| 15 noviembre, 2024
Por mí, ahí me las den todas.
Aunque pienso que no faltarán católicos franceses que no entiendan que el Papa no asista a la recuperación de Notre Dame.
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“No hay nada oculto que no se descubra algún día, ni nada secreto que no deba ser conocido y divulgado.” (Lucas 8, 17)
Paquito Lumbreras, con su perspicacia habitual, no ha visto que podría haber usado ese foro para para decir en Paris lo que quisiera sobre el aborto y la eutanasia con una gran repercusión mediática.
Al revés; el Papa tendría que haber aprovechado la reinaguración de Notre Dame para insistir en que la recuperación del edificio nos invita a insistir en la recuperación espiritual de Francia con todo el legado de valores que supone: derecho a la vida, respeto a la vida en la enfermedad y toda la artillería que subyace del artículado de la fe católica.
Por otro lado y dada las circunstancias que se están dando en Francia (no hay mes en que no se incendie un templo católico) también es bueno que el Pontífice se manifieste de una vez en ese sentido. No olvidemos que su voz tampoco se alzó con fuerza cuando el esperpento de la apertura de los juegos olímpicos.
Por otro lado, más allá de toda diferencia con lo cívico, la presencia del Papa contribuiría a que la inauguración de las obras no se vean excesivamente laical sino también religioso.
Por lo tanto me parece muy poco prudente y con poca visión la no asistencia del Papa a la apertura de Notre Dame y sí la asistencia a algo tan nimio como un congreso, ponencia o lo que sea de Religiosidad Popular. Hay que saber estar y no perder la ocasión a tiempo y a destiempo.
Pues yo lo tengo muy claro: independientemente de lo malo que sea ese ñor de Roma, visitar Francia, que ha consagrado como derecho constitucional el asesinato de embriones y fetos y que pretende eliminar ancianos sobrantes por las bravas, es absolutamente inadmisible. El pontífice no debería jamás pisar suelo francés y dirigir toda su artillería (que la tiene) contra Macron y los canallas criminales que han legislado en Francia leyes espantosamente inicuas. Macron y los políticos franceses son meros peones del Maligno y con el Mal no se negocia.
Una simple refelexión : usted mire su interior y verá que en pocos meses usted ha vertido aquí críticas feroces contra muchísimas personas e instituciones. El Papa , muchísmos obispos , cardenales , gobiernos de muchos sitios, católicos que no piensan exactamente igual que usted, plazas vacías cuando aparece el Papa , obispos muy mediocres o incluso medio idiotas . También nos ofrece usted alguna estadística de números de nombres raros o compuestos . Es una afición curiosa el saber en 1940 cuantos Eleuterios- Jeremías había y si ahora hay menos o más con esa combinación de nombres. Usted como es lógico piensa de una determinada manera ( respetable como lo son otras muy distintas ) y el dueño del Blog ( Don Francisco José Fernández de la Cigoña Núñez ) tiene a bien publicárselo en «su casa «. Yo me pregunto con cierta ingenuidad : ¿ Todo es tan malo ? ¿ No hay cosas buenas en gran número a cualquier lado que miremos ? ¿ no hay en los que piensan algo ligeramente diferente a usted nada positivo ni digno de respeto o elogio ? ¿ con su actitud tan crítica ayuda a alguien a acercarse a Dios ? ¿ a usted lo critica mucha gente desde el afecto o desde la hostilidad ? ¿ Hay que ver todo bajo el prisma de la negatividad ?