| 09 septiembre, 2018
El obispo de Gerona había hecho recientemente unas declaraciones relativamente sensatas dentro de su evidente inclinación catalanista las estropea ahora con esta actitud amarilla de carácter político y no religioso. Aunque también es posible que obispado y obispo no hayan tenido nada que ver y que eso sea cuestión del mosén correspondiente. Si así hubiera sido al hacerse público el hecho ya no quedan el margen obispo y obispado porque si callan, otorgan.
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La cara es el espejo del alma. Menuda alma cándida o cómplice, vaya usted a saber.
Por las noches todos los gatos son pardos. . . ¿Pardo o Pardó?
¿Pero qué puede espearse de fulanos religiosamente adpetos a la teosofía de Raimundo Paniker que pasó a ser Raimon Panikkar instalado en su huerto-jardín Vivarium de Tavernet conviviendo a modo naturalista con su señora y prole aunque nunca se secularizó a pesar de haber sido ordenado sacedote católico en sus tiempos entusiastas de Opus Dei adjunto de su fundador?.
Sin tener en cuenta la obra descatolizadora y secularista de este teosofista prescriptor de una religiosidad psicológica orientalizante, sin duda de una capacidad intelectual fuera de serie pero de mentalidad «espiritualista» de la materia con inclusiones hinduistas y budistas, no podría entenderse la ruina de La Fe en buena parte del clero catalanista, clero que a su vez fueron hundiendo La Fe en los fieles de base poco a poco, puestos en dispersión forzosa que una vez vaciados de ortodoxia católica adoptaron, al igual que sus instructores, el sucedáneo del derecho a elegir el independentismo desispanizado y por lo mismo descatolizado.
No les queda más que el título de manadantes a estos prepotentes inflados de autosuficiencia.
Pardo es, con diferencia sideral, el peor prelado de España.A su lado, Vilaplana, Taltavull e incluso Novell son San Ambrosio, San Ireneo de Lyon o San Atanasio.Hace falta tener un rostro marmóreo y diamantino para decir lo que este orondo obispo dice y repite una vez sí y otra también.En 2021 debe renunciar: si Gerona estaba mal con Soler, con él no estará ni bien ni mal, porque no quedará diócesis ni madre que la fundó.A su lado, el nacionalismo de Soler era cosa de cuatro beatas.Este señor produce vergüenza ajena.
Esta muy difundido ese pensamiento en el clero catalán. De hecho el primer abanderado en exponerlo en grito pelado (literalmente en grito pelado) fue el decano de la facultad de teología de Cataluña. No existe un bien o un mal universalmente reconocido, objetivo (ley natural), sino que la moral la impone la voluntad popular. Si los votos del pueblo dice que hay que quemar la iglesia, se quema y punto. Si hay que poner el altar para recuento de votos, se pone y punto. El desmadre doctrinal, como ve, ha llegado a lo más alto del centro de docencia católica y del episcopado catalanes.
Tal es la desorientación, que, como alguien ha comentado, Sistach ha presentado al papa Francisco las ponencias sobre la limpieza del aire (me imagino que según san Juan Damasceno), la gestión de residuos (en las conclusiones del Concilio de Ferrara-Florencia), el problema del agua (en los Sinópticos). Los paréntesis no son de Sistach, dicho sea en honor a la verdad. Pero es que justamente por eso es lo vergonzoso de un comportamiento errático, necio y turbio del episcopado catalán.
Querido don Paco Pepe, el obispo de Gerona es una calamidad doctrinal. Acaba de redactar su último disparate, la carta dominical que aparece en la hoja parroquial, donde usted podrá leer perlas como que san Fulanito fue confesor y nacionalista. Como suena. Ahora se hace el ingenioso y habla de no romper lazos. Mire qué inteligente soy, dice para sus adentros. Ho agafas? (¿lo coges?) comenta a sus pandilla. Porque en Gerona no abundan sacerdotes, de hecho escasean hasta límites trágicos, pero pandillas de presbíteros desvergonzados y secesionistas los hay. A manta.
Apuntaba que Pardo es una desgracia doctrinal. En la carta de marras que aparece hoy en la diócesis, con motivo del 11 de septiembre, el lumbreras afirma que muchas personas discrepan del encarcelamiento por sus ideas. Miente con toda su orondez diametral porque no están encausadas por sus ideas, sino por sus hechos. Pero hay algo más hondo: no reconoce una moral objetiva, sino que el bien o el mal lo determina el pueblo, secesionista por supuesto.
Está muy difundido ese pensamiento en el clero catalán. De hecho el primer abanderado en exponerlo en grito pelado (literalmente en grito pelado) fue el decano de la facultad de teología de Cataluña. No existe un bien o un mal universalmente reconocido, objetivo (ley natural), sino que la moral la impone la voluntad popular. Si los votos del pueblo dice que hay que quemar la iglesia, se quema y punto. Si hay que poner el altar para recuento de votos, se pone y punto. El desmadre doctrinal, como ve, ha llegado a lo más alto del centro de docencia católica y del episcopado catalanes.
Tal es la desorientación, que, como alguien ha comentado, Sistach ha presentado al papa Francisco las ponencias sobre la limpieza del aire (me imagino que según san Juan Damasceno), la gestión de residuos (en las conclusiones del Concilio de Ferrara-Florencia), el problema del agua (en los Sinópticos). Los paréntesis no son de Sistach, dicho sea en honor a la verdad. Pero es que justamente por eso es lo vergonzoso de un comportamiento errático, necio y turbio del episcopado catalán.