la realidad o sea fruto de malquerencia del autor de los artículos no es cuestión sobre la que pueda pronunciarme. Carezco de datos al respecto. Tal vez algún lector pueda ilustrarnos más sobre el tema. Sería de desear que con independencia de juicio. Los artículos son muy elogiosos con García Gasco, Cañizares y Escudero. Y muy crítico con el paréntesis entre el antepenúltimo y el último arzobispo valentino. No parece que las inclinaciones universitarias sean la característica de Don Carlos Osoro aunque en la curia que estrena haya habido influencias de amistades universitarias. Tampoco lo fueron las de Don Agustín que creo que tampoco tenía ningún doctorado. Don Antonio sí lo tiene y fue profesor en la Ponti. Y siguió, ya de obispo, con esas preocupaciones universitarias. En Ávila estuvo a punto de arruinar la diócesis, ha sido Don Jesús García Burillo quien salvó, a costa de indecibles esfuerzos, una situación imposible, y su vinculación con la de Murcia es innegable. Ahora ya tiene una Universidad suya y, llegado con muy buen pie a Valencia, me creo que hará todo lo posible por ponerla en orden si no lo estuviere. Ya lo de Escudero no pasa, en mi opinión, de afectos personales. Porque es una nulidad andante como acaba de acreditarlo en Palencia. Aunque para mandado tal vez sirva. Y salvadas sus condiciones de buenísima persona y obispo piadoso pero con menos arranque que un coche sin batería. Salvo en su malquerencia a la misa tradicional. Que para eso le funcionaba el inexistente motor de arranque. Me parecen absolutamente lamentables, a mí, que no frecuento la misa tradicional, esos obispos que tragan con todo y que en lo único en lo que son intransigentes es con unos pobres diocesanos, poquísimos, y con algún pobre curilla, que se muestran afectos a algo que no tiene nada de malo y sí mucho de bueno. Les ladra un chihuahua y corren a llorar que les liberen de la diócesis pero ven a una pobre hormiguilla y corren a pisotearla. El autor de esos artículos, sin decirlo expresamente, está poniendo en solfa el pontificado valentino de Don Carlos Osoro. Al menos en lo que se refiere a la Universidad diocesana. Yo a Don Carlos no le debo nada. Dos abrazos, seguramente exagerados por su parte, y res de res. Me dicen que ahora me aborrece. Pues me la trae al pairo en el caso de que fuera cierto. No vivo para nada de él. Y además es seguro que podría hacer yo mucho más daño al arzobispo que él a mí. No hay parroquia de la que pueda desposeerme ni vicaría que pueda darme. Pero es mi arzobispo y como tal le acepto sin el menor problema. Como acepté a Morcillo, Tarancón, Suquía y Rouco. Es curioso que haya tenido sólo cinco arzobispos y siete Papas. Aunque mis primeros dieciséis años no fueran madrileños. Constato la coz a Osoro. No me escandalizo de ella porque también soy yo un animal cocero. Pero tampoco quisiera que le pusieran a parir sin motivo. O sólo por motivos personales. Tal vez no haya llevado muy bien, o simplemente bien, su Universidad. No hay obispo que lleve bien todo. Ni los mejores. Pero en Don Carlos hay algo que me preocuparía en el caso de que fuera cierto lo que esos artículos dicen. Y es San Dámaso. Tiene una joya en sus manos. Si decayera, por su culpa, pienso que sería un borrón indeleble de su pontificado. Aunque la Universidad no sea lo suyo. http://www.diarioya.es/content/mons-esteban-escudero-y-la-universidad-católica-de-valencia http://www.diarioya.es/content/vuelve-mi-estimado-d-esteban-gracias-a-d-antonio