Comunicado de prensa conjunto sobre el servicio de despedida del 28 de agosto de 2022
8 de septiembre de 2023 Iglesia de San Martín
Comunicado de prensa conjunto de la diócesis de Chur, la parroquia católica de San Martín y los párrocos interesados sobre la conclusión de la investigación preliminar canónica después del servicio religioso del 28 de agosto de 2022 en la parroquia de San Martín en Illnau-Effretikon
– La ceremonia de despedida de la antigua líder parroquial Monika Schmid el 28 de agosto de 2022 en la parroquia de St. Martin en Illnau-Effretikon atrajo gran atención debido a la amplia cobertura mediática, mucho más allá de la parroquia, la diócesis de Chur y Suiza.
El obispo Joseph Maria Bonnemain abrió entonces una “investigación preliminar canónica” para aclarar si este servicio violaba gravemente el orden litúrgico aplicable de la Iglesia católica. Todos los afectados también fueron incluidos en esta investigación.
Una investigación cuidadosa del asunto ha demostrado que no hubo violaciones litúrgicas graves en este servicio, cuya evaluación quedaría reservada al Dicasterio vaticano para la Doctrina de la Fe. Por lo tanto, no se requiere ningún proceso penal según el derecho canónico.
Sin embargo, en este servicio se ignoraron importantes normas litúrgicas que son vinculantes para toda la iglesia.
Por tanto, el obispo no puede evitar lanzar una amonestación formal a los pastores implicados en este sentido. El 15 de agosto de 2023, el obispo Joseph Maria Bonnemain emitió la advertencia adecuada a las cinco personas afectadas durante conversaciones personales detalladas con la expectativa de que estos errores no se repitan en el futuro.
Esto concluye este asunto para todos los involucrados.
Mons. Joseph Maria Bonnemain ha expresado su confianza en todos los pastores implicados y les agradece su comprometida labor pastoral por el bien del pueblo.
«La ceremonia de despedida, el domingo 28 de agosto de 2022, dio lugar a una concelebración de lo más singular, y a decir verdad, un sacrilegio.El «equipo litúrgico» llegó encabezado por la «Gemeindeleiterin», la encargada de la parroquia, con báculo en mano, sin duda para demostrar su papel de dirigente -los modernistas escribirían de «pastora». Luego, todos se quitaron los zapatos para imitar el gesto de Moisés frente a la zarza ardiente.
El sermón fue pronunciado por la mujer…»
Este sacrilegio tiene más de 50 años de antigüedad, ya se hacía en Holanda por los 1970, si es que no en los 1960, con dos variantes:
1. La mujer realizaba toda la misa, excepto la consagración de las especies, momento en que un viejecito anciano sacerdote se levantaba con todas sus fuerzas de la sillita y realizaba el acto de consagración.
2. La parroquia está totalmente gobernada por la comunidad parroquial, y el sacerdote debe de presentar a la misma el texto de su homilía y predicación, el cual puede ser aprobado o rechazado y enmendado.
Lo de la mujer con el báculo me parece sencillamente ridículo y risible…
Por cierto, Francisco, mucho intervenir la misa tradicional e intervenir al Opus dei y a otros muchos movimientos tradicionalistas, pero ni una sola disciplina sobre estos sacrílegos de manual…
Esta gentuza que se cree, ya no sólo por las sacerdotisas si no por todo. Todod conjunto, mariconería, estola con los colores de la bandera gay que ya es el colmo, consagrando una mujer ni siquiera vestida de sacerdota, ni una casulla, altar parecido a un adorno de Navidad. Los obispos que consienten esto les debería de dar vergüenza, ser honestos y abandonar la Iglesia para fundar otra cosa.
Que se larguen de la Iglesia de una vez y nos dejen en paz, y Roma haría muy bien en no pasar el tiempo en Sínodos fracasados de antemano, falsas misericordias, de cohabitación con la malvada agenda globalista 2030 y se pondrían a gobernar que es su deber conforme a la Fe y la tradición de la Iglesia confirmando en la Fe y no confundiendo y haciendo el caldo gordo al enemigo que es a lo que se dedican desde hace mucho tiempo y Bergoglio con entusiasmo.
