| 21 diciembre, 2021
Con la bendición de Francisco. Y dejan de estar bajo la jurisdicción del obispo de Vich para pasar a la de Omella.
¿Y qué? ¿O qué más da? Porque ese convento no es nada. Desaparecerá en poco tiempo. Son la Caram y seis monjas más supongo que ancianas las seis. Eso se muere solo. O está muerto ya.
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Es un apaño que parece responder a la edad de Francisco, ya 85 años, y al riesgo para la Caram con otro Papa.
Entre argentinos anda el juego
https://www.regio7.cat/manresa/2021/12/15/convent-santa-clara-deixa-clausura-60678620.html
sor carambola y sus travesuras.
Ah! Era de clausura?
Esta monja argentina, y últimamente de Argentina no nos viene nada bueno, a la vieja y decadente Europa,
¿es monja de exclausura, es decir de fuera del convento, pues no está dónde tendría que estar, rezando, etc.?.
No entiendo como sus superioras, y el Obispo correspondiente, se lo permiten, la verdad.
Es la antítesis de una monja de clausura.
Todo lo que provenga de esta cotorra parlanchinera tucumana, no puede ser bueno. Vaya petarda.
Lo lamentable no es la noticia en sí. Es que sea apoyada por Francisco y por Omella.
A nadie le extraña de Omella, pues quiere en Barcelona cerrar las iglesias que funcionan para integrarlas con otras que son un desastre. Siempre fue muy amigo de Unidades pastorales, que si los laicos hagan de medio curas y suban a un pueblecito a leer una parábola, que una monja reparta la Eucaristía consagrada en la ciudad y cosas de esas. Nunca se preocupó del Seminario lo que es muy sintomático.
De Roma que vamos a decir. Francisco nunca gustó de la vida contemplativa pues es contrario a su naturaleza. El quiere influir, que hagan algo en la vida civil es decir en el mundo, eso lo tiene claro, y por eso es la política lo que le atrae. Lo suyo es charlar, realizar declaraciones un día. al siguiente lo contrario y hablar y más hablar. Es más de discernimiento como buen jesuita, pero parece que discernir tampoco discierne.
Francisco y de comparsa Omella parecen que todo lo que tocan lo fastidian, pues su política es liquidar lo que funciona y aupar el desastre y totnto el último que cierre la puerta. Francisco el destructor y Omella el liquidador, en el fondo son envidiosillos de lo que funciona y les refleja su mediocridad.
Entre el corrector automático por defecto y el ordenador del pleistoceno, a veces el texto sale con anacolutos o incorrecciones que desdicen del respeto al blogger, por lo que le pido disculpas. Por reducirlo a dos fallos: No hicieron caso y llevar a rastras. Mil excusas.
Yo creo que en este caso no se la puede decir nada.
Todos estamos llamados hacer el bien. Y si ha encontrado que esta en su vocación, el servicio a los más desfavorecidos y el resto de hermanas de su comunidad están de acuerdo pues bien.
La caridad es uno de los pilares de la fe católica.
Ahora bien sobre lo que comentan algunos lectores sobre ella. Eso ya es otra cosa. Pues estaría negando las verdades de la fe católica.
Por último una persona tan mediática que está cada dos por tres en los medios de comunicación sorprende que no sea capaz de atraer vocaciones.
Porque conocida lo es.
Lo que busca la Carmam es algo «lícito». No quiere que cuando queden 4 monjas la Federación cierre su convento, lo venda y se pierda la función social en la que se ha quedado ese convento. Para mí esa «licitud» sería que su convento tuviera una función religiosa, de dar gloria a Dios como monjas de clausura que deberían ser. El problema vino con este Papa cuando obliga a las monjas a federarse y la federación se queda con los bienes cuando se cierran los conventos y monasterios cuando solamente hay 4 monjas. La situación ya se ha vivido en Córdoba pues la Federación Clarisa en este caso hizo lo que quiso pero los herederos de las fundaciones de los conventos y monasterios (en C´órdoba el convento de santa Isabel) no se quedan de brazos tendidos y recurren esa venta en los juzgados. Es un problema grave pues las voluntades del fundador se dejan de lado. Y, lo peor, que de casa de oración se pasa a casa de perdición en muchas ocasiones.
La vida tiene que seguir su curso, igual que la muerte tiene que morir. Ni una lágrima y, cuanto antes, mejor.
Sor Lucía Caram va de independentista del separatismo catalán a independentista de la Federación Dominica de la Inmaculada de la cual formaba parte i de la cual se ha independizado.
Su tercer independentismo es sobre el obispado deja Vich y se va con los Omeya (mismo apellido dos veces y nada de resonancia musulmana).
He empezado a leer… Y me ha dado asco. No sería que la CARAM colgara los hábitos (nunca mejor dicho)? Podría decir sus «paridas», en Tv3(la tele autonómica de Cataluña)… Ay pero no, el hábito le da audiencia y morbo, verdad, monja del demonio!? Y por qué no te vas a tu País? Allí podrás chismorrear a gusto y crear una variante más de Teología de liberación… Para más lío, la sra. CARAM va a ser asesorada por un muy amigo de Francisco, Cardenal Omella, el que dice que nunca sabe nada, es simple mandatario, vamos el «chico(no tan chico) de los recados», el que no se hace responsable de nada porque es fiel reproductor de ejecución de voluntades ajenas… pero que no establece ni ORDEN NI BUENA DOCTRINA… vamos que la pobrecita monjita tendrá muy buen asesor para hacer y decir lo qud le venga en gana. Y el Papa, que no está para personas importantes y asuntos serios, recibe a esta «lianta» dos o más veces y,por lo que se aprecia en la foto, de «tu a tú»… Vaya un oar de peronistas montoneros… Y siguen creyendo que al Papa hay que obedecerle porque es inspirado por el Espíritu Santo? Uffff, cuánto daño hace la ignorancia y el Covid… Este par tienen el pase verde y ROJO!, Omella es ya caso aparte… Qué asco!
Es de lo más coherente que Caram deje de ser monja de clausura. Y más coherente sería aún que dejara de ser monja.
Si se lee la noticia, lo hacen sobre todo pensando en que la comunidad desaparezca, ya que no deben de tener esperanzas de recibir nuevas vocaciones.
Yo propongo que se cree una nueva congregación religiosa: las caramitas.
Más bien una secta, si las dirige la Caram.
¡Jo, que tropa!
Que las (…) el diablo.
Encuentro de cotorras argentinas.
Esto se parece cada vez más a la casa de tóqueme Roque.
Dice Caram, en la presentación de su hazaña, que es una suerte de carisma. Igual que negó la Virginidad de María, con palabras gruesas y groseras, se apropia ahora de la gracia, pues ese es el sentido del término. Fue especialista de primera hora, cuando se empezó a emplear el término en las sesiones del Vaticano II un profesor de la facultad de teología de Friburgo apellidado Nicholas. Si la monja hubiera leído ese artículo de su hermano de religión hubiera sido más comedida. Pero perdirle teología a Sor Caram es pedirle teología a Francisco. O pedírsela a Omella. O a Osoro. Por desgracia para la Iglesia, el monasterio de santa Clara, en cuanto institución monacal, tiene los días contados. Las seis monjas que lo habitan han alcanzado tal número con la agregación del convento de Monte Sión de Esplugas de Llobregat, que tuvo que cerrar.
Aunque los canonistas, al ser capricho del Papa, buscarán subterfugios jurídicos, la verdad es que es in tortazo a las monjas de clausura. Como si la oración no sirviera de nada, comparada con la agitación del comedor social, la acogida o asistencia o la enfermedad.
De lo que se trata, como ha explicado la argentina trotaplatós, es que, cuando, por ley de vida, no quede número suficiente de monjas para sostener la vida conventual, el edificio pase a manos de una fundación. Los que hemos sido patronos de alguna fundación sabemos que la voluntad del fundador queda mediada con los años por intereses espurios y la pérdida absoluta del control de la Iglesia sobre la misma.
Pese al bofetón que eso supone para las demas monjas de la Federación de la Inmaculada no me alegro con el ya se avisó. Porque se avisó a un provincial de la Provincia de Aragón, que se negó en redondo a abrir oídos. Porque se avisó a las monjas que una argentina que se declara independentista y niega la Virginidad, es decir, que tiene la cabeza en otros lugares, es una desgracia. No hicieron. Ni siquiera las grosería le restaron predicamento, como llevar a arrastras a monjas ancianas a votar la independencia o declararse enamorada de no sé quién. No me alegro con esa desgracia.
Otra buena obra de Francisco I el destructor, haciendo honor -como no podría ser de otro modo- a su «apodo».
«Mi claustro es el mundo», decía sor Lucía Caram en un libro que escribió en 2012.
Monja muy callejera ella.
No tiene sentido emprender un nuevo tipo de vida religiosa con una comunidad de ancianas… Inaugurar algo nuevo porque donde estoy no encajo…