Dieciocho nuevos cardenales. Con lo que la famosa cifra de Pablo VI ha quedado una vez más pulverizada. Mejor sería que suprimieran de una vez semejante inutilidad.
Sin entrar ideologías de los nombrados. Qué daría para bastante más y que ahora no consideraremos.
Francisquismo puro.
Dos jesuitas más y ¡tres argentinos! de una tacada. Jamás la República austral había conocido algo semejante. Aunque uno de ellos tenga, más francisquismo, 96 años y sea un simple fraile.
Cuando la vida religiosa agoniza, además de los dos jesuitas, Córdoba de la Argentina y Hong Kong, un Agustino, Prevost, para un dicasterio, dos franciscanos, Ajaccio y Jerusalén, un salesiano, no obispo, suponemos que para relevar a la inutilidad de Braz de Anís, y un capuchino, de ¡¡¡96 años!!! no sabemos por qué y para nada.
¡Cuatro españoles! Con lo que casi igualamos a Italia en purpurados, 12 frente a 15, superando ya a los Estados Unidos que queda en tercera posición, 11
Y entre las humorada del Papa: Ajaccio y no París. y además un español; un sudanés, un tanzano y además coadjutor y un auxiliar,
Pues todo eso sin entrar en otras características de los nombrados.
Ha sido creado Cardenal un capuchino muy mayor, Luis Pascual Dri, sobre eso dice Cigoña «no sabemos por qué y para nada». Este nombramiento es el reconocimiento a su miles de horas en el confesonario. Hoy día es muy difícil encontrar un sacerdote con calma para confesarse. Y , si se busca y se encuentra , en ocasiones confiesa de manera rápida y casi brusca. Antiguamente los confesores entraban en muchas preguntas que hacían sentirse muy incómodos a los penitentes. Este capuchino ha sabido confesar con caridad, con comprensión hacia la debilidad humana , sabiendo que el penitente está desnudando su alma , enseñando sus miserias y venciendo su natural pudor. Ha estado cientos, quizá miles, de horas confesando y lo ha hecho sabiendo que era el representante de un Padre que acoge con afecto y perdón a un hijo que reconoce sus fallos. Era un Padre que mira con cariño al hijo descarriado y le da afecto a la vez que le da un buen consejo. No era un Juez frío, implacable y riguroso. Sabía oír. POR ESO el Papa LO HA ELEVADO A LA CATEGORÍA DE CARDENAL aunque sea sin derecho a nada , es un reconocimiento a algo que ahora mismo en la Iglesia no abunda. Y una invitación a que los sacerdotes administren correctamente y con calma el sacramento de la Penitencia ( RECONCILIACIÓN )
DOS NUEVOS CARDENALES DE ESPAÑA ¿ cuales son los 4 ?
Lo que es evidente es que Toledo, Sede Primada de España, ya no volverá a tener Cardenal al frente de su Arzobispado.
El cardenalato se convierte, en algunos casos, en poco más que una medalla de honor.
Todo lo que toca este pontificado se devalúa. Aunque la cosa venga de atrás. Midas al revés.
Me temo que el nuevo el cardenal obispo auxiliar de Lisboa, nombrado quizás por ser el encargado de preparar la próxima JMJ (el capelo debería llegar después del evento, no antes), desconoce el deber de todo cristiano de anunciar a Cristo y trabajar para que todos crean y se bauticen.
Yo no soy quien para decirle al Papa lo que tiene que hacer o dejar de hacer, pero creo que nombrar ahora cardenal al rector mayor de la congregación que me educó (lo mismo hicieron las salesianas, mostrando ambas sociedades harta paciencia para con el díscolo niño que fui), ha sido precipitado: podría haber esperado a que terminara su mandato como rector mayor. Tres años pasan pronto.
Pues es muy claro, ese nombrado cardenal de Lisboa que prepara JMJ ha sido nombrado porque lame pies y lo que sea a este pontífice que pregona que no hay que hacer proselitismo… LO nunca visto! la JMJ se salvará si hay buenos 9bispos y sacerdotes en ese encuentro que hagan unas vigilias de ADORACIÓN ANTE EL SANTÍSIMO, como hizo el añorado y muy recordado Benedicto en la JM J de Madrid (2011), con una fuerte tempestad y viento y este buen Pontífice no quiso cancelar… AHÍ dejó la cosa…
Pues en las otras «características» de los nombrados se podrá entender el éxito de los nombramientos. Si son cardenales con vida de santidad y capacidad de gobierno, aunque sea pequeña su diócesis o su administración, ayudarán al Papa en lo que necesita. Si no, mala elección. El criterio de elegir cardenales porque la diócesis sea grande puede tener su explicación, pero quizá no sea lo mejor (evita, en cierto modo, el carrerismo).
El Patriarca latino de Jerusalén, también es franciscano
Yo también pienso que no se debería nombrar cardenal a quien, por la edad, ha quedado ya excluido de participar en un cónclave. Y que debería respetarse el tope de 120 electores.
No entiendo que se haga cardenal a un auxiliar o un coadjutor y además no siendo cardenal el auxiliado (San Salvador, aunque ahora el cardenal ya sea emérito), ni para qué tantas prisas (caso de Lisboa).