El resultado final de la investigación realizada por el gobierno episcopal según esta noticia:
https://www.pfarrei-effretikon.ch/aktuelles/medienmitteilung
Comunicado de prensa conjunto sobre el servicio de despedida del 28 de agosto de 2022
8 de septiembre de 2023 Iglesia de San Martín
Comunicado de prensa conjunto de la diócesis de Chur, la parroquia católica de San Martín y los párrocos interesados sobre la conclusión de la investigación preliminar canónica después del servicio religioso del 28 de agosto de 2022 en la parroquia de San Martín en Illnau-Effretikon
– La ceremonia de despedida de la antigua líder parroquial Monika Schmid el 28 de agosto de 2022 en la parroquia de St. Martin en Illnau-Effretikon atrajo gran atención debido a la amplia cobertura mediática, mucho más allá de la parroquia, la diócesis de Chur y Suiza.
El obispo Joseph Maria Bonnemain abrió entonces una “investigación preliminar canónica” para aclarar si este servicio violaba gravemente el orden litúrgico aplicable de la Iglesia católica. Todos los afectados también fueron incluidos en esta investigación.
Una investigación cuidadosa del asunto ha demostrado que no hubo violaciones litúrgicas graves en este servicio, cuya evaluación quedaría reservada al Dicasterio vaticano para la Doctrina de la Fe. Por lo tanto, no se requiere ningún proceso penal según el derecho canónico.
Sin embargo, en este servicio se ignoraron importantes normas litúrgicas que son vinculantes para toda la iglesia.
Por tanto, el obispo no puede evitar lanzar una amonestación formal a los pastores implicados en este sentido. El 15 de agosto de 2023, el obispo Joseph Maria Bonnemain emitió la advertencia adecuada a las cinco personas afectadas durante conversaciones personales detalladas con la expectativa de que estos errores no se repitan en el futuro.
Esto concluye este asunto para todos los involucrados.
Mons. Joseph Maria Bonnemain ha expresado su confianza en todos los pastores implicados y les agradece su comprometida labor pastoral por el bien del pueblo.
«La ceremonia de despedida, el domingo 28 de agosto de 2022, dio lugar a una concelebración de lo más singular, y a decir verdad, un sacrilegio.El «equipo litúrgico» llegó encabezado por la «Gemeindeleiterin», la encargada de la parroquia, con báculo en mano, sin duda para demostrar su papel de dirigente -los modernistas escribirían de «pastora». Luego, todos se quitaron los zapatos para imitar el gesto de Moisés frente a la zarza ardiente.
El sermón fue pronunciado por la mujer…»
Este sacrilegio tiene más de 50 años de antigüedad, ya se hacía en Holanda por los 1970, si es que no en los 1960, con dos variantes:
1. La mujer realizaba toda la misa, excepto la consagración de las especies, momento en que un viejecito anciano sacerdote se levantaba con todas sus fuerzas de la sillita y realizaba el acto de consagración.
2. La parroquia está totalmente gobernada por la comunidad parroquial, y el sacerdote debe de presentar a la misma el texto de su homilía y predicación, el cual puede ser aprobado o rechazado y enmendado.
Lo de la mujer con el báculo me parece sencillamente ridículo y risible…
Por cierto, Francisco, mucho intervenir la misa tradicional e intervenir al Opus dei y a otros muchos movimientos tradicionalistas, pero ni una sola disciplina sobre estos sacrílegos de manual…
Esta gentuza que se cree, ya no sólo por las sacerdotisas si no por todo. Todod conjunto, mariconería, estola con los colores de la bandera gay que ya es el colmo, consagrando una mujer ni siquiera vestida de sacerdota, ni una casulla, altar parecido a un adorno de Navidad. Los obispos que consienten esto les debería de dar vergüenza, ser honestos y abandonar la Iglesia para fundar otra cosa.
Que se larguen de la Iglesia de una vez y nos dejen en paz, y Roma haría muy bien en no pasar el tiempo en Sínodos fracasados de antemano, falsas misericordias, de cohabitación con la malvada agenda globalista 2030 y se pondrían a gobernar que es su deber conforme a la Fe y la tradición de la Iglesia confirmando en la Fe y no confundiendo y haciendo el caldo gordo al enemigo que es a lo que se dedican desde hace mucho tiempo y Bergoglio con entusiasmo.