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Bodas de oro matrimoniales

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El pasado sábado celebramos mi mujer y yo los cincuenta años de matrimonio. Con una misa y posterior agasajo. Fue evidentemente un acontecimiento familiar sin la menor trascendencia eclesial, aunque para nosotros sí la tuviera, y a los lectores amigos quiero darles cuenta de un hecho gozoso para mí.

Lo comenzamos con una misa verdaderamente hermosa en la parroquia de la aldea. Al párroco, tantos años de conocerle, nuestra gratitud por poner la iglesia a nuestra disposición. Él, con el número de parroquias que tiene encomendadas, no pudo asistir pero es un amigo de verdad. El «sancristán», que así les llaman en Galicia, conocido también de toda la vida, verdaderamente es «san». Allí estuvo para lo que hiciera falta y más. Hombre bueno donde los haya. Y de la «vicesancristana» sólo podemos decir lo mismo. Nos pusieron la iglesia como si fuera para ellos o mejor.

Concelebraron tres sacerdotes, dos de ellos amiguísimos, y el otro con entrañables lazos fraternos. Uno es de lágrima fácil y fue inevitable. La homilía nos pareció maravillosa y cariñosísima. Cuando al final de la misa, en el altar le di las gracias fue con la voz quebrada por la gratitud. Y la bendición que al final de la misa nos dio nuestro hermano con sus manos consagradas sobre nuestras cabezas pues también de vellos de punta. El tercero, amigo también queridísimo, mis nietos, amigos de sus sobrinos le llaman como ellos, tio …, y aquí su nombre familiar, fue el que estaba pendiente de todo. Gracias sentidísimas a los tres de parte de mi mujer y mía. No sé, creo que sí, si los presentes dimos testimonio del ved como se aman. Los tres sacerdotes lo dieron sobradamente de ver como nos amaban.

Cincuenta años de vida compartida, con cinco hijos maravillosos y cinco incorporados que son tan maravillosos como ellos, y once nietos que son nuestra alegría y nuestro gozo, es verdaderamente como para dar muchísimas gracias a Dios. Y es lo que hemos querido hacer en esa celebración.

Rodeados de hermanos, sobrinos, primos… Uno, o dos, que no es el caso de más precisiones, que no son gananciales, hemos heredado una vieja casa familiar que siempre está abierta a los amigos y por supuesto todavía más a todos los que en ella tienen sus raíces. Todos los años celebramos la que se ha ac5editado como la «cigoñada». Con gran contento de todos los que asistimos. Unos cuantos cigoñas más sus añadidos. Esta vez se incrementó con Núñez y Cantero tan hijos de la casa como los cigoñas. Más de medio centenar y faltaron unos cuantos por imposibilidad de fecha. Y con sentimiento por no poder estar. Fue un día feliz para todos.

Unas buenas relaciones familiares, y tan amplias, son siempre una suerte y una gracia de Dios. Procurad mantenerlas los que las tengáis y recuperarlas si algunos las hubierais perdido. Pero sobre todo  cuidad una vida como Dios manda que, salvo sucesos excepcionales, Él las bendice. Y mucho más de lo que pudierais imaginar. Si hoy traigo al Blog un acontecimiento familiar es para animaros a una vida feliz, para vosotros y para los vuestros, en lo que cabe en este valle de lágrimas. Aunque Dios a mí de momento me haya enviado muy pocas. Salvo las de la emoción. Que se las agradezco muchísimo.

No quiero terminar sin dedicarle a ella mi agradecimiento por cincuenta años de felicidad matrimonial, más seis de noviazgo. Algún defectillo tienes pero mil veces inferiores a los míos. Hace ya más de quince años, en aquella multitudinaria despedida que me hicieron mis tantos amigos de Renfe, Dios también me ha obsequiado con muchos amigos, te dije ante todos que le pedía a Él morirme con mi mano agonizante entre la tuyas. Hoy se lo sigo pidiendo.

 

 

 

Comentarios
47 comentarios en “Bodas de oro matrimoniales
  1. Enhorabuena. Hacen falta matrimonios así, que den testimonio de vida cristiana y de fidelidad, y que ejemplifiquen que, con Cristo y con María, sí se puede.

  2. Enhorabuena con mis mejores deseos para que sigáis dando excelente ejemplo a vuestra familia, a vuestros amigos y a todos los lectores de este blog.

  3. Muchas felicidades . Muchas gracias por haber sido fieles a Cristo y a la Iglesia tantos años. Les deseo todo bien. Que nuestra buena Madre Maria les siga protegiendo todos los dias de sus vidas. Adelante.

  4. Mi más sincera enhorabuena, Sr Cigoña. Que la discrepancia no nos impida alegrarnos de las dichas ajenas. Espero que sea usted feliz junto a su santa esposa unas cuantas decadas más!!!

