5 comentarios en “El cardenal Sarah y Traditionis Custodes”
El problema también es que, si un Papa cambia cosas importantes o fundamentales, el mensaje que transmite es que no eran tan importantes ni fundamentales, y también que un próximo Papa también puede introducir cambios en las mismas u otras cosas, con lo que se termina en escepticismo hacia la autoridad y credibilidad hacia la institución del Papado.
Creo que OBSERVADOR tiene razón y creo que se ha dicho en alguna parte que como no hay mal que por bien no venga la tiránica medida de Francisco dejaba al descubierto lo frágil de la pretendida continuidad.
Creo que OBSERVADOR tiene razón y creo que se ha dicho en alguna parte que como no hay mal que por bien no venga la tiránica medida de Francisco dejaba al descubierto lo frágil de la pretendida continuidad.
Creo que OBSERVADOR tiene razón y creo que se ha dicho en alguna parte que como no hay mal que por bien no venga la tiránica medida de Francisco dejaba al descubierto lo frágil de la pretendida continuidad.
El problema también es que, si un Papa cambia cosas importantes o fundamentales, el mensaje que transmite es que no eran tan importantes ni fundamentales, y también que un próximo Papa también puede introducir cambios en las mismas u otras cosas, con lo que se termina en escepticismo hacia la autoridad y credibilidad hacia la institución del Papado.
Creo que OBSERVADOR tiene razón y creo que se ha dicho en alguna parte que como no hay mal que por bien no venga la tiránica medida de Francisco dejaba al descubierto lo frágil de la pretendida continuidad.
Yo creo que la supuesta continuidad entre el rito tradicional y el rito post Vaticano II es una ficción que no se sostiene.
Creo que OBSERVADOR tiene razón y creo que se ha dicho en alguna parte que como no hay mal que por bien no venga la tiránica medida de Francisco dejaba al descubierto lo frágil de la pretendida continuidad.
Creo que OBSERVADOR tiene razón y creo que se ha dicho en alguna parte que como no hay mal que por bien no venga la tiránica medida de Francisco dejaba al descubierto lo frágil de la pretendida continuidad.