| 09 agosto, 2022
Pienso que tiene muchísima razón en lo que denuncia y en denunciarlo.
https://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=44125
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Hay responsabilidad en los padres, en los jóvenes, en la sociedad, también en la Iglesia…
Y las consecuencias son verdaderamente alarmantes.
Sin la amenaza del Averno esto no hay quien lo arregle. Claro que el Averno se combate con misas y sacramentales. No creo en JMJ y otros inventos.
La Homilía del obispo de Vitoria, creo, que muy clara, valiente… igualito que las homilías del ordinario de Barcelona, un tal Omella, ufffff! Pienso que si la CEE no lucha se enfrenta VIOLENTAMENTE, si es necesario con gobierno central y autonómicos en materia de EDUCACIÓN, NO HAY NADA QUE HACER. Están inyectando ODIO Y SEXO a niños, jóvenes y adolescentes,desde las aulas, y los… «curánganos» están tocando la viola, hablando de pájaros y flores… «más valiera que se colocara una rueda de molino y se lanzara al mar»… El Señor no se andaba con chiquitas ni ambigüedades, ni se amoldaba a usos, costumbres ni lenguajes de época si todo ello iba contra la LEY SANTA DE DIOS…
La cosa cada día irá a peor. Un ejemplo que lo muestra es como en catequesis de preparación a la primera comunión cada vez vienen más niños que no saben hacer la señal de la cruz y, semana a semana, hay que explicarles como se hace la señal de la cruz porque sus padres no van a misa y no les han enseñado a sus hijos. Cuando reciban la primera comunión muchos de ellos dejarán de ir a misa y el mensaje cristiano no habrá calado en su corazón. Esas nuevas generaciones o mucho cambia o no bautizarán a sus hijos.
Muy bien dicho. Se ha atrevido a decir lo que muchos pensamos, a pesar del huracán de críticas que le va a caer.
Y sería aún más valiente si fuera un párroco «solo ange el peligro» de algún pueblo de esos que tanto abundan en la Península, donde las fiestas patronales son auténticas bacanales de sexo, drogas y alcohol.
Cuando el punto álgido del año para muchos jóvenes (y adultos que fingen serlo) son estas celebraciones, hay que preguntarse qué otras vivencias les está ofreciendo la sociedad.
¿Cómo van a educar a los jóvenes en cristiano quienes están vacíos de formación y de trato con Dios?
Si, es difícil educar a estos desgraciados de jóvenes, solo se puede rezar por ellos. Yo al menos no puedo hacer otra cosa. El demonio tiene mucho poder en estos tiempos.