Lo que en principio parece dar la razón a la que afirma que fue violada varias veces. Asqueroso proceder del obispo si fue así y la otra o es una pobre idiota o no resistió lo que debía. María Goretti no fue.
Franco Mulakkal, tiene 54 años, Benedicto XVI le nombró obispo en 2009 y Francisco lo trasladó a Jullandur en 2013. Seguro que ni el uno ni el otro no tenían ni ida de a quien nombraban y ni siquiera de que tal diócesis existiese. Pero tipejos así, si se confirma que violaba monjas, no deberían llegar ni a sacerdotes sino a la cárcel. Donde espero que vaya si se acredita la violación. Tiene 54 años.
Uno piensa que aceptarle la renuncia poco es. Debería ser reducido al estado laical un obispo violador de monjas.
Don Antonio: me dejé llevar por el titular que leí y efectivamente si al obispo no le han aceptado la renuncia y si sólo se le ha limitado el ministerio habrá que esperar a ver en que queda todo ante la justicia civil y la eclesiástica. Precipitarse nunca es bueno y me precipité. Muchas gracias.
Solo doctrina: Totalmente de acuerdo, una vez que se haa acreditado la violación.
Armando: usted puede pensar lo que le dé la gana y yo también. A mí una monja que durante dos años se deja violar por su obispo me parece o muy cortita o que no resistió lo que debía. Y lo que yo pienso es cosa mío. ¿Qué a usted no le gusta? Esta noche no voy a dormir por el disgusto.
«La otra o es una pobre idiota o no resistió lo que debía». O sea, la víctima es idiota o débil. Muy en la línea de Institoris y Sprenger.
Estimado blogger, cuando usted afirma que «uno piensa que aceptar la renuncia poco es. Debería ser reducido al estado laical un obispo violador de monjas» me imagino que esa idea sería para aplicar luego de demostrada su culpabilidad mediante juicio canónico justo, y no ahora en la etapa de denuncia. Estimo no son buenos los linchamientos ni tampoco lo es saltarse los juicios justos.
Me temo don Francisco, que ha dado por bueno sin más el texto que vincula, producto quizás del «wishful thinking» en la pontificia tolerancia cero. En realidad, al obispo sigue en su ministerio y no se le ha aceptado la renuncia (ayer no apareció tal renuncia en el «Bolletino»). Únicamente se ha limitado su gobierno de la diócesis mediante la designación de un administrador apostólica «sede plena» -que no vacante-. Queda bien claro en el comunicado de la CCBI que puede leer aquí: http://ccbi.in/bishop-agnelo-gracias-appointed-as-the-apostolic-administrator-of-jalandhar/.