  5. Muchas felicidades, Don PacoPepe y esposa. Sin querer limitar la misericordia de Dios, a por otros cincuenta. Que Dios les bendiga, les guarde de todo mal y les lleve a la vida eterna.

  6. Queridísimos: A todos un millón de gracias por vuestro afecto. Por supuesto que ampliables a alguno que pueda comparecer tras mi agradecimiento de ahora. Dios ha sido muy bueno con nosotros y entre sus bondades por habernos dado tan excelentes amigos. Muchos sólo virtuales pero os tengo muy en el corazón. Y con tantas manifestaciones de cariño todavía más.
    Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Nosotros los hacemos todos los días. Y vosotros sois un motivo más, y muy grande, de nuestro agradecimiento.
    Que El os pague, y es el mejor pagador, todo vuestro afecto. Mi mujer y yo se lo pedimos muy agradecidos.

  7. Hay algo de su «crónica» con lo que no estoy de acuerdo. Eso de «sin trascendencia eclesial». No… Sr. Fernandez… Ahí estuvo presente y de forma muy especial la Iglesia en su concreción histórica más fundamental: la Eucaristía celebrada además en la conmemoración jubilar del sacramento del matrimonio. Su alegría y felicidad por la familia que ha creado (auténtica Iglesia Doméstica) radica y se funda en un SACRAMENTO en el que Cristo se hace presente en la historia personal y sabemos que Cristo se hace presente porque la IGLESIA se compromete en la garantía de esa presencia. Mi más CORDIAL ENHORABUENA POR EL ACONTECIMIENTO ECLESIAL QUE CELEBRÓ… más acontecimiento por celebrarse en la sencillez de una pequeña aldea.

  8. «Como ramos de olivo en torno a tu mesa, así son los hijos de la iglesia»
    Salmo 128:3,Tu mujer será como fecunda vid en el interior de tu casa; tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa.

    Salmos 52:8
    Pero yo soy como olivo verde en la casa de Dios; en la misericordia de Dios confío eternamente y para siempre.

    Salmos 127:5
    Bienaventurado el hombre que de ellos tiene llena su aljaba; no será avergonzado cuando hable con sus enemigos en la puerta.

    Salmos 128:4
    He aquí que así será bendecido el hombre que teme al SEÑOR.

    Tras LA FE CATÓLICA, para un seglar ninguna Providencia de Dios como una esposa CATÓLICA. Dicho por un viudo hace ya 12 años.
    Enhorabuena para el matrimonio De la Cigoña por el medio siglo con-yugal. Y acción de gracias al Señor porque en este mundo vivir el Sacramento del Matrimonio 50 años es una bendición divina sin parangón posible, salvo el ministerio sacerdotal y la consagración virginal.
    Gracias a Dios y enhorabuena, Pacopepe y señora.

  9. Es una crónica emocionada y emocionante, y me permito unirme a esta celebración deseándoles salud y suerte para poder seguir así hasta que el Señor diga.
    Muchas felicidades a todos.

  10. Y serán una sola carne y un solo corazón.Compañera te doy, que no sierva.Quien ama a su esposa, a sí mismo se ama.Querido don Francisco José: como ve, no me atrevo a poner mis palabras y pongo las de Dios.¿Quién como Él?

  11. Estimado Don Pacopepe y Señora, mi más sincera felicitación y enhorabuena; que así sea apoyado siempre hasta el final el uno en las manos del otro. Gracias por el ejemplo, pues la constancia es el premio de un amor eterno. Yo les acompaño con mi oración. Que el Señor les siga bendiciendo en hijos, nietos, bisnietos y amigos a los que nos unimos en este blog. Vamos, que la canción de Roberto Carlos para usted se queda corta, pues me apresuraría a decir, que pasa usted del millón de amigos que pasamos por este su blog ¡Felicidades!

  12. ¡Gran principio para los próximos 50! Que bien sabéis guardar los secretos, ¿o es que no había sitio para un cura más, aunque fuese en silla de ruedas? Pero sin alguna oración no váis a librar y es posible que sin la invitación a una copita tampoco. Me alegro mucho por los dos y por cada uno. Que Dios os siga bendiciendo. Y vosotros diciendo bien de El.

  13. Muchas felicidades Paco Pepe. Que vuestro vocación hacia el matrimonio os acerque a la santidad y a Dios, y con el ejemplo inspiréis a otros tantos a hacer lo mismo.

  14. D. Francisco José, mi más sincera enhorabuena a su esposa y a Ud., por sus bodas de oro matrimoniales. Y a su esposa, mi más sincera admiración por aguantarle a Ud. tantos años.
    Que sigan juntos muchos años.

  15. Mi más sincera enhorabuena, don Francisco, a usted y a su señora. Que Dios les siga bendiciendo y que celebren muchos aniversarios más.

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