| 27 julio, 2023
O como lo hundieron.
Donde había sido la razón de su existir nacional.
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Hoy no quedan ni los rastros.
Pero la sinodalidad que no falte.
“No hay nada oculto que no se descubra algún día, ni nada secreto que no deba ser conocido y divulgado.” (Lucas 8, 17)
vaya primavera bergogliana! hundimiento absoluto y sin paliativo! no quedara ni quien apague la luz, y lo que es peor, no quedara piedra sobre piedra. game over!
pero no hay nada de que preocuparse! ya que los porristas del porteño bergoglio, como el mitómano jose manuel vidal entre otros, no se desanimaran, sino que seguirán proclamando que estamos viviendo la gran primavera bergogliana. vaya estafa y vaya estafadores!
Pues ya se sabe : tú lo has querido, fraile mostén…
Aplicable muchos mostenes de Naciones otrora católicaslo
Y una catarata de malos pastores, perros mudos y demás blanditos, conciliadores, cumbayás, todobuenistas, sinodalistasperomandoyo cayendo en masa al infierno
DEO NEMO RISIT
Don Francisco, lo que no dicen esos obispos irlandeses es que los feligreses, han abandonado la iglesia por DECADAS.
Son DECADAS de estudios donde tenian conocimiento de lo que pasaria en el futuro, y conrtinuaron con sus politicas LIBERALES.
Lamento decir que esa triste predicción está preñada del naturalismo feroz que está debilitando y machacando a la Iglesia de de hace tiempo. San Patricio y los Apóstoles lo tenían mucho más difícil pero, sin miedos humanos, con la siempre necesaria y acreditada coherencia, y poniendo su confianza en el Señor, lo consiguieron: “Pedid al dueño de la mies que envíe obreros a su mies, porque la mies es mucha y los obreros pocos”