El Papa contestado por la izquierda eclesial española

Parece que el santo padre ha conseguido enfadar a todos y no contentar a ninguno. Supongo que es lo natural cuando no existe ninguna estructura mental lógica, cuando los actos y las palabras responden simplemente a lo que uno siente en ese momento, sin proyección y sin memoria. El papa nos tiene ya acostumbrados a esa forma de funcionar, sus decisiones aparecen normalmente fraguadas en el campo de los sentimientos mucho más que en el de la razón y claro, así no hay quien se aclare porque casi todo depende de sus filias y fobias o, incluso, del pie con el que se haya levantado. Lo más preocupante es su falta de identidad y autoridad pontifical, no se identifica con las historia de la Iglesia. Parece, escuchándolo, que todo ha empezado con él, que hasta ahora no ha habido ni magisterio, ni historia, tradición ni doctrina; con Francisco y su primavera todo parece estar en estado inicial borrando así, de un plumazo, dos mil años de historia. Esa «novedad» constante que se nos quiere imponer en contra del peso bimilenario, vacía de cualquier autoridad al papa que aparece normalmente como «inventor» del nuevo catolicismo más que como custodio del depósito de la fe; naturalmente el problema es que Francisco no es Cristo, podría fundar en todo caso el francisquismo, el cristianismo ya está insuperablemente implantado a pesar de las ignorancias u ocultaciones bergoglianas.
Por otra parte seamos sinceros ¿Qué esperaban los obispos españoles? ¿de verdad están sorprendidos? de ser así no queda más que hacerles una descalificación colectiva, el tiempo pontifical de Francisco ya ha mostrado sobradamente sus errores, sus silencios y sobre todo sus manías. Si los obispos, a estas alturas no conocen al papa es que son simplemente simplones y por tanto podemos calificarlos de tontos necesarios para el papa y, al tiempo, pastores inútiles para el pueblo que busca y no encuentra. Definitivamente uno y otros deberán dar cuentas a Dios, y ante Él no valdrán excusas ni justificaciones.