| 21 junio, 2021
Y que será el sacerdote compostelano Andrés Fernández Farto, secretario de los obispos gallegos.
Estemos atentos a ese día a ver si se confirma.
Si fuera él, espero que algunos comentarios que habían circulado sobre su persona fueran falsos.
Unos dicen que es muy bueno y otros que es horrible. Aclaraos, por favor.
«Vino Juan, que ni comía ni bebía y decís de él: tiene un demonio. Viene el Hijo del Hombre, que come y bebe y decís: ahí tenéis un borracho y comilón»
¿Le suena ese versículo?
Pues eso es lo que siempre pasa
Como suele decirse, cada cual habla de la feria según le va en ella.
Yo prefiero el dicho evangélico «Por sus obras los conoceréis»
Sea quien sea el nombrado, confiemos -aunque a veces pasan cosas que justificarían la falta de confianza- en los mecanismos de elección de los obispos.
Y si alguien es conocedor, no ya de una falta grave que todos podemos cometer alguna vez, sino de algo verdaderamente serio que pueda manchar a un futuro obispo, dígalo donde tiene que decirlo: en Nunciatura o en Congregación para los Obispos. Y, sobre todo, aporte pruebas evidentes. Lo contrario es caer en la más asquerosa difamación amparada en en el aparente anonimato de internet.
Son mayoría los comentarios favorables.
Si fuera cierta esa noticia, mi familia y yo nos alegraríamos mucho. Cualidades intelectuales y sacerdotales no le faltan. Su paso por nuestra parroquia nos dejó muy buena impresión. Me duele leer comentarios de personas que ni le conocen. A mi siempre me han enseñado a no criticar y difamar a la ligera sin conocer a las personas. En nuestra parroquia siempre fue un sacerdote entregado y sus homilias destacaban por su profundidad y fidelidad al evangelio y a la iglesia. Con motivo del entierro de mi madre y la primera comunión de una de mis hijas, tuvo unos detalles con la familia que nunca olvidaremos. Solo quería dejar mi testimonio de agradecimiento.
Si se cumple el pronóstico, le toca una quiniela a Mondoñedo-Ferrol después de tantos años de capa caída. Fernández Farto es un hombre bien preparado intelectual y espiritualmente y pienso que capaz de enderezar esta diócesis que lleva años a la deriva y que tanto lo necesita. Sería un buen fichaje por parte del Nuncio y un buen inicio de un episcopado español de categoría junto con Mons. Valera, obispo de Zamora y Mons. Fernández Prieto, auxiliar de Santiago recientemente nombrados.
Hace un año en este blog un comentarista llamado Cobillón dijo de Fernández Farto que era «joven, eclesial, preparado…» No sé nada más de él.
Se deberían cubrir las vacantes por orden. Tanto cuesta encontrar un humilde sacerdote para que sea obispo de Ciudad Rodrigo, una diócesis con menos habitantes que alguna parroquia en grandes poblaciones. Clama al cielo.
Estoy totalmente de acuerdo con usted y he insistido en este punto de modo reiterado: Ciudad Rodrigo, Coria e Ibiza, en ese orden, son las que llevan vacantes más tiempo y deben tener prioridad absoluta.
Mientras tanto su joven obispo emérito sigue de turista en Santo Domingo.
Buen sacerdote y de buena formación
¡Fernández Farto no por favor! ¡Sería mucho peor que el auxiliar de Santiago! ¿Pero el nuncio de qué va? ¡Se luciría si sale adelante!
Pues no sé qué decir; depende de qué esté «farto», no vaya a ser que acabemos «fartos» de